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Entre al baño para poder bañarme, tenía la ropa manchada de tierra por la caída en el jardín, mis rodillas se veían sucias así que era mejor limpiarme completamente.
Cuando termine de ducharme me senté en el balcón para que el cabello se secara más pronto, me puse a leer un poco para matar el tiempo. Leía un libro llamado Crepúsculo, era mi saga favorita y gracias a mi padre conocí los libros y las películas. Siempre soñé con un Edward Cullen o un Jasper Hale, pero desafortunadamente solo era ficción o bueno no del todo.
Un ladrido me hizo apartar mis ojos de la lectura, me asome por el balcón y vi a Tom caminando con un perro enorme de color negro. No sabía que los Riddle tenían mascotas, me fui a poner unos tenis y baje, yo amaba a los animales y siempre que encontraba uno en la calle lo avariciaba.
Llegué al jardín; Tom le lanzaba una pelota y el perro iba por ella, era increíble ver lo veloz que era. A Tom le sorprendió verme ahí pero unos segundos después su semblante cambio a uno amigable, me dio la pelota para que se la lanzará al perro, la tomé y la lance lo más lejos posible. Era obvio que no fue tan lejos como la de Tom.
-¿Cómo se llama? -pregunte sin apartar la vista del perro.
-Anubis -respondi Tom.
-Asi que son fan del antiguo Egipto eh.
-Yo si -sonrio.
Estuvimos jugando con Anubis un buen rato, la primera impresión de Anubis podría causar un poco de temor, pero cuando convives con el suele ser la mascota más tierna y juguetona del mundo. Volvimos a la casa ya que empezó a lloviznar, nos secamos con unas toallas que Tom había sacado del armario que estaba debajo de la escalera.
-Creo que será mejor que vuelva a la habitación -dije sería.
-Yo voy a la mía, en un día partimos a Hogar y no tengo mi equipaje preparado -caminamos hacia la escalera- ¿Estás emocionada por conocer Hogwarts?
-Am algo -menti.
Al llegar al pasillo escuchamos gemidos tan fuertes de una mujer, ambos nos sonrojamos. A mí me tomo por sorpresa pero Tom parecía ya estar acostumbrado.
-Creo que tú hermano se está follando a alguien ahí adentro -le di una palmadita en el hombro ya que se había cubrido la cara con sus manos.
-Lo siento TN, es solo que Theo es tan.... -suspiro- A veces es muy irresponsable y hace lo que se le da la gana.
-Es rebelde entonces -dije.
Tom asintió, los gemidos dejaron de escucharse. Nos íbamos a retirar de ahí pero Matheo salió de la habitación como Dios lo trajo al mundo. Debo admitir que está... ¡No TN no!
