Planteos infernales

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El sol entraba tras las cortinas y le pegaba en la cara a la hermosa chica que se encontraba desnuda en su cálida cama, una noche de acción había concurrido exitosamente, a su lado una cabellera negra y larga se destacaba tras estar abrazado el dueño de esta a la cadera de la joven, y del otro lado, una castaña como la corteza de los árboles en época de nevadas, que el dueño de esta estaba envuelto en sábanas durmiendo plácidamente al igual que el otro joven

A la mente de Akali venían recuerdos de aquella noche concurrida que le hacían tornar sus pálidas mejillas de color rojo, un rojo tan intenso como el de los pétalos de una rosa en época de cosechas

Cuando esta intento levantarse fue tirada nuevamente a la cama por el pelinegro que la abrazó más fuerte y sobre su pecho se recostó para seguir durmiendo cálidamente

Por su parte el castaño quien parecía tener una pesadilla por la manera en la que balbuceaba dormido fue acurrucado sobre lo que quedaba libre del pecho de la ninja, que inmediatamente como si de un bebé se tratara se calmó y siguió durmiendo tranquilamente, ella está a sonrojada, debido a que ambos jóvenes la estaban abrazando con sus piernas, provocando así que ambos bultos tocaran los muslos de esta, de todos modos no le prestó atención a esto y cerró sus ojos para dormitar un poco más

Pero su suerte no fue mucha porque la puerta se abrió lentamente poniendo en alerta a la chica que con sus nuevos y refinados instintos lograba escuchar a kilómetros de distancia, pero su preocupación se terminó en cuanto logró ver qué quién había entrado era el maestro Zed

Zed: aún siguen durmiendo..?dios mío..*dijo decepcionado*

Akali: yo no..*susurra leve* solo no puedo levantarme porque me tienen apresada aquí..

Zed: como?

Akali: *levanta la sábana y dejá ver la posición en la que estaba* eso responde tu pregunta?

Zed: con esas cosas te penetraron?

Akali: enserio maestro? se fijó solo en eso?

Zed: si ya ví que te tienen agarrada pero la incógnita es como diablos sigues viva

Akali: no lo sé ._.

Zed: bueno a ver *los empuja y quedan esparcidos por toda la cama* vístete y ven a mi salón, debo hablar contigo *sale y cierra la puerta*

Akali: bueno..al menos me ayudó..*se levanta y se pone ropa que encontró por ahí*

Akali caminaba por los pasillos tranquila, miraba todo a su al rededor  con una leve sonrisa, todo había vuelto a su estado original, y ciertamente le encantaba como estaba todo, el nuevo patio de la orden era más amplio y tenía más árboles y flores, sin duda todo había cambiado en su ausencia, y ni hablar del interior del templo, estaba todo más iluminado y bonito, hasta la alcoba de Zed la cual estaba enfrente de la chica, esta tocó antes de entrar y el propietario de la habitación le dió permiso de entrar

  Akali: para que me llamabas Zed?

Zed: debo hablar contigo de algo importante y quiero que me escuches, no que salgas corriendo y llorando como siempre

Akali ya sabía o sospechaba de que le estaba hablando el maestro de las sombras, ya que al hacaerle esas aclaraciones se referia a temas posiblementes dolorosos para ella

Zed: mira Akali creo que he sido muy contemplativo contigo y con Kayn, y me gustaría que se definan de una vez, esto de andar con llantitos por no querer aceptar que estas enamorada de el porque te sientes debil y con la obligación de brindarle amor a un chico que te ama más que a nada en el mundo ya es cansador, y como figura paterna de Kayn y como maestro de ambos exijo ya una respuesta, breve, sincera y segura *se cruza de brazos mirandola*

un amor básicamente imposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora