Tiempo

Capítulo 26

"Hay una primera vez en todo"

—mentiras nada más

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-El punto de vista de Jennie-

[[Sucesos que ocurrieron antes de que Lisa viajara al pasado]]

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<<Primera y todo>>

-Meses después-

"Recuerdo que estás estudiando moda, deberíamos visitar Milán entonces" Taehyung sonrió juvenilmente. Estamos aquí en un merendero con una vista maravillosa. Salir se convirtió en nuestro hábito diario, él me trataba como se comportaba conmigo antes. Gentil, atento, considerado y bien planeado.

"¿No vas a volver a Corea?" pregunté, él respiró hondo y asintió. Había en mí una pizca de decepción. "Entonces lo que estamos haciendo ahora es inútil", dije sin rodeos. "No lo es, sé que sigues enfadada conmigo. Pero estoy aquí para reconquistarte". Rebatió fingiendo una carcajada. "Mis abuelos te trajeron con ellos para convencerme", dije con franqueza.

Negó con la cabeza, Taehyung acarició mis dos manos y me miró fijamente al alma. "Volví para arreglar mi relación contigo, Jennie. Lo creas o no, no hay día en que no te invite con tus abuelos. No puedo contactarlos directamente porque no me han perdonado. Cuando mencionaron que visitarían a tu familia, pedí ayuda a mi padre para poder verte y hablar contigo", explicó.

"¿Por qué ahora? ¿Por qué no antes? ¿Por qué tienes que complicar las cosas?". Me tragué un nudo imaginario, decir esas palabras me causaba dolor de garganta. Me cuesta respirar. "Me cegó la ambición, quiero tener éxito. Para poder ser merecedora del respeto de tu familia". Se quedó atrás.

"Demasiado tarde" murmuré, nuestras manos se desgarraron, al igual que nuestras promesas de que al final estaremos juntos. "¿Así de fácil Jennie? ¿Terminarás con nosotros?" Levanté la mirada hacia él "¿Crees que lo tuve fácil? Mi agenda no tiene saltos en llantos y preguntas. Te tendí la mano, mis textos no fueron vistos, mis llamadas fueron declinadas, las cartas ya no funcionan y los emails rara vez los abres. Me alejé de nuestros amigos, Nayeon fue la única que me soportó. Construí muros que me protegieran porque tenía tanto miedo de que me hicieran daño otra vez".

Tiró de mi brazo y me envolvió con su "lo siento, lo siento" antes de que pudiera protestar, aprisionó mi cara con las palmas de sus manos y me besó profundamente. "Quítate", balé, sin fuerzas para apartarlo. "¡Dije que te quites!" con gran fuerza le empujé. Me toqué furiosamente los labios "¿Por qué hiciste eso? ¿Te has vuelto loco?" Él también parecía sorprendido "Me dejé llevar... Me disculpo no era mi intención que se convirtiera en eso. Solo quiero que me perdones y empezar de nuevo" murmuró débilmente.

"No puedo Taeh, lo siento" su sonrisa que solía adorar era una nube de humo que se adelgaza y desaparece. Fue el primer rechazo que le di, y para ser justos me dolió el corazón verlo en apuros. Me obligué a ganarme la confianza de mi abuelo. Hemos estado juntos un par de citas, de vez en cuando.

Sin embargo, en esos meses, el cariño que le tengo a cierta mujer rubia me lleva de vuelta a ella cada vez. Por fin, cuando la luna se tome su tiempo para brillar, seré suya. Aunque piense que ella no puede poseerme de día, juraré que me tendrá de noche o en una situación de agujero y esquina.

A la larga, me convertí en la persona que nunca esperé ser. Una chica universitaria que llora y bebe por el consuelo de otra chica. Para empezar, Lisa estaba perdida con el repentino cambio de mis acciones hacia ella. De ser reservada a una persona que se apega y crece para amar su existencia.

"¿Qué puedo hacer para que cambies de opinión?" el hombre con el que una vez soñé se planta ante mí dando lo mejor de sí para mostrarse optimista. "Nada, tengo que irme" con las piernas revueltas me hago a un lado. A esta hora, Lisa se está preparando para nuestra cita. "No me dejes por favor" su mano rasposa me abstiene de caminar.

"No, alguien me está esperando. No puedo perderla..." Así que cuando su inflexible agarre se aflojó, salí disparada hacia la libertad y no miré atrás. En el taxi estaba en la cumbre del pavor, suplicando al conductor que viajara deprisa.

Mientras me ubico en el mar de gente, me limpio constantemente los labios. Me da igual magullarme y sangrar, no quiero dejar rastro de él. Las lágrimas se derraman por mis frías mejillas mientras siento que los remordimientos se apoderan de mí. Mis temblorosos labios agrietados se alzan en una sonrisa satisfecha cuando la veo tranquilamente sentada en el banco. Su sudadera negra con capucha le daba un aspecto más acogedor.

"Lisa" levantando mi mano derecha la saludé, la mujer que saca lo mejor de mí se levantó e hizo lo mismo. Haciendo caso omiso de las miradas que nos rodeaban corrí hacia ella, derritiéndome en su abrazo. "Nini estás temblando" me acurruqué más en su pecho. "Lo siento" Sentí que necesitaba decirlo. "¿Eh?"

"Lisa, no tienes que esperarme por la noche. No tenemos que esconder nuestras citas, y ya no debes sentirte insegura. Porque a partir de hoy, soy oficialmente tuya" Lisa se paralizó, parada en seco giró su nariz hacia mí.

"Jennie no es el día de los inocentes, así que por favor no bromees" incliné la cabeza hacia arriba y esbocé una sonrisa sin arte. "No estoy mintiendo" Respondo, mi corazón se rompe de felicidad cuando lágrimas de alegría decoran los impecables ojos redondos de Lisa.

"¿Puedo llamarte mía ahora?" Asentí "¿Puedo presentarme como tu novia?" Volví a asentir "¿Nos daremos abrazos y besos?" y de nuevo asentí. "¿Celebraremos aniversarios durante muchos años?" por tercera vez asentí. "Gracias, gracias" exclamó y me abrazó como si su vida dependiera de este momento.

"Jennie Kim es mi novia... no lo asimilo. ¿Cómo debería llamarte? ¿O cómo deberíamos llamarnos?" Pregunta emocionada. Nos separamos y entrelazamos nuestras manos. "¿Lo que nos parezca bien?" le sugiero. "Yo prefiero llamarte cielito o amor. Es música para los oídos ¿no crees?" Me quedé callada un segundo, decidiendo cual es cual. Pero Lisa fue rapida "lo siento si estoy siendo demasiado rápida-" la callé colocando mi dedo sobre sus labios.

"Estoy pensando cual es mejor de los dos, no hay necesidad de ponerse paranoica" entonces beso sus mejillas. En un parpadeo, se pone roja como una manzana. "Sabes qué, usemos los dos" me estremezco cuando ella me devuelve el gesto devolviéndome el beso. "De acuerdo, amor" Lisa no es mi primera, pero se convirtió en mi todo.

Esa noche es especial que otras noches, estaba llena de sinceridad y dedicación. Deje de lado los valores y las posibles reacciones negativas que recibiera de mi familia. Lisa y yo podemos ser nosotras mismos con nuestros amigos, pero no cuando mis padres y abuelos están cerca.

Al anochecer, leí los mensajes de Taehyung. Era todo sobre él disculpándose, pidiendo otra oportunidad, y que nunca dejará de perseguirme hasta que estemos bien. Estaba contemplando si debería contarle lo de Lisa, no quiero arriesgarme tan pronto. Pero hay una cosa segura, ya no lo quiero.

© Todos los créditos a la autora original, @LiniUniverse.