Original por Evolvelove
° ° °
Nadie entendía, todos eran diferentes a él, con brillantes futuros que les llevarían a la grandeza, a la inmortalidad mediante historia. El también podría hacer historia con su absurdo intelecto, barrer con todos los anteriores y posteriores.
Pero esa no era la manera en la que quería ser recordado.
Quería que le vean como a su padre, una imagen de esperanza, salvación y alegría. Dolía no poder siquiera llegar a ser una porción de lo que era su padre, nada... un cero absoluto.
Caminando por las tranquilas calles en las que su padre se crio, Kajiya observo por el rabillo de sus ojos el pequeño parque con juegos para niños cruzando la calle. Siempre que venían a visitar a su abuela, el pelirosa recordaba lo mucho que pedía poder subirse a ese sube y baja.
Llovía con intensidad, lo que pensaba era una terrible idea, peor que construir sin haber dormido un día entero.
Mojándose sin cuidado alguno, el muchacho comenzó a subir y bajar, su interior vacío y su rostro inexpresivo. Las palabras de su mitad hermano resonaron en su cabeza.
Aunque no tengas quirk, todavía siento gran poder en ti.
Ya se lo habían dicho, no de la misma manera, pero ya había escuchado la misma basura una y otra vez. Esas no eran las palabras que quería escuchar, si tan solo le hubieran dicho que a pesar de su ausencia de quirk hubiera por lo menos servido de soporte... quizá las cosas hubieran sido diferentes.
Deteniendo su constante movimiento, Kajiya observo en lo alto de un edificio la luz prendida de uno de los cientos de cuartos.
Abuela Inko siempre era con quien podía hablar, no por que fueran iguales, sino porque ella le devolvía confianza, valor para seguir adelante. Siempre fue su favorita en cuestión de abuelos.
° ° °
No había alcanzado a dormir mucho, la noche anterior había sido bastante... activa. Para su buena suerte, y aunque se sienta mal por su buen trato, su senpai ya se le había adelante tres pasos e incluso tenía una jarra completa de café caliente esperándole.
Eran las seis de la mañana, descanso alrededor de solo cuatro horas, pero fueron bien aprovechadas, por alguna razón Hatsume había desaparecido y ahora no la encontró en su cama.
Se sentía de maravilla, sentía que podía sobrepasar lo que sea que el mundo le pusiera enfrente.
—¿Entonces, no vas a contarle a tu prometida como te fue anoche? —dijo Nejire, su sonrisa contagiando al peliverde.
Ni siquiera le importaba como fue que se enteró, ahora mismo necesitaba hablar con alguien y... sentía que su senpai tenía su confianza absoluta.
—Asombroso, fue algo completamente nuevo... —miro su humeante café.
—¿El acostarte o la sensación? —se volteo a verle.
—L-la sensación... —se sonrojo por lo fácil que le era hablar al respecto— ...se siente... cálido —bebió de su tasa.
—Empezaste bien, la mayoría no tiene tanta suerte —le sirvió más café—. Solo no la hagas tu mundo, ¿ok? No mires todo de un solo color —se sentó enfrente suyo.
Todo lo que dijo... era bastante acertado y cierto. El perfil que tenia de la peliceleste cambio aún más, sentía que hablaba con una mujer en vez de con una juguetona niña.
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Evolvelove's La Verdad
RomanceLa paz reina en Japón, casi es imposible encontrar anarquía hoy en día, todo es positivo y colorido. Esta ciudad había sobrevivido un año entero de represión, abusos y dolor, merecían una época de oportunidades. Oportunidades... existen muchas si no...