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Jake suspiro aburrido, sentado a un lado de su esposo que hablaba animadamente con sus inversores, en aquella cena celebrando la unión de dos de las mas grandes empresas de Seúl, Jake estaba orgulloso de su esposo, Sunghoon era sin dudas un gran jefe y ceo, pero, era tan aburrido tener que acompañarlo a aquellas cenas donde lo único que se alababan era la cantidad de dinero que tenían en sus cuentas bancarias. Un suspiro de aburrimiento salió de sus labios.
- Park, lamento la tardanza, felicidades, escuche que unió su empresa con la del Ceo Kim..—Jake sintió la pesada mirada de aquel hombre encima suyo, Lee Heeseung, dueño de Lee's entertainment encabezador de las listas de hombres mas hermosos y personas con mas dinero del mundo, un hombre grande y con una presencia bastante imponente que hacia a Jake suspirar, ni su esposo en aquellos seis años de relación lo colocaba así, tan nervioso y necesitado.—Espero que... Esten mucho tiempo juntos y prosperen.
-Gracias, Señor Lee..—Sunghoon era tan despistado.. Acaso no se daba cuenta de la mirada que aquel hombre le ofrecía a su esposo, de como Jake estaba sonrojado y con la respiración agitada solo de sentir encima suyo aquellos ojos llenos de luz que en vez de hacerlo adorable lo hacia completamente sexy.? era un idiota. No se daba cuenta de nada que tuviera que ver con su esposo y Jake no dejaría pasar esta oportunidad.—Ahora que nos encontramos todos, me parece oportuno dar inicio con la cena, los platos de hoy son una variedad exquisita...
Bla bla bla..
cosas que a Jake le sabían a mierda, mas teniendo a Heeseung enfrente suyo, vestido completamente de negro, con aquel cabello platinado y piel canela que lo hacían suspirar, Jake bajo la vista un momento, si seguía así tendría que ausentarse para ir al baño y le daba vergüenza caminar con una erección hasta el baño mas alejado para atenderse.
Por que Sunghoon no lo tocaría esa noche.
los platos estaban servidos pero Jake no podía tragar nada de lo que estaba enfrente suyo, y eso que su esposo se había tomado por primera vez el atrevimiento de pedir su comida favorita, no podía por que la mesa era lo suficientemente estrecha como para tener el pie de Lee Heeseung en el medio de sus piernas, frotando duramente su erección, era doloroso pero tan placentero que Jake estaba a punto de soltar sonidos que alertarían a todos ahí de lo que pasaba, mas que todo a Sunghoon.
-Y-yo, y-ya vengo cariño, tengo que ir al baño...—Sunghoon lo miro, aunque en su cara había una expresión preocupada en sus ojos no había alguna pisca de preocupación por el, solo con el asentimiento Jake se levanto, con una mirada fugaz hacia el empresario que lo estaba tocando tan indebidamente minutos atrás, rogándole con la mirada que se encontraran en los baños.
camino algo incomodo hasta el baño mas alejado de la mesa donde su esposo y sus demás amigos celebraban, el baño estaba solo y el agua del lavabo estaba fría cuando hizo contacto con la caliente piel de su cara, cerro los ojos con fuerza asustándose cuando sintió un par de manos en su cintura, inmovilizándolo, suspiro cuando el olor de aquel perfume entro fuerte por sus fosas nasales, aquel perfume que podía distinguir entre todos.
