~° Querencia (Danny Bixler) Evil Dead Rise.

XIII

—Revisamos la cocina, espero que no te moleste.—

Al llegar al departamento, Beth y Kassie ya se habían duchado.

—¿Encontraron algo?—

—Hamburguesas congeladas y algo de spaghetti.—

—Un manjar, si.—

____ revisó su mochila, sacando su celular.

—Me ducharé entonces.—Danny llamó su atención.

—Claro, avísame si necesitas algo.—el chico le sonrió antes de perderse en los pasillos.

—¿Crees que tu padre nos crea?—Beth se acercó a la chica.

—No lo sé, pero si no lo hace... No sé cómo podríamos safarnos de los problemas.—

"Papá... Hola... Te llamo desde el edificio nuevo... Pasaron cosas en casa... Estoy con los Bixler, estoy a salvo ¿Puedes venir en cuanto puedas?"

~•~

—... Me estás diciendo... Que despertaste una cosa maligna que acabó con todos en el edificio... ¿Escuchando unos vinilos viejos que encontraste en una bóveda sellada? ¿No te pareció que estaba sellada por una razón?—

Danny se sentía encogerse frente a la mirada severa de William, quien parecía estar algo exaltado.

—Fue por accidente, papá. No te enojes con él.—

—¿Cómo crees que justificaremos esto, hija? ¿Crees que las autoridades creerán esta locura como yo lo estoy haciendo?—

—Estuvimos pensando en el sismo, usar eso como tapadera... El dueño del edificio debería saber que en el banco abandonado estaba esa cosa, hay que pedirle que colabore.—____ miró decidida a su padre—. Pero debe ser YA, porque la señora del otro piso... Esa mujer llegará en la mañana y no puede encontrarse con sus hijos muertos en el pasillo.—

—Ya no están en el pasillo...—comentó Beth por lo bajo.

—Y la chica Barbie también... no sé si estara a salvo, papá.—

El hombre suavizó el gesto al ver a su hija algo nerviosa.

—Esta bien, veré qué hago... ¿Ustedes están bien? ¿No se contagiaron nada raro?—

—¿Qué? ¿Una gripe del infierno?—____ enarcó una ceja.

William suspiró.

—¿Cómo bajaste si el ascensor no andaba?—

—Pues por la ventana.—

—Te pusiste en riesgo, cariño.—

—Ellos necesitaban ayuda, y yo no podía solo quedarme en casa.—

—... saliste a mi en ese aspecto.—

El hombre se levantó de aquella silla, mirando a los 4 frente a él.

—Hablaré con el dueño del edificio, también consultaré esto con mis jefes... Creo que hay un protocolo para lidiar con casos de este estilo.—

—¿Infernales?—

—Sobrenaturales... Por ahora, ustedes quédense aquí... ¿Tienen algun familiar al que recurrir?—miró a Beth, quien negó con cierto pesar—. No pasa nada, se quedarán con nosotros entonces.—

—Gracias...—

—Se los debo.—tomó sus cosas—. Mi patito esta igual de animada que antes por ustedes.—

—Me pones en vergüenza con ese apodo...—

—No se preocupen, no tenemos nada en el subsuelo que puedan invocar. De todas formas, Daniel no toques nada.—