Ethan Blackford un rey alpha, lleva buscando a su luna durante 900 años; eso es mucho tiempo ¿no?, pero no ha tenido suerte, desesperado por encontrarla viajo por todas partes sin tener éxito.
pero resulta que fue ella fue quien llego a el, ahora...
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{Narra Ryan}
Durante estos 10 años en los que Ethan estuvo fuera resolviendo problemas internos de las manadas de Rusia y poner al tanto de al consejo de tantas cosas que pasan. A decir verdad son las manadas más problemáticas de Europa pero no son competencia para las latinoamericanas, esas sí que me sacan de quicio, todo el tiempo están en problemas.
En todo este tiempo que me he encargado de los asuntos de mi alpha me he dado cuenta que los alfas son unos flojos, no quieren hacerse cargo de sus propios problemas, ni de sus manadas, no sus vidas; dependen del rey en todos los sentidos, tanto en el ámbito económico como en el ámbito de liderazgo porque ni de eso se hacen cargo de problemas mínimos como una pelea de los jóvenes de su manada, todo se tiene que resolver Ethan o los betas. Lo cierto es que a los betas somos infravalorados, no nos toman muy enserió, siempre nos tienen como asistentes y casi nunca tenemos descanso.
Se perfectamente que Ethan es el rey pero para eso cada manada tiene alphas que se encargan de todo no para que se lo dejen todo al rey y por ende me lo dejan a mi porque él alpha no está.
Mi preocupación ahora no es esa, el problema que está rondando en mi cabeza es que el dinero que es para el sustento de la manada está desaparecido y lo más preocupante es que parte de esos ingresos va dirigido a el orfanato de la manada que no tiene uno 50 niños, son aproximadamente 300 cachorros desde recién nacidos hasta 16 años. Estoy seguro que todo el dinero queda en las manos de el gamma y el presidente de los omegas, ellos son los encargados de la repartición de los ingresos, la manada se cae a pedazos y el alpha no está enterado.
Un delicioso aroma llega a mis fosas nasales relajándome, sonrío a saber que mi ricitos de oro se acerca y me hace recordar como nos conocimos.
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(Recuerdo)
Salí a dar una vuelta después de haber traído a Ethan devuelta a casa, decidí tomar aire fresco ya que casi nunca tengo un descanso; me transformé y corrí con todas mis fuerzas liberando estrés y dejándome llevar por la adrenalina, la sensación del viento que se intercala ente mi oscuro pelaje, tierra fría que siento en mis patas y la sensación de libertad.
