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—¡Ven con mamá!— grito Freen estando de cuclillas a una distancia algo considerable de donde la bebé estaba sentada sin prestarle mucha atención, más concentrada en jugar con la arena.

—No bebé, ven con mami— exclamó Becky, estando del otro lado, en la misma posición que la alfa, esperando por ella con los brazos abiertos.

La bebé dirigió una corta miradita a ambas haciendo sonar su chupón, tomo su decisión, gateo sobre la fastidiosa e incómoda arena hasta llegar a la manta debajo de la gran sombrilla, y allí se acostó, suspirando complacida.

"Quiero mimir"

Sus madres bajaron decepcionadas ante la decisión que tomó, había preferido acostarse allí en vez de jugar con ellas a pesar de que ambas estaban dando todo de sí para llamar su atención.

—Vamos Nam, estamos en la playa ¿en serio prefieres dormir?— cuestiono su madre alfa llegando a donde estaba la pequeña intentando dormir, la cual la ignoro por completo.

—Tiene sueño, deberíamos regresar— dice la menor tomando a la bebé para que pudiera conciliar el sueño cómodamente en sus brazos.

Freen hizo un puchero poco pronunciado, ¿porque les pareció buena idea llevar a su bebé a su viaje de aniversario? Cuatro años cumplían desde que ella y Becky habían dado el sí ante el juez, cuatro años de matrimonio, así que habían decidido tomarse ese fin de semana juntas, y que mejor lugar para compartir en familia que la playa, sería la primera vez que Nam iba, así que eso las había entusiasmado, pero hasta ahora la bebé no había hecho más que jugar lanzándoles arena y dormir sobre la manta que llevaron para colocar todas sus cosas encima.

—¿Y que pasara con el unicornio que me hiciste llenarle?— pregunto Freen fastidiada, señalando el flotador gigante en forma de unicornio, el cual Becky le obligo a inflar para la bebé.

—Luego lo usamos, trae las cosas— ordenó la omega, tomando el bolso que contenía sus pocas pertenencias, dejándole a Freen la tarea de llevar la manta, la sombrilla y el flotador.

La mayor suspiro derrotada, si lo había llenado es porque en el fondo tenia ganas de usarlo también, ahora debía ver como llevaría lo que había quedado sobre la arena, empezando porque no tenía idea de cómo cargar el flotador.

"jijiji, ¿nunca dejarás de ser la plebe, mamá?"

Nam de verdad amaba a sus mamás, pero eso no le impedía reírse un poco de sus desdichadas situaciones.

Becky sostenía a la bebé que estaba sentada en sus piernas, ya era hora de dormir pero la cachorra seguía algo inquieta luego de su siesta de la tarde, creía que podía ser por el hecho de estar en una habitación de hotel con la que la pequeña no estaba familiarizada, así que para ayudarla a dormir la acomodó acostándola sobre sus brazos y Nam de inmediato supo que seguía a continuación, así que movió sus manitas con desespero tirando de la blusa de su mami.

"Ya te estabas tardando"

La omega subió su blusa dejando al descubierto su pecho, al cual la pequeña se pego como sanguijuela, bebiendo como si no hubiera comido en todo el dia; en ese momento Freen se sentó al lado de su esposa pasando su brazo por encima de su hombro, abrazándola de esta manera, Nam entró en alerta así que rápidamente coloco su manita sobre el pecho de su mamá, como si intentará protegerlo de esta manera.

—Nadie se está robando tu leche— molesto un poco Freen, riendo por la actitud de la pequeña Armstrong.

"Quién sabe, te he visto en actitudes sospechosas"

Con el afán de seguir molestando Freen se abrazo más a su esposa, haciendo a Nam fruncir el ceño, ese era el momento de mami y bebé, no de mamá.

—Antes de ti solo éramos mami y yo— Dijo divertida la mayor, viendo como la bebé le dirigía la mirada pero en seguida miraba hacia otro lado —Hey, pequeña insolente.

—Sarocha no vayas a empezar a pelear con ella, siempre termina llorando, tú ya estas grande para esas cosas— regaño la omega a su esposa, pero está parecía no tener intenciones de hacerle caso.

"¡si, yo estoy chiquita mamá, no me molestes!"

La pelinegra solo rió, tomando el mentón de su omega para atraerla en un beso al que la menor no se pudo negar; Nam que miraba desde su lugar no parecía muy feliz, ni siquiera ella entendía porque ese sentimiento se extendía por todo su pequeño ser, podía compartir a su mami, pero no en ese momento.

"¡No, consigue tener la tuya! Uh... ¿qué pasa si?"

El grito de Becky fue lo que las hizo cortar el beso, de inmediato la omega separó a la bebé de su pecho, que la miraba con la más pura inocencia, como si no hubiera hecho nada.

—¡Nam!— exclamó su mamá al borde de las lágrimas.

—Nam, debes tener cuidado con mamá, eso no se hace, ¿porque la lastimas así?— regaño la alfa, mirando seriamente a su hija, la cual miraba confusa a su mamá omega que seguía quejándose.

La cachorra observo a su mami bajar su blusa, notablemente adolorida por lo que acaba de hacer.

"Lo siento, lo siento mucho mami, te prometo que no lo hago más, no quería hacerte daño"

Ahora sentada sobre sus piernas tomaba el rostro de su madre entre sus manitas dejando babosos besos sobre su nariz y mejillas, intentando disculparse con inentendibles balbuceos desesperados y llenos de culpa.

—No, ya no hay más leche para ti— determino la omega.

"¿Cómo que no? No juegues con eso mami"

Empezó con un suave sollozo que se transformó en llanto al comprobar que efectivamente su mamá no iba a levantar su blusa de nuevo, y quizás ya no lo haría ninguna otra vez para ella.

—Ahora si será para mí.

La pequeña detuvo su llanto al escuchar eso, y casi de inmediato sollozo aún más fuerte ante lo dicho por la alfa.

Baby Thoughts [FreenBecky]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora