INEVITABLE

Capítulo 19: Lealtad

Dos hermosas mujeres se encontraban en una oficina, una de ellas hablando de lo que la atormentaba, mientras la otra solo escuchaba atentamente.

¿Qué debo hacer?, decía Sanae, dejando caer unas lágrimas hacia el escritorio donde estaba.

La respuesta a ello, solo puedes darla tu Sany, ya que de ello dependerá tu futuro, por lo mismo te aconsejo que pienses con calma todo lo que has vivido estos días, respondió Kumi, haciendo una pausa para agregar: Le diré tu secretaria que te traiga un té relajante, y luego de que lo tomes, te recomiendo que vayas a tu casa, yo puedo suplirte, yo ya no tengo más pendientes.

¡Gracias! no me siento bien, necesito descansar y meditar, contesto la castaña.

Así es, dijo Kumi.

En tanto: "Departamento de Tsubasa"

Sigue apagado, pensó el joven, al tiempo que el timbre del departamento sonó.

Tsubasa se dirigió a abrir la puerta y fuera de ella encontró a su ex y amiga, Larissa, quién traía en sus manos unas bolsitas de papel.

Fui de compras al supermercado y me encontré ese pastel que tanto te gusta y quise traértelo, decía la joven.

Pasa, pronunció Tsubasa.

¿Qué tienes?, dijo intrigada Larissa, mientras entraba al departamento.

Creo que debí esperar un poco más, agrego el apuesto joven, mientras caminaba junto a su amiga a uno de los sofás que había en el lugar.

¿No comprendo?, contesto Larissa, entregándole una de las bolsas de papel a su amigo.

Tuve la plática que tanto deseaba con Sanae, dijo Tsubasa, con cierta nostalgia, mientras dejaba la bolsa sobre una pequeña mesa.

Ello es bueno, respondió la joven.

Lo sé, y aunque entre las posibilidades estaban que ella se encuentre confundida, duele, pronunció el joven de cabello desordenado, haciendo una pausa para acotar: Le pedí que lo pensara y también le dije que yo aceptare lo que ella decida.

Hiciste bien, eso demuestra cuanto la amas, contesto Larissa.

Así es, la amo, y su felicidad para mí siempre será primero, así me duela, yo respetare la decisión que tome y me quedare junto a ella como su amigo, pronunció con firmeza Tsubasa.

Valiente decisión, dijo la joven.

Lo sé, porque estoy frente a una valiente, respondió el joven de cabello desordenado.

Sí te sirve de consuelo mi persona, te diré algo, el amor es desear la felicidad del ser amado y seguir adelante, después de todo, la vida es tan linda que siempre te dará la oportunidad de volver a amar, si tú se lo permites, te lo digo yo que, a pesar de tener tan mala suerte para el amor, siempre le abro mi corazón a este, contesto Larissa con una sonrisa en su rostro.

¿Te has vuelto a enamorar?, dijo Tsubasa sorprendido.

Creo que sí, aunque como siempre de alguien que ama a otra, pero ya acepte mi destino, tal vez mi manera de amar, sea apoyando a los jóvenes de los que me enamoro a que sean felices,..., respondía la joven.

Larissa, pronunció Tsubasa.

Amar es también dar sin esperar nada a cambio, agrego la joven.

¿Dónde lo conociste?, ¿es alguien de este edificio?, añadía con curiosidad Tsubasa.

No, ni siquiera se su nombre ni él sabe el mío, él dijo que si el destino se proponía volver a ponernos una vez más frente al otro nos diríamos nuestros nombres, dijo Larissa sonriendo, haciendo una pausa para acotar: Me gustaría que sus palabras se cumplan, siento que él necesita de una amiga, y ya que no podré tener tampoco nada con él, al menos quisiera poder tener su amistad.