ᴼⁿᵉ ˢʰᵒᵗˢ. ᴱᵈᵈⁱᵉ ᴹᵘⁿˢᵒⁿ / ᴶᵒˢᵉᵖʰ Qᵘⁱⁿⁿ🔞🔥

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"Me estás jodiendo." Eddie se rió, sacudiendo la cabeza cuando miró la calabaza que le pasaste.

Frunciste el ceño, mirando el contorno estarcido con Sharpie. "No." Hiciste un puchero ligeramente. "¿Qué? ¿Qué tiene de malo?"
Eddie parpadeó, riéndose ligeramente divertido antes de quemar su cigarrillo en la bandeja del porche. "Nada, cariño". Murmuró, con una sonrisa con hoyuelos que te hizo más fruncir el ceño.

"Te estas burlando de mi." Lo fulminaste con la mirada. "¿Qué? ¿Qué le pasa a mi calabaza?"

"Nada, cariño. Acabas de decir que iba a ser fácil". Eddie sonrió, buscando en el bolsillo de su pantalón su navaja.

"Esto es facil." Insististe.
"Tú dices, cariño, soy yo el único quien lo corta'". Eddie sonrió, tomando la calabaza y colocándola entre sus piernas.
"¡Son ojos de estrella! ¡Eso es!" Te quedas boquiabierto y extiendes una mano hacia los ojos delineados de la calabaza. "¿En qué se diferencia eso de uno normal?"
"Porque", sonrió Eddie, demasiado divertido para tu gusto. "El normal es sólo un triángulo".

"¿Entonces?" Te burlas y le pones los ojos en blanco ligeramente. "Eso es básicamente un triángulo".

"¿Eso es ?"

"Sí", tarareas, mirando tu diseño. "Son como un montón de triángulos".

Eddie aulló de risa, sus ojos brillaban cuando te miraban, la luz del porche iluminaba tu silueta. Te veías tan bonita. Tallaría un millón de malditas calabazas si quisieras.

"Lo tengo." Eddie abrió el cuchillo.

Frunciste el ceño. "Creo que necesitas un cuchillo más grande".

"Creo que necesitas dejarme trabajar". Eddie respondió, una ligera mirada que hizo que tu barriga se revolviera de emoción. "Ve a buscar esa cosa de la cuchara". Él asintió detrás de ti, cortando la calabaza.

Extendiste la mano hacia la pala de plástico naranja, pasando el periódico que colocaste y las pequeñas herramientas para tallar que venían con ella, de las que Eddie se burló cuando le mostraste. "Voy a necesitar algo más nítido que eso, cariño".

¿Vas a sacarle las tripas?" Los ojos de Eddie se posaron en los tuyos, reprimiendo su sonrisa de diversión cuando tu nariz se arrugó.

" No"

" Entonces las vas a dejar ahí dentro?"

"No, Eddie." Resoplaste , su voz se convirtió en un gemido. "Tú los sacas".

"¿Me dejaras hacer todo el trabajo?" Eddie se rió, sus ojos brillando hacia los tuyos.

"¡Dijiste que me ayudarías!" Tú contrarrestaste. "Y no voy a tocar eso. Se me meterá debajo de las uñas". Gruñeste, sacudiste la cabeza con disgusto y frunciste los labios como si hubieras comido algo amargo.

Eddie se rió, quitando la tapa con el contenido fibroso, las semillas y las "tripas" con ellos. "Así que tienen que ir debajo de mis uñas, ¿eh?"

"No tienes uñas". Asentiste hacia sus uñas cortas y recortadas. Eddie apenas tenía ninguno, y no lo culpabas por no trabajar con animales en todo el día.
Eddie se detuvo y te miró con una sonrisa tonta y torcida. "Está bien, supongo que lo haré, ya." Él ronroneó. "¿Si haces algo por mí?"

Frunciste el ceño ligeramente. "¿Qué?"
"Dame un beso ahora, tal vez ayude a apresurarme a que esté hecho". Se encogió de hombros casualmente.

"Bien." Gimes, fingiendo irritación, inclinándote hacia él sobre las tablas de madera del porche.

Los labios de Eddie envolvieron los tuyos fácilmente, la lengua deslizándose entre tus dientes descaradamente, hasta que te reíste y retrocediste con una ceja levantada. "Tienes que terminar la calabaza si quieres que te la chupe". Asentiste hacia la calabaza entre sus piernas, satisfecha de cómo se sonrojó bajo la luz de la luna.