VIOLENTOMETRO- Sproier// Spreen x Roier

Bromas Hirientes

21:30hs - Argentina

Ya es la hora, la hora de que dos tortolos se encuentren en el aeropuerto de Ezeiza a casi 40 minutitos de Puerto Madero, dónde vive Iván Buhajeruk, alias Spreen.
Allí estaba él esperando con su celular en mano boludeando en Instagram, más que nada entrando y saliendo de la aplicación con nervios.
Iba a ver de nuevo a Roier, Sebastián, pero ahora era distinto a la casa Madrid, ahora ya llevaban 2 meses siendo novios virtualmente, por lo tanto, la situación era muy diferente.

Roier por su lado estaba muy muy contento por verlo, quien diría que Spreen es bisexual, el pansexual, lo único que quería era correr a abrazarlo con todas sus fuerzas y pasar tiempo con el conociendo Argentina, o bueno Buenos Aires por lo menos; para eso se había tomado vacaciones de un mes y medio de twitch.

Se abren las puertas del avión, se deja a la vista de los primeros a salir esa especie de tubo arrugado que te lleva a el aeropuerto, a la parte principal.

"-Linea 527, desde México a Argentina, ha aterrizado-"

Una voz femenina en los parlantes de todo el aeropuerto.

Iván guarda el teléfono en su bolsillo con rapidez y un poco de despiste, se levanta del incómodo y duro asiento negro en el que estaba esperando y sale a encontrarse con tal persona, Sebastián, a la puerta de vidrio con cartel de 527. Mueve su cabeza de lado a lado en intento de asomarse a ver entre la gente que estaba esperando a sus familiares amigos y etc.
Luego de unos segundos se ve cierta cara familiar; unos rizos castaños oscuros con una bandana negra típica de él, un buzo negro con letras rojas y un jean del mismo color pero un poco desgastado.

Spreen levanta su mano alto en modo de seña.

- Che Roier! Sebas! Acá!

El castaño busca con su mirada a la voz de acento argentino que lo estaba llamando entre cierta multitud, busca y busca hasta que por fin, y en cuestión de segundos largos, encuentra esos hermosos ojos con pestañas súper grandes que con alegría lo miraban.

- Spreen!

Corre hacia el con muchísima emoción, haciéndose espacio entre la gente sin importar si tiraba alguna que otra señora mayor, deja su maleta a un costado y lo abraza del cuello con bastante fuerza y cariño.

- Te extrañe un chingo wey

Decía mientras apoyaba su cara en su hombro siguiendo el abrazo.

- Yo también capo- soltando un poco el agarre por qué, como ya sabemos, no es de dar mucho cariño el poste de luz- che nomás una valija trajiste?

- Pues si, la ropa se usa, se lava y se vuelve a usar, no? jajaja

- Y si pero no vas a estar el mes y medio repitiendo ropa, quedas como si fueras re sucio boludo

- Ay no pasa nadaa, nadie me va a decir nada al fin y al cabo.

- Boe, no importa, vamos?

Y los dos se subieron al auto dejando la maleta grande y una mochila mediana en el baúl del auto, emprendiendo el camino de casi 40 minutos a Puerto Madero, a la casa de Spreen dónde se quedaría Roier estás vacaciones improvisadas.

En el auto había cierto silencio profundo, no incómodo, para nada, pero silencio, ni siquiera música de fondo, silencio que fue interrumpido por Spreen; quien iba muy concentrado con los ojos en la ruta.

- Eu no hacia falta que me abraces en el aeropuerto...

- Por? -dice Roier despegando la vista de su teléfono y apagandolo.

- Alta vergüenza boludo, nos miraron todos

- Ay wey, que pasa si nos ven todos? de pinches envidiosos nomás jajas

- No, posta boludo, no hacia falta tanta muestra de cariño- dice con un tono más seco que el desierto

- Que no te gusto mi abrazo?

- No no, si me gustó per-

- Ps entonces no te quejes pestañudo

- ... Mira, yo también te quiero; pero no es para tanto, quedamos re gays así, van a pensar que sos mi novio, y que asco

- ah... pensé que era por otra cosa, ya sabes; eres medio arisco, pero está bien, no más afecto en público supongo...
"que asco"?- dijo mirando al suelo con desilusión y confusión.

El silencio volvió y ahora sí era silencio tenso, silencio incómodo, que duró 5 eternos segundos de parte de ambos, más eternos para Roier esperando salir una respuesta de la boca de Iván, una respuesta que arreglará aunque sea un poco lo que dijo.

1...
2...
3...
4...
5...

- Nah era joda boludo, no te bajonies-
Dice Spreen soltando una carcajada y pegándole un codazo a Sebas quien soltó un leve suspiro.

- Ay pendejo me asustaste, te juro que iba a llorar estúpido

- Joda de bienvenida pa

- Pero si me quieres?

- Si obvio, nunca creas lo contrario, en ninguna ocasión, nomás estaba aburrido.

- Está bien, más te vale, eh?

- Bueno, bueno- acompañado de una pequeña risa clásica del streamer luego de hacer una broma muy tonta.

Y así los pensamientos malos que habían invadido a Roier por ese momento; se fueron, se desvanecieron, y volvió el pensamiento constante que lo volvía el loco enamorado que era ahora, "Lo amo tanto" que se mantuvo hasta la casa de Spreen dónde organizo sus cosas, con ayuda del pelinegro, en un lugar del ropero de la habitación reservado para él, se tardaron bastante ya que Roier le contó básicamente todo el viaje del avión a Spreen, pero de terminar de ordenar las cosas, terminaron.

El día fue culminando con una bonita cena, a lo argentino improvisado, unas empanadas de carne, pollo, y paleta y queso por pedidos ya y una Coca grande para compartir entre los dos, puras risas, carcajadas, y algunos halagos colmaron la habitación hasta la hora de dormir, 12:40 de la noche.

Fin del primer capítulo muchachada, aunque no hay nadie leyendo jaja, esperan al próximo, votan, byeeee 💕.