☪️ ENTRELAZADOS {Mundo Darkness #1} ©️✔️

#27 | Protector del mal

   ☪️ A N N E T T

Creí que ya no tendría que lidiar con Azbel y sobre todo con el beso entre nosotros. Pensaba ocultarme dentro de Annebett, ella dar la cara por mi. Ella ser la heroína sin embargo parece que no quiere salir, no vuelve a dar señales. Parece que será Annett Weil quién cumpla sola la profesia.

Espero verla en mi reflejo del espejo sin embargo solo veo mi rostro. Aparto mi cabello de mi mejilla, es raro ya no tener mi cicatriz, la marca se desvaneció en el momento de la última elección.

Me inclino demasiado al espejo, al ver el reflejo de la cama, el recuerdo de hace unas horas me invade. No puedo olvidar el beso con Azbel. No puedo borrar esa chispa que se encendió dentro de mi. No evito sentirme culpable cuando fui yo quien lo alejé y prácticamente lo terminé corriendo.

Inflo mis cachetes y coloco una mano sobre el espejo.

—Vamos Annebett, dame una señal de que sigues ahí.

La espera es eterna, la frustración de inmediata al alejarme y resoplar.

Humedezco mis labios varias veces, siento una intensa sed, sed de sangre.

Decido salir de una vez por todas, enfrentar lo que tenga que enfrentar. Observo mi reflejo por última vez, peino mi cabello con mis dedos cuando veo hilos enrredados entre mis dedos. 

—Ay no —emito asustada y regreso la vista en el espejo.

>Vas a cambiar, será doloroso y tu cuerpo no podrá soportarlo<

Resuenan las palabras de Azbel en mi cabeza.

Rápido limpio una lágrima rebelde de mi mejilla. Tomo una profunda respiración y peino mi cabello hasta atarlo en una cola alta.

Me volteo y termino por salir de la habitación. Bajo cada escalón buscando a Azbel sin embargo mis ojos no notan su presencia. Con un suspiro de alivio corro hasta la cocina.

Al llegar me dirijo al pequeño gabinete que parece refrigerador donde conservan los alimentos. Cuando lo abro lo encuentro completamente vacío, sin una botella de agua, alcohol y mucho menos la sangre que busco.

Maldigo y lo cierro con fuerza.

—¿Annebett?

>¿Tan pronto tenía que enfrentarlo? <

Me paralizo un instante al escuchar su voz.

—Sigo siendo Annett —respondo después de unos segundos— ¿hasta cuándo me nombraras por mi real nombre? Casi nunca lo haces —sin verlo me volteo y acerco a la mesa.

—¿Tú dirás mi nombre?

Cruzo mis brazos y enfoco la vista en el demonio frente a mi.

—Buen intento Bel, pero no repetiré 8 veces tu nombre completo.

Se acerca con una mano oculta detrás de su espalda hasta detenerse del otro lado de la mesa.

—Para mi eres la Annebett de este mundo —sus ojos me analizan, oculto los nervios por su intensa mirada— Sigue oculta.

Asiento

—No quiere salir —me encojo de hombros— ¿creés que debería invocarla?

—No puedes invocarla, ella te va a controlar en el momento que ella quiera —hay una pizca de molestia en su rostro— O tú no quieres irte.

Entre abro mis labios sin emitir palabra.

Acto seguido su mano oculta la muestra mientras sostiene una copa metálica. El diseño parece antiguo. La arrastra en mi dirección.