Sangre y dolor

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— Kayn, me duele mucho— Akali tocaba su vientre

— Es normal supongo, después de tres años y un embarazo múltiple

La puerta sonó, indicando que alguien la tocaba

— Adelante

— Con permiso majestades — un acólito entró

— Kento — Akali se puso de pie para recibirlo

— Señora, debe ver esto — le entregó una nota

— Estimada reina del parámetro sur de nuestras islas Jonias, desde los confines de la tierra de Navori en el monasterio de Irana, se le solicita de forma amable y cordial su presencia en nuestro templo en Ta'hul, de ser posible, en completa soledad.

Saludos cordiales, princesa Lisbhet—

— Me lleva..— murmuró Akali después de leer la nota

— ¿Qué?

— Es de esa niña albina

— ¿Tu hermanita? — Kayn río burlón

— No es mí hermana — ella le pegó un leve golpe en su nuca

— No te enojes linda — abrazó su cintura y la besó

— Si me permite opinar su majestad, me da la impresión de que se trata de una trampa — mencionó Kento

— Opino lo mismo que el — Kayn cruzó sus manos pensativo

— ¿Y que sugieres? — Akali se volvió a sentar

— Llevatelo — Kayn cerró sus ojos sin decir otra palabra

— Con todo respeto mí rey, pero me parece una locura

En la orden se sabía que cuando mencionaban una sola palabra, haciendo énfasis en una sola, se hablaba del arma darkin de Kayn, Rhaast permanecía durmiendo hace 3 años, nadie sabe por qué su majestad no decidió destruir tal artefacto de guerra, pero estaba sometido a un profundo y largo sueño desde que sus hijos caminan en este mundo.

— Cariño, ¿Estás seguro de esto?

— Si no puedo cuidarte, lo hará el

— ¿Que nos da la seguridad de que lo hará y no tratará de matarme?

— No es un darkin tonto, sabe lo que debe hacer y lo que no — Kayn se sentó sobre el escritorio — Prepara todo Kento, los despertaremos — el soldado asintió y luego salió en silencio, el templo entero debe estar bajo resguardo para tal acto

— Las cosas que haces por mí — se acercó a besarlo con cariño

— Quemaría el mundo por ti — la abrazó afectivamente

— ¿Cómo harás que el obedezca?

— Yo no, tu lo harás, solo lo sacaré de su pedestal

— ¿Estás seguro de eso?

— El te tiene mucho respeto, sabe que eres demasiado poderosa y que si tu quieres, puedes destruirlo con una sola mano

un amor básicamente imposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora