ℕ𝔼𝕍𝔼ℝ𝕃𝔸ℕ𝔻

¿𝐐𝐮𝐞 𝐡𝐚𝐜𝐞𝐬 𝐚𝐪𝐮𝐢?

•

•

•

•

KAIA MOORE

Caminamos durante muchísimo tiempo, noté como mis piernas comenzaban a flaquear y sabía que en cualquier momento terminaría tumbada en el suelo por el cansancio. No se con claridad cuánto tiempo estuvimos caminando, pero si sabia que el sol empezó a bajar y eso indicaba que se aproximaba la tarde.

Miré a mi alrededor y seguimos caminando por el frondoso bosque. Después miré a mi amiga, la cual tenía la misma expresión de cansancio que yo, después mi vista recayó en Wayne, el cual tenía una expresión seria la cual no mostraba ninguna emoción, y finalmente miré a Nathan, el cual iba abriéndonos camino entre los arbustos y plantas con una expresión divertida. 

Joder, este vive sonriendo o que? Pensé internamente mientras lo miraba. 

Lo que tenía a primera vista era un plano de él de espaldas por lo que lo analicé durante un rato. Nathan al principio nos dio una impresión de que era el pirata más arrogante, pero la verdad es que hasta ahora nos había demostrado que era buena persona y con un gran sentido del humor. A simple vista, en lo que me fijé fue que era un poco más alto que yo y que era bastante corpulento, mientras que Wayne cuando lo conocimos ya nos pareció que era bastante alto y fuerte, pero al verlo al lado de Nathan era un poco más pequeño.

Un golpe en el brazo me sacó de mis pensamientos y me hizo pestañear varias veces, miré al responsable de tal acto y fue Nixie quien me miraba con una cara de: que te pasa? Yo solo le hice un gesto de que no me pasaba nada, que no era nada, volví mi vista al frente y caí en cuenta que habíamos frenado, me percaté de que todos miraban arriba de los árboles y fue allí cuando me asombré por completo, una casa enorme estaba allí arriba, sujetada por varios árboles.

— Ya hemos llegado — dijo Nathan con una expresión de orgullo.

— Me había olvidado por completo de la existencia de esto — dijo Wayne cambiando de expresión por primera vez en bastante tiempo a una más relajada.

— Es asombroso — dijo Nixie mientras que en sus ojos aparecía un brillo de emoción.

— Vamos a dormir aquí? — hablé por primera vez desde que salimos de la playa.

— Si, porque sino no se donde vamos a dormir — dijo Nathan ladeando la cabeza de lado y girándola un poco para poder mirarme.

— Hace mucho tiempo que no venimos aquí — dijo Wayne con una mirada melancólica.

— Yaa, solíamos venir mucho aquí antes de lo que pasó, y es el primer sitio que se me ha pasado por la mente cuando no teníamos lugar donde quedarnos — dijo Nathan dejando de mirarme para que, nuevamente, esa vista recayera en Wayne.

— Tu no has de volver al barco de tu padre? — pregunté curiosamente mirando a Nathan con una ceja alzada.

— Debería, pero no lo haré, total, dudo que le importe que esté aquí — dijo Nathan restándole importancia.

NIXIE ALLEN

Después de poner por primera vez un pie la cabaña, mi asombro no pasó desapercibido, era impresionante la magnitud de aquella cabaña. Si ya parecía grande por fuera, por dentro lo era aún más. Me quedé dando vueltas sobre mi eje analizando todo su interior, mientras que, mi amiga repetía mis actos.