LA SOLUCION

73 6 0
                                    



Jasper POV

Tenía que pensar una forma de ayudar a Alice, la que sea. Sabía que era un tema grave y que ella no se animaría a ir y hacer la denuncia, por lo que debía buscar algún testigo o algo parecido.

Éste último mes me había estado carcomiendo la cabeza días enteros, y hasta a veces noches. A ninguno se le ocurría que hacer y eso me volvía cada vez más loco. Sabía que los chicos estaban igual que yo, hasta la misma Alice estaba preocupada.

En un mes volvería a Inglaterra, y no quería irme sintiendo que no había podido hacer nada. Salí a caminar para tratar de despejar mi mente. Luego de un largo rato, sin saber cómo, llegué a una plaza que había en el barrio y decidí sentarme en un banco. Frustrado, apoyé los codos en mis rodillas y me cubrí el rostro con las palmas de mis manos.

-¿Jasper?- oí la voz de una mujer que me resultó muy conocida. Alcé mi rostro para encontrarme con...

-¡Natalie, cuánto tiempo sin verte! ¿Qué haces aquí?- dije levantándome y abrazándola.

-Tratando de no pensar... ¿Y tú? Te noto muy preocupado.

-Lo mismo- me limité a responder. Ella se sentó a mi lado- Recuerdo que la última vez que te vi, Emmett estaba coqueteando contigo.

-Si, pero no pasó nada con... él- La miré sorprendido- Igualmente es algo que me gustaría dejar en el pasado- prosiguió sin mirarme y agachando la cabeza.

-¿Una mala relación?- pregunté alzando una ceja.

-Muy, pero no lo definiría como relación...Es complicado.

-Entiendo perfectamente, no hace falta que me cuentes si no lo deseas.

-Gracias Jazz... ¿Y a ti qué te anda pasando?

-Estoy tratando de encontrarle una solución a mis problemas.

-¿Y esos problemas tienen nombre y apellido?- preguntó sagazmente. Asentí- ¿Es esa chica de la que me haz hablado?

-Si, es Alice. No se como ayudarla es...una larga y ardua historia.

-¿Todavía no la tienes comiendo de tu mano?- cuestionó algo sorprendida.

-No, no es eso... Es, como ya te digo, una larga historia... Oye, ¿Quieres venir a tomar un café a mi casa? Hace rato que no hablamos y, bueno me gustaría ponerme al día.

-¡Claro, me encantaría!

Nos levantamos y, en pocos minutos, volvimos al hogar de los Brandon. Por suerte estaba cerca de la plaza. Entramos y colgué la chaqueta de Natalie en el perchero, junto a la mía. No había nadie en la casa, o eso parecía.

-Ven, sígueme- la guié hasta la cocina y le dije que se sentara mientras yo me encargaba de preparar los cafés- ¿Y estás de novia?- le pregunté dándole la espalda, mientras buscaba dos tazas.

-Si, hace unos tres meses más o menos- Al finalizar de decir esto, oí como suspiró. Giré sobre si mismo para mirarla al rostro, pero otra cosa llamó mi atención. Su remera manga larga estaba manchada de rojo cerca de su mano derecha.

-¡Natalie estás sangrando!- grité preocupado, acercándome a ella.

-O-oh, n-no es nada, debo haberme lastimado- dijo cruzándose de brazos.

-Déjame ver, quizás se te infecte.

-Enserio, estoy bien Jasper. No es nada.

-¿Qué ocurre? Oí que gritaste- Comentó Alice entrando a la cocina y mirándome. Aproveché la distracción de Natalie, para tomarle el brazo cuidadosamente y alzarle la manga de la remera. Ella instantáneamente, se soltó y bajó la prenda.

El intercambio de mi vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora