𝐒𝐄𝐄 𝐘𝐎𝐔 𝐀𝐆𝐀𝐈𝐍

𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝐔𝐍𝐎.

Pov: Daniela.

-No mames Juan que así no, tate quieto chingada madre que luego choco.

Regañe a mi primo que no dejaba en paz a mi otro primo, le subí a la radio cuando escuche ese típico acordeón de mi patroncito Alfredito, mis primos al oírlo también se quedaron quietos y fingieron tocar el acordeón.

-¡Traen la cola entre las patas, no balearon a cualquier salareado!

Cantamos todos juntos a todo pulmón la canción, di la vuelta en un alto y aparque afuera de la casa de doña Lety; es una gran amiga de mi madre y muy buena señora, me encanta echar chisme con ella y da grandes consejos.

-Orale morros, ayuden a bajar las cosas.

Baje el espejo y acomode mi cabello, mire mi vestimenta y me alce de hombros, equis, doña Lety ya me había visto en pijama además es de Hello Kitty.

"Mami repete' el flou' "

Cuando se acabo la canción baje de la camioneta mirando como los chicos cargaban la comida, me acerque a la puerta a tocar el timbre y segundos después escuche un pequeño sonido dando la indicación de que la puerta se abrió, me hice hacía un lado para dejar a mis primos entrar y después los seguí cerrando la puerta detrás de mi, abrí la puerta de la casa sonriente.

-¡Ya llego la más hermosa de esta casa!

Grite con diversión y doña Lety nos miraba desde la sala sonriendo.

-Ay si, ya quisieras pinche chancluda.

Le di un zape a mi primo que dijo eso y el otro rió.

-¡Mis niñosy mi niña, buenas tardes!

Nos dimos un abrazo y mis primos dejaron las cosas en la mesa.

-Nombre doña Lety mi mamá no vino porque se quedo bien dormida.

Revise que todo llegara bien y me gire a verla, ella se rió y hizo un gesto con su mano restándole importancia.

-No te preocupes mija, está bien, mejor cuéntame ¿Cómo estuvo la fiesta?

-Ay doña Lety discúlpeme la palabra pero se hizo un desmadre, todos pararon hasta las ocho y pos ya sabrá, pero yo son un pan de dios y me dormí a las 4.

Junte mis manos a la altura de mi pecho y pestañe varias veces tratando de hacer el gesto de un ángel, mis primos se sentaron en el comedor después de que la amigable señora los saludara.

-Pero pues ya sabe, para usted la comida y el chisme nunca falta pero si hizo falta en la fiesta doña Lety.

Hice un puchero y ella me dio una pequeña palmada amigable en el hombro.

-Ay mija sabes que si me hubiera gustado ir pero mi hijo volvió y pues nos salimos.

Asentí riéndo, algunos recuerdos de ese tortilla de harina llegaron a mi mente. Literalmente el día de ayer supe que él vendría pues fue cuando doña Lety llamó para avisar que no iría, después de años él volvió.