¿¡Que dijiste, elfo!? Un nuevo día se cernía en el planeta oscuro, mientras todos yacían plácidamente dormidos, las peleas entre veteranos y ancianos Asgardianos frecuentaban más de lo usual. ¿Día difícil, no Vrachos? Celer que yacía a un lado del capitan, desayunaba lo que parecía ser una especie de barra de proteínas. Se encontraban a las afueras del castillo negro en las barracas del ejército. Ni que lo digas, algunos ancianos se niegan a trabajar con los reanimados. Vrachos descansaba cruzado de manos en su escritorio en su tienda de campaña. Por lo menos las peleas han cesado, durante la primera semana los incidentes eran frecuentes. Añadió el capitán suspirando sonoramente, actualmente se encontraba en su forma normal. Parece ser que todos nosotros hemos cambiado con la llegada de Lord Sauron, el nos concedió estos dones. Observando la palma de su mano, pequeñas llamas brotaron de entre sus dedos. O casi todos, haha. Bufo con burla al ver a un tranquilo Celer, este solo ignoro el comentario terminando de desayunar. Por ahora conserva tus fuerzas, será otro día de trabajo. Dicho y hecho, un Asgardiano y un elfo oscuro cayeron sobre unas mesas afuera de la tienda de campaña. ¡¡Pelea, pelea, pelea!! Eran los gritos de los soldados avivando la llama pasional en sus corazones. Un largo día... Proclamó al aire ambos compañeros dejando caer sus hombros pesadamente exhaustos del mismo show.
Con la caída del congreso nuestro ejército ha tenido grandes avances en nuestro armamento, actualmente no disponemos de ningún territorio conquistado puesto que no hemos visto la necesidad de abandonar nuestro planeta. Como era costumbre, la general Krastina presentaba su informe a su señor. Sauron solo yacía sentado en su trono absorto en sus pensamientos mirando a la nada.
¿Ocurre algo mi señor? Krastina alzó una ceja, era muy extraño ver al gigante perdido en sus pensamientos. Los minutos pasaron, y no hubo respuesta alguna. Con su permiso, debo retirarme a reorganizar nuestras filas. Inclinándose con gracia, Krastina reverencio a su señor antes de regresar a sus quehaceres. Los minutos se volvieron horas, las horas se volvieron días, todos estaban muy confundidos ante esto.
Ha estado así por días
¿Crees que algo malo está pasando?
Deberías ir y preguntarle en persona.
Los comentarios de algunos guardias de turno eran escuchados perfectamente por Sauron, los espectros del anillo rondaban el castillo como de costumbre cuando un gran estruendo se escuchó desde el trono. ¡No lo encuentro! Maldiciendo en el interior de su cabeza, propinó un fuerte golpe al apoyabrazo hundiendo el metal con su puño. Durante todos los días que Sauron estuvo "Inactivo" realmente estaba buscando algo en específico, o más bien un lugar. Por mucho que busqué no encuentro la gema del alma, poseo la gema de la realidad, la gema de la mente y el espacio ya tienen dueño actualmente al igual que la del tiempo. Esto solo me deja con la gema del poder y del alma. Levantándose de su trono, camino por los corredores subiendo las escaleras hasta encontrar su dormitorio, estaba igual de siempre que cuando estaba en vida siendo evidencia del cuidado extremo y obsesivo por parte de la General. No puedo tener cabos sueltos, por ahora deberé buscar la forma de dar con su localización. Como si de un sexto sentido se tratase, a su espalda reapareció Krastina arrodillada de una pierna. ¿Necesita algo? Sin voltear a mirarla, Sauron se dirigió hacia el balcón del dormitorio deleitándose con las miradas de su tierra. Necesito que busquen todo tipo de información relacionada con la gema del alma, todo aquel que tenga información sobre su paradero será recompensado. Colocando sus manos en el mármol, este empezó a derretirse al contacto de la armadura. Y si alguien oculta su paradero, tráelo vivo o muerto. Krastina asintió al mandato desapareciendo entre sombras, no hizo preguntas y tampoco vaciló, solo acató su orden. Bien, ahora mismo Hela está acabando con las pocas fuerzas hostiles. Desde que desperté muchas fuerzas han intentado invadir Asgard. Cerrando sus ojos, su conciencia viajo más allá de lo que su mirada era capaz. El ojo de fuego que ahora yacía en lo más alto de una torre de hierro negro se movía errático acatando su voluntad.
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He Reencarnado En El UCM... Como El Señor Oscuro??
FanfictionMi nombre era Alexander, fui un soldado de la resistencia en mi nación pero todos fuimos traicionados... Ahora he cruzado a través del umbral de la muerte con un nuevo y terrible poder. Nada ni nadie se interpondrá en mis ambiciones, no existe luz q...