Bebé Robot (Definitiva)

Quiero ser papá

En la oficina no había un alma. Por esta razón Ceren entro con el mayor de los cuidados y empezó a buscar por todos lados, cuando llego a la oficina de Selin se escondió tras la columna al ver que hablaba por teléfono.

- ¿Qué pasa? – Pregunto una voz distorsionada a la rubia

- el bebé aún tenía latidos. Irán a otra consulta – Le dijo ella furiosa alzando la voz – Imbecil, se suponía que con la cantidad que le diste los primeros 3 meses ya no tenía que lograrlo –

- - No soy asesino ni médico, eso pensé. –

- - Pues pensemos mejor, hay que separarlos antes del análisis de ADN. –

- - Selin, mírate al espejo –

- - ¿Qué? –

- - Eres una mujer hermosa, deseable, recuérdaselo y si no lo logras, miente. Eda vera que no la quiere, vendrá hacia mí. Y tú hacia él cuando vea que ella no lo quiere a kilómetros. –

- - Ya lo intente –

- - Pues por eso, si lo haces ahora ella ya tiene un recuerdo en su cabeza de que él ya la traicionó y cómo no podrá defenderse. Adiós Serkan Bolat, luego nada me apartará de Eda –

- - ¿Y si no funciona? –

- - Funcionara, no hay nada más inestable que una embarazada –

- Esta embarazada pero no es tonta, tiene más vidas que un gato –

- Esta embarazada, eso quiere decir que él no la mira con deseo, dale ese deseo que él no recuerda –

- No soy una ramera –

- ¿Lo quieres? Porque yo la quiero a ella y si con ese liquido no funciona. Hay que minar su cerebro. Su cerebro ahora es una maquina de llorar por cómo se ve al espejo, tú eres todo lo que ella no es físicamente y mentalmente. Aprovéchate de eso –

- ¿Y tú que harás? –

- El resto, ya intentamos envenenandola, ahora al revés, tú haces el trabajo sucio, yo la consuelo, cuando vea que yo si soy hombre y el no. No para respetar a la madre de su hijo al menos, se quedará a mi lado. –

- ¿Y yo? –

- Tú eres la que se queda con él a consolarlo, amarlo y cuidarlo cuando vea que Eda huye de él. La que le demuestra que todo lo que decía era cierto. –

- Todo muy bonito, ¿Y el mocoso o mocosa? –

- Eda esta frágil, otro mal empujon, un mal golpe y adiós –

¡Tack!

- ¿Qué fue eso? – Pregunto él

- No sé, un golpe –

- Dijiste que estabas sola –

- Lo estoy –

- No, se nota que no. Ve a ver. –

En ese momento Ceren se aterro y quiso tratar de correr pero se dio cuenta que su pie estaba torcido, se arrastro cómo pudo hasta su despacho y aguantando el dolor logro marcar el celular de Ferit.

- Atiende, atiende, por favor – Suplico

- Aló, amor – Contesto

- Ferit, Ferit. Ayuda –