Alumno - Marace

Capítulo 14: Como un tatuaje

Apresuradamente, Ace pulsó el botón para llamar al ascensor mientras miraba por encima del hombro, pero no parecía que Izo fuera tras él. Respirando hondo, aliviado, Ace se apoyó en la pared, con el portátil apretado contra el pecho. Había estado cerca.

Izo conocía el símbolo y sabía que Ace sólo podía haberlo visto en el cuerpo de Marco. Sin embargo, eso no eliminaba la posibilidad de que se tratara de algún tipo de símbolo de secta; Izo podría saber qué tramaba Marco. Sin embargo, había dos problemas con eso. Uno, si Izo sabía que Marco lo acechaba, ¿no intentaría detenerlo o ayudar a Ace? No necesariamente, por supuesto, Izo podría haberse acercado a Sabo para vigilar también a Ace. Aunque, él había parecido querer sinceramente hacer un esfuerzo para tranquilizar a Ace.

El segundo problema era que Izo había sonado insultado cuando Ace había utilizado la palabra secta. De nuevo, no significaba que no lo fuera, pero aun así.

Para ser sincero, Ace ya no sabía qué pensar. No había sido capaz de encontrar el símbolo en Internet, así que tal vez ir a la biblioteca a buscar en los libros sería la mejor opción.

Sin embargo, el principal problema al que se enfrentaba ahora era que Izo sabía que Ace había visto el tatuaje en el pecho de Marco, lo que probablemente significaba que él mismo le preguntaría a Marco al respecto. Eso le plantearía dudas a Marco, por supuesto, ya que no tenía ni idea de que Ace había visto su tatuaje. Joder, ¡las cosas estaban complicadas!

Llegó el ascensor y Ace acababa de pulsar el botón para bajar cuando oyó que lo llamaban por su nombre. Afortunadamente, no era Izo, sino Luffy.

"¡Esperadme!"

Ace pulsó el botón para detener las puertas y esperó hasta que Luffy se le unió.

"Sabo e Izo van a hablar aburridamente, y dijeron que no jugarían conmigo", dijo Luffy haciendo pucheros. "¿Puedo ir contigo?"

"Me voy a la biblioteca, Lu. Así que puedes venir, pero tendrás que comportarte".

Luffy hizo un puchero. "Buu". Aun así, siguió a Ace fuera cuando el ascensor llegó a la primera planta.

Mientras caminaba hacia la entrada, Ace intentó no mirar fijamente la puerta de Marco. No estaría en casa, ¿verdad? A Ace le pareció que, de repente, el pasillo era el doble de largo, pero con Luffy con él, no podía empezar a correr o algo así.

"¡Oooh, Ace, mira! Ese perro tiene bigote!" exclamó de repente Luffy, y Ace se quedó helado.

Sólo conocía a un perro con ese aspecto. Lentamente, se dio la vuelta.

Detrás de él, Marco estaba de pie, con el enorme perro blanco -Stefan, si Ace no recordaba mal- sentado a su lado, moviendo la cola. Marco también miró a Ace, bastante incómodo. Probablemente porque Luffy estaba con él.

"¡Es tan increíble! ¿Puedo acariciarlo?" preguntó Luffy al dueño.

Los ojos de Marco abandonaron a Ace y, sonriendo de verdad, dijo: "Claro".

"¡Soy Luffy! ¿Vas a dar un paseo? ¿Puedo ir contigo? Ace es tan aburrido", balbuceó Luffy mientras empezaba a juguetear con el perro.

Ace se mordió el labio para no soltar que Luffy no debería hacerse amigo de Marco. Después de todo, no estaba seguro de lo peligroso que era.

"Ace, ¿tú también vienes?" preguntó Luffy, sacándole de sus pensamientos. Tenía sus ojos de cachorro molestos y convincentes dirigidos a Ace, y éste sintió que su resistencia se agotaba.

"Solo un rato, tengo cosas que hacer", dijo finalmente, con cuidado de no mencionar que iba a la biblioteca. No podía estar seguro de que un cartel de "no se admiten perros" fuera suficiente para mantener a Marco fuera, después de todo.