Dia 3: Jaywon

2.8K 99 17
                                    

Vestidos a medias

La escuela era aburrida, llena de maestros estrictos que solo te regañaban cada vez que  hacías algo incorrecto, y en el caso de Jungwon y Jay, lleno de monjas que solo los molestaban diciéndoles que eran asquerosos una aberración de la creación h...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La escuela era aburrida, llena de maestros estrictos que solo te regañaban cada vez que  hacías algo incorrecto, y en el caso de Jungwon y Jay, lleno de monjas que solo los molestaban diciéndoles que eran asquerosos una aberración de la creación humana solo por ser abiertamente homosexuales en un colegio católico. No les importaba, era aun mas excitante besarse a escondidas, esperando que Sor Hyuna no los encontrara.

en ese momento se encontraban en una reunión eclesiástica hablaban sobre Dios, sobre como les iría en el infierno si pecaban y otras cosas, no habían casi personas, solo los menos comportados estaban ahí, por eso Jungwon y Jay estaban ahí, sentados al final de la enorme, inmensa sala, solos y aburridos, Jungwon sonrió cuando por su mente cruzo la idea mas atrevida que podía tener.

una mano se poso en el muslo de Jay, quien no le presto atención puesto que era normal hasta que comenzó a subir, sonriendo cuando vio como acariciaba su dormido pene haciéndolo despertar, sonrió ante la idea que su Wonie tenia.

-U-umm Won, quieres hacer algo peligroso.?—Los dos eran unos atrevidos, no les importaba nada, así que no fue raro cuando Jungwon asintió embobado ante los ojos de Jay y ante la mano que guiaba la suya dentro de los pantalones de educación física de su novio, Jay guio su mano debajo de su ropa interior, haciendo que tocara su pene masturbándolo, eran novios hace ya varios meses pero a lo mas que habían llegado era que Jay le metiera los dedos, por lo que estaba ansioso, deseoso de tener el miembro duro de Jay dentro suyo.

comenzó a mover la mano escuchando los jadeos constantes de Jay, le encantaba aquel sonido pegajoso y ver las expresiones excitadas de su novio, apenas iniciaba la charla por lo que estaba seguro que estarían ahí un buen rato, sumado a esto la sala estaba completamente a oscuras para que el proyector se viera mejor y el sonido de la charla de Sor Somi  acerca de lo que habían echo aquel verano, acerca de haber ayudado a las familias con poco dinero o algo así, tapaba los sonidos obscenos que provocaba aquel encuentro.

bueno al menos eso debían hacer, siendo que sus padres pagaban tanto dinero en aquel colegio, pero la historia de por que estaban ahí era algo para contar después, mucho después, mas cuando Jungwon sintió como Jay lo alzaba y sentaba en sus piernas, fue casi salvaje como le bajo los pantalones y lo hizo sentarse en su entre pierna y restregarse salvajemente, le encantaba, sentir el pene de Jay contra su palpitante entrada.

-W-wonie..—Jungwon solo asintió, se había estado preparando para aquel momento, así que cuando sintió el miembro duro de su novio entre sus glúteos, restregándose fuertemente ahogo un gemido duro con la manga del suéter del uniforme de aquel eclesiástico colegio, se levanto un poco sosteniéndose de la banca de enfrente y sintió como Jay alineaba su miembro en su entrada, el mismo comenzó a bajar sintiendo como con dificultad entraba debido a que no tenían mas lubricante que su saliva.

ahogo un gemido cuando la longitud entera estuvo dentro, espero un momento a que el ardor molesto desapareciera comenzando a moverse, el obsceno sonido de sus gemidos y de sus pieles chochando que solo ellos podían apreciar bien hacia las cosas aun mas calientes, Jay se sintió en el cielo cuando vio los ojos llorosos de placer de Jungwon, desde aquella perspectiva podía apreciar como sus glúteos rebotaban en su pelvis cada ves que bajaba y el como su miembro se enterraba fuertemente dentro suyo.

pronto comenzó a hacerse mas fuerte, moviéndose de manera desenfrenada, debajo de la camisa y sin que se alzara demasiado para no llamar tanto la atención atendió uno de los pezones del menor haciendo que soltara un gemido algo escandaloso que los asusto, pero realmente pocas personas se habían dado cuenta y a ninguna le importaba realmente que estuvieran haciendo.

-Señor Yang! nos gustaría que de su opinión al respecto de que lo que Sor Somi comentaba.—Jungwon se quedo sentadito y quieto en su erección cuando por el micrófono Sor Moonbyul lo miraba expectante y con una sonrisa a que diera su opinión, maldita sea tenia que ser el.?

-M-me p-parece e-excelente que ayudaran a los m-mas n-necesitados.—Los movimientos no paraban, movía sus maderas en círculos sintiendo el miembro golpear su próstata cada vez que se movía, los ojos llorosos delataban lo tan bien que se sentía.—G-gracias a D-Dios por d-darnos la b-bendición, u-ummm de poder a-ayudar a los demas!

hablaba entrecortadamente, su respiración agitada y el echo de que, sus pezones fueran halados y las yemas de los dedos de Jay se pasearan por sus puntas solo lo hacían sentirse aun mejor, se sentía en el cielo, comenzó otra vez a saltar de manera bajita solo por que Sor Moonbyul aun lo estaba observando, sentado tan lejos en aquella habitación obscura.

-Se encuentra bien, señor Yang.?—La voz preocupada de la monja hizo que rodara los ojos, no lo dejaban disfrutar del pene de su novio en paz.

-Perfectamente Sor! increíble muy m-muy bien.—hablaba de lo bien que se sentía, tan excitado mas cuando Jay tomo su cintura y con sus piernas comenzó a impulsarse hacia arriba, haciendo las embestidas mas profundas y duras, mordió con fuerza la manga de su suéter y dejo sus caderas en el aire dejando el trabajo a Jay de moverse rudamente en su interior, pronto era hora de que se vinieran, mas cuando jay bajo sus manos de sus pezones y comenzó a masturbar su miembro, haciendo que Jungwon respirara agitadamente, con la punta mojada por el pre semen y sensible debido a la estimulación.

-C-cariño m-me vengo..—Jungwon susurro excitado cuando las palmas de las manos de Jay abrieron sus glúteos para entrar aun mejor sintiendo los dedos índices de Jay jugar con los bordes de su entrada abierta, solo para sentir el como su piel se estiraba y su pene entraba rudamente cada vez mas profundo.

-H-hagámoslo juntos mi amor...—Pronto sintieron una caliente sensación en el abdomen que les avisaba que estaban cerca, Jungwon empujo sus caderas hacia atrás apretándose contra el cuerpo de Jay y temblando arriba suyo cuando sintió su orgasmo golpearlo fuertemente, Jay de solo sentir aquellos espasmos se vino dentro del menor saco su pene colocando sus dedos como tapon para que no saliera nada y no mancharan nada, con cuidado arreglo la ropa de su novio y la suya, o bueno solo sus pantalones, quedando como habían llegado.

-Agradecemos su atención, esperamos que su comportamiento mejore..—Las luces se encendieron cuando ellos pudieron salir, Jay le quito el suéter a su novio cuando vio la mancha detrás de sus pantalones húmeda debido a que de su entrada probablemente estaba saliendo toda aquella sustancia que había dejado ahí, rodeo con aquel suéter su cadera cubriendo la mancha.—Y señor Yang! agradecemos su intervención.

Sor Somi sonrió hacia Jungwon quien caminaba con algo de dificultad siendo ayudado por Jay, sonrió ante la monja y salió del lugar, le dolían las caderas y la sensación del semen del mayor saliendo de su entrada era incomoda, ahora debían irse a su dormitorio, cambiarse y limpiarse, y quien sabe tener una segunda ronda mas privada.

Sor Somi sonrió hacia Jungwon quien caminaba con algo de dificultad siendo ayudado por Jay, sonrió ante la monja y salió del lugar, le dolían las caderas y la sensación del semen del mayor saliendo de su entrada era incomoda, ahora debían irse a s...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


los próximos, dos capítulos están conectados a este, debido a que todos van a ser inspirados en una colegio católico, después de ahí todos serán al azar.

gracias.


30 Day′s of smut challengeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora