Al día siguiente, Diana llegaba a su asiento cuando encontró una nota que decía: "Para Diana: Hoy te espero en la azotea en la hora del almuerzo, no faltes, es importante".
Miró a su alrededor, nadie parecía haber dejado esa nota, con incertidumbre decidió ir.
Entonces en la hora del almuerzo, ella miró la foto que publicó Jack en sus redes sociales, iba a bloquearlo, pero no pudo evitar querer volver a ver las fotos por última vez. En redes sociales era completamente diferente, alguien a quien querrías a tu lado, pero en persona era muy diferente.
Al final apagó su celular, suspirando con pesadez, viendo por una reja puesta en la azotea como unas compañeras jugaban volleyball. Con sus cinturas tipo reloj de arena, su piel de aspecto suave, sus caras perfectas adornadas con maquillaje y unos uniformes bastante lindos, ella también quería verse así.
De hecho, ella también hacía ejercicio, pero no lograba resultados.
Pensó que quizás la persona que lo esperaba no iba a venir, quizás tenía que hacer algo más, después de todo ella no era tan importante.
Se volteó y se encontró cara a cara con Jack, cruzando nuevamente sus miradas. Entró en pánico inmediatamente, no quería verlo, ya no, simplemente quería irse del lugar.
— C-Creo que mejor me voy... — Intentó irse del lugar, pero Jack pateó la reja justo antes de que se fuera, asustándola un poco — Jack, no hay nada que hablar... — Algunas personas volvieron a ver a la azotea por el ruido, pero luego siguieron con lo suyo.
— Si que lo hay — Respondió seco de cualquier pizca de amabilidad — No te irás de aquí hasta que hablemos.
— No hay nada de qué hablar, ya me rechazaste, ahora déjame tranquila... — Respondió algo temblorosa, no lo veía a la cara, pero la mano de Jack tomó su mentón y la obligó a verlo.
— No te dejaré ir de aquí — Rápidamente Diana se soltó del agarre.
— Oblígame — Lo retó mientras apartaba su pierna para largarse, pero ella la agarró de los hombros — ¡Ya déjame! Ya te burlaste de mí, incluso me hiciste llorar ¿Ahora quieres seguir con lo mismo? Si vas a ser tan idiota, al menos ten algo de compasión — Lo empujó, quedándose los dos a una distancia considerable.
— No soy un idiota, simplemente no quiero que divulgues lo que compré ayer — Ya finalmente llegó al meollo del asunto, Diana simplemente lo miró bastante incrédula.
— No puedo revelar información de clientes, a menos que sea un patrocinio — Aclaró lo obvio — Si eso es todo, ahora ya deja de hablarme.
— ¿Porqué eres así conmigo? — Preguntó sin poder entender la actitud de Diana — ¿No era que me amabas?
— ¿Realmente te sorprende? ¿Después de que me rechazaste de una forma tan grosera? — Realmente parecía que Jack no entendía.
— Eres gorda y no me gustan las gordas, ni siquiera me creo que no comas carne, trabajas en un restaurante de comida rápida — Nuevamente molestaba a la chica con su forma de dirigirse a ella, con ese asco en sus palabras — ¿Qué tiene de malo que no me gusten las-
— Si, si, si — Lo interrumpió ya harta de la palabra "gorda", más por su forma despectiva de hablar — No te gustan las gordas, te gustan las grandes y delgadas.
— Exacto — Afirmó para luego replantearse sus palabras — ¿Ahora de qué estamos hablando?
— De mujeres ¿No? — Se quedaron viéndose por un instante — Bueno, trabajo en ese restaurante, pero no como su comida. Quería trabajar en un restaurante de comida vegana, pero piden muchos requisitos, además de que me lo ganó una influencer rubia.
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Reemplazo de tus besos (+18)
ChickLitCuando tu amigo y crush por más de 6 años resulta estar enamorado de otra, la cuál lo rechaza, puede terminar queriendo desahogar sus deseos en tí ¿Pero es porque te ama o porque la ama a ella? Dylan es el chico ideal para cualquier mujer: Atento, d...