Capitulo I

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Casiie Dill fue la primera en morir O, por lo menos la primera en mi clase de quinto grado, Estoy segura que para entonces miles de niños igual se habían ido

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Casiie Dill fue la primera en morir O, por lo menos la primera en mi clase de quinto grado, Estoy segura que para entonces miles de niños igual se habían ido...
Cuando las muertes salieron por fin a la luz el director prohibió estrictamente a los profesores y al personal que nos hablaran de lo que por aquel entonces se conocía como enfermedad de Everhat, En honor a Michael Everhat el primer Niño que había muerto víctima de la misma. Pero pronto alguien decidió ponerle el nombre de correcto: enfermedad neurodegenerativa idiopática aguda en adolescentes o ENIAA y la enfermera no había afectado únicamente a Michel si no a nosotros a todos nosotros...

Me llamo Olivia pero me dicen Liv, así solían llamarme mis padres , Mis padres y yo intentábamos mantenernos tranquilos ante tal caos, me mandaban a la escuela pero cuando la mitad de mi clase había muerto deje de ir.

Un mes más tarde, después de las primeras grandes oleadas de fallecidos, los Centros para el control y la prevención de enfermedades publicaron una lista de síntomas, resumida en cinco puntos, con el fin de ayudar a los padres a identificar si sus hijos corrían peligro de sufrir la ENIAA. A aquellas alturas, la mitad de mi clase había muerto.

Rápidamente, la situación pasó de mala a horrorosa. Una semana después de que enterraran a tres de los cuatro niños de mi vecindario, el presidente hizo un llamamiento a la nación. Mi madre y mi padre lo vieron en directo por la computadora , y yo lo escuché desde el otro lado de la puerta del estudio.   

«Ciudadanos norteamericanos», empezó el presidente Gray, «nos enfrentamos a una crisis devastadora, una crisis que amenaza no solo la vida de nuestros hijos, sino también el futuro de nuestra gran nación. Tal vez les  sirva de consuelo saber que en este tiempo de necesidad, aquí en Washington estamos desarrollando programas de apoyo a las familias afectadas por esta terrible tragedia y a los niños que tengan la bendición de sobrevivir a ella».

Mi padre es medico cirujano así que pudo presenciar el caos de los hospitales ante estas situaciones, Mi madre es maestra y ama de casa ,así que sin más niños en sus clases tuvo que dejar su trabajo, mis padres son hijos únicos por lo cual no tengo primos o primas que hayan enfermando o muerto.

Una tarde en mi cumpleaños número 11 mi mamá hizo un pastel estaba decorado con velitas de cumpleaños de color rosa, el pastel lucia delicioso y  por 5 minutos olvide todo el caos que pasaba, todas las pérdidas de mis amigos ,toda esa tristeza y todo ese miedo, cuando me pidieron que soplara las velas cerré los ojos y sople las velitas abrí los ojos y mis padres estaban aplaudiéndome, la tarde siguió entre juegos que hacían mi madre y mi padre conmigo, llegó la noche me encontraba en mi cama cuando sentí una sensación rara en mi cuerpo, me levante asustada y pude ver un camino de fuego al mi alrededor.

—Papá!,Mamá!—grite aterrorizada

rápidamente mi padre llegó  a mi  ya que el aun se encontraba despierto trabajando en la sala desde su computadora.

—Liv!—Grito mi padre y como pudo me saco de mi cuarto y me llevo hacia la calle.

Las llamas de la casa se hacían cada vez más grandes.

—Cielo quédate aquí iré por mamá.—

—Papá!—Dije entre lágrimas

Mi padre depositó un beso en mi cabeza antes de entrar de nuevo a la casa —No tardo cielo—la casa la cual ya se estaba cayendo a pedazos por el fuego.

Comencé a sentir que me faltaba el aire las lágrimas caían por mis ojos realmente me encontraba asustada ante la escena de mi padre entrando hacia nuestra casa y de pensar que mi madre seguía adentro —¡¡Mamá!!!!! Papáaaa!!!!—

Mientras veía la casa destruirse por el fuego los vecinos rápidamente salieron de igual manera rápido llamaron a la policía y a los bomberos

—Mamá! Papá!—

Rápidamente llegaron los bomberos y entraron a la casa, Iba a entrar cuando un militar me tomo por el hombro

—No puedes entrar niña es peligroso, ¿qué pasó?—Pregunto el uniformado.

—No lo sé el fuego comenzó de la nada—dije mientras lloraba

Escucho que un oficial habla por su radio. <<Si, traigan una ambulancia rápido dos adultos heridos con quemaduras graves y traigan a la FEP.>>

La ambulancia llegó rápido yo solo vi cuando se llevaron a mis padres en ellas.

—Que pasará con mis padres?! Quiero ir con ellos!—

—Lo siento niña aún no podrás verlos pero te llevaremos a un lugar mejor—dijo aquel militar.

No entendía a qué se refería a un lugar mejor, el único lugar mejor es junto a mis padres, en un instante llegaron unas personas vestidas completamente de blanco con mascarillas y algo que les cubría la cara.

—Aquí la unidad 654 contacto con sobreviviente pido permiso para llevar—

Abrí mis ojos al escuchar eso —¿Qué pasa a donde me llevan?— tenía un nudo en la garganta solo quería estar con mis padres.

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