Ranma
No puedo creer que lo que se suponía que era una rápida reunión con los organizadores del próximo torneo de artes marciales, iba a ser en realidad una especie de convención que duraría todo el día.
Que lata, con lo que detesto ir a estos eventos y justamente hoy que Akane no podía acompañarme, ayer cuando le sugerí que me acompañara, casi me arranca la cabeza, me dijo que era un desconsiderado por no entender que estaba muy estresada por haberse retrasado en la escritura y que iba a necesitar todo el día de hoy para ponerse al día.
Espero que lo haya logrado porque definitivamente necesito tiempo con ella, como la dichosa reunión era en las afueras de la ciudad, salí desde antes del amanecer de casa y no pude ni despedirme de ella, luego no pudimos coincidir al mismo tiempo para poder hablar por teléfono y tuvimos que conformarnos con intercambiar un par de mensajes de texto.
Entro a la casa, dejo las llaves en la mesa de la entrada, comienzo a aflojar mi corbata y camino en dirección a la sala. No puedo evitar la sonrisa al ver a Akane dormida en el sofá, está con su cabeza recostada en el respaldar, sus anteojos a punto de caerse y sus dedos encima del teclado de la laptop.
Me acerco sin hacer ruido, le quito los lentes y los coloco en la mesa, tomo la laptop, salvo el documento y cierro la pantalla, tomo a Akane en brazos, ella por instinto cruza sus manos alrededor de mi cuello y murmura
"Ranma, regresaste" – hunde su rostro en mi cuello aspirando mi aroma
"Si, estoy en casa" – contesto con una sonrisa y la llevo hasta el cuarto
Una vez que dejo a Akane en la cama, me cambio de ropa y me coloco un pantalón de pijama, está haciendo calor así que me quedo sin camisa, voy a la cocina, me sirvo un trago y me regreso a la sala, me siento en el sofá, tomo la laptop y me pongo a leer el escrito de mi esposa.
.
.
Akane
Cierro mis ojos y siento sus labios rozando suavemente los míos, el contacto es apenas perceptible, pero es suficiente para causar un revoloteo de mariposas en mi estómago.
"Ranma..." – murmuro sobre sus labios – "Te he extrañado tanto"
Él sonríe de medio lado, de esa forma tan segura y egocéntrica pero tan llena de sensualidad que me vuelve loca y me besa nuevamente, pero esta vez de manera hambrienta, sus labios se mueven sobre los míos con urgencia, como queriendo volver a conocer su sabor.
"Yo también te extrañé" – murmura en mi oído antes de comenzar a besar mi cuello
"¿Qué tanto" – pregunto ahogadamente
Él toma mi mano y la dirige a su entrepierna, donde puedo sentir su erección presionándose contra su pantalón, mi mano instintivamente se cierra sobre su miembro y comienzo a acariciarlo suavemente por encima de la tela.
"Akane..." – dice con la voz ronca empujando su pelvis contra mi mano – "apriétame más fuerte"
Atendiendo a su pedido, deslizo mi mano dentro de su pantalón y comienzo a masajear con fuerza su dura masculinidad de arriba hacia abajo una y otra vez, él cierra sus ojos y comienza a mover su cadera al compás de mis caricias. Me encanta la forma en que reacciona, el saber que soy la única que puedo hacer que un hombre tan fuerte como Ranma baje sus defensas y se entregue completamente en mis manos, me hace sentir como la mujer más dichosa y poderosa del planeta.
"Será mejor que pares" – detiene mi mano con la suya
"¿Por qué?" – lo miro a los ojos preocupada
ESTÁS LEYENDO
30 días
FanfictionAkane ha estado escribiendo novelas de romance a escondidas de su esposo, pero lo que comenzó como un divertido pasatiempo se ha convertido en algo más serio e importante. Cuando la editorial le pide que participe en un evento especial y escriba una...