Amistad Inquebrantable (+15) | Backyardigans | [ Uniqua x Austin ]

12. Austin, el valiente (+15)

Bien Austin, es tu oportunidad, no la desaproveches.

Austin ya no quería dudar más, ni sentir por una vez en su vida inseguridad en el qué pasará.

Estaba decidido.

Comenzó el siguiente capítulo de la serie, así que Uniqua de inmediato se distrajo.

Lo vio como una oportunidad.

- Bien... - dijo el pelimorado - te enseñaré al Austin valiente -

- No te preocupes - dijo al recostarse en el sofa - lo puedes hacer después -

Austin estaba ideando cómo acercarse. A los tres minutos de iniciada la serie decidió hablar.

- Oye, ¿en estos tres años al fin lograste aprender a silbar? Sabes lo necesario que es para controlar a Boy -

- No, nunca aprendí. - Dijo desinteresada, luego lo miró sonriente - No ha sido necesario, Boy escucha mi voz y me hace caso, recuerda que fui yo quien lo trajo - le sonrió

- Ya estás muy grande para no saber silbar, Uniqua -

- Sobreviviré -

Austin no podía evitar sonreír al darse cuenta lo difícil que es hacerla enojar.

- Inténtalo, a lo mejor lo logras. Solo tienes que hacer una o, ubicar la lengua justo en la mitad y soplar. ¡Así! - hizo un pequeño silbido - Es de los más sencillos -

- Sí que se volvió parlanchín... - pensó Uniqua, le seguiría el juego con tal de callarlo y poder poner toda la atención en la serie.

- Está bien, está bien - Austin sonrió - No me hará daño aprender - se giró quedando sentada frente a Austin - ¿Cómo era? -

- Pones la boca en 'o' e intenta soplar -

Hizo caso dos veces sin éxito alguno.

- Bueno, lo intentamos - dijo Uniqua ya lista para continuar viendo la televisión. El soplar solo provocó que se resecaran sus labios.

- Vamos, no te rindas tan fácil - Austin se acercó disimuladamente con la excusa de ayudarle.

Uniqua ya empezaba a sentirse algo inquieta por la cercanía del muchacho.

- El truco está en el labio inferior - dijo, después silbó esperando que lo imitara

Uniqua tras el consejo, se relamió los labios e intentó de nuevo. Austin agarró el mentón de Uniqua y la besó.

De inmediato sus ojos se abrieron al sentir un gentil contacto contra sus labios.

Fue un pequeño beso de tres segundos, antes de poder reaccionar, el momento ya había terminado.

El contacto, aunque leve, logró hacerlo percibir el sabor de la cereza y asombrar por completo a la chica.

Él retrocedió un poco expectante.

- Siempre... quise hacer eso... - Dijo él. Uniqua sintió mariposas, fijó su vista en él y cerró sus labios - ...especialmente antes de irme - continuó

...

- ¿Qué...? - Uniqua contestó anonadada, mirándolo, mientras él le sonreía nervioso
- ¡¿Acabas de besarme?! -

- La besé -

...

Uniqua abandonó la cara de sorpresa, ahora solo su rostro mostraba duda al no saber qué decir. Lo miró directo a los ojos.