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Eras un destello de luz en una gama de grises, incapturable para mí cámara, mas, sin embargo, perfectamente tentador para atraparlo con mi corazon.
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Narra Moon
El fuego iluminaba la habitación oscura, y algunas veces pequeñas chispas color ámbar caían a la sedosa alfombra que decoraba el piso bajo los sillones de la oficina. Tan inmersa estaba en la madera siendo consumida por las hambrientas llamas que di un ligero salto al escuchar al retumbante voz de la directora Weems.
— Espero no haber tardado mucho, diversos asuntos me mantuvieron ocupada.
— No te preocupes, se que eres una persona ocupada, madre — murmuro poniéndome en pie, debo levantar la mirada unos centímetros para poder concretar contacto visual. Algo que no herede de su persona fue la altura, y aunque hubiese deseado medir un metro setenta, me quede estancada en el metro cincuenta.
— Y aun así debo preocuparme de tus salidas a mitad de la noche — ajusta su vestido antes de tomar asiento al frente de su mesa. Un suspiro brota de sus labios color carmesí, un gesto inconsciente que maquina al enterarse que su querida hija esta metida en un problema — La profesora Thornhill me ha dado tres recientes avisos sobre que Moon Weems ha sido vista fuera de su dormitorio pasado la hora de queda — su mirada proyecta cansancio, lo cual me hace sentir culpable de dichas faltas — Sabes muy bien que ser hija de la directora no te da privilegios sobre los demás.
Eso ya lo sabia, de hecho es absolutamente lo contrario, menos libertad, y más peso de responsabilidad sobre mis hombros.
— Lo se, es solo que los objetos bajo la luz nocturna son mas tentadores de captar con el lente de la cámara.
Las personas son mas tentadoras cuando la resplandeciente luna los ilumina, sin embargo, eso no llego a los oídos de mi madre.
— Entiendo que la doctora Kinbott sugirió que seguir con la fotografía ayudaría a que te sientas más conectada con tu alrededor, pero, te pido que tal pasatiempo lo manejes en horas tempranas.
— Es difícil que la inspiración nazca cuando uno se lo propone, las mejores tomas surgen de forma espontanea — ante sus ojos fulminante carraspeo — pero, intentare controlar el impulso y no salir a estas horas.
La conformidad que veo en su semblante me da la señal de que charla madre e hija a finalizado, la silla rechina al levantarme — Adiós, madre.
— Se tu gusto por la fotografía, no obstante — ese "no obstante" provoca que cierre los ojos por frustración —algo que puede facilitar tu conexión con el mundo que te rodea es interactuar con tus compañeros, he oído que el equipo de esgrima busca integrantes... — sugiere sin una pizca de sutileza
Sonrío forzadamente — No me llama la atención, aunque, si algún día estoy interesada serás la primera en saberlo — lo mejor en estos casos, es dejar su propuesta con una respuesta inconclusa, así evito altercados innecesarios.
