La caída y el rescate del amor

Capítulo 7

Selena se detuvo un momento antes de decir “Adelante!” 

Apenas se escucho su voz fria, la puerta de la habitación se abrió y entró un hombre completamente desconocido, grande y vestido de negro. 

Selena fruncio el ceño y preguntó - "¿Quién eres?"

Jose Bernardo asintió cortesmente hacia Selena y dijo - "Señorita Selena, buenas, soy José, el asistente especial del Sr. Terrén. Él me pidió que le trajera estos pasteles".

Selena, siendo inteligente como era, no tuvo ninguna duda al confirmar que este hombre llamado José estaba hablando del “Sr. Terrén”, que tenía que ser David 

Pero, ¿sus acciones realmente tenían que ser tan rápidas y directas? 

Selena: - "Secretario Bernardo, lo siento, pero creo que todavia no estoy tan familiarizada con el Sr. Terrén del todo, por eso no puedo…."

José: - “Señorita Selena, el señor dijo que usted acaba de despertar y debe prestar atención a su dieta. Si usted se niega, significa que no le gustan estas cosas. El señor me ordenó que siga cambiandolas hasta que esté satisfecha y las disfrute”. 

José parecía haber anticipado que Selena se negaría, y comenzó a hablar antes de que ella pudiera terminar su última palabra.

Mientras hablaba, su rostro estaba inexpresivo, siendo cortés pero firme y sus palabras eran concisas sin ser redundantes, transmitiendo sin lugar a dudas la intención y actitud de David.

Ver a José era como ver a David. Este hombre era sin duda excepcional 

Selena no pudo evitar mirar a José con una pizca de admiración en sus ojos. 

Sin embargo, con cierta resignación, Selena pasó una mano por su cabello y luego le dijo a José. - "No hay necesidad de molestarse, por favor agradezca al Sr. Terrén por mi".

José se acercó y colocó la bolsa de papel de lujo en el gabinete, luego hizo una ligera reverencia hacia Selena.

José: - “Señorita Selena, disfrute de su comida”. 

“Está bien!”. - Selena asintió en acuerdo, y José se enderezo, pero se quedó a un lado, sin intención de dejar la habitación. 

Selena levantó la vista para mirarlo. 

Al encontrarse con sus ojos, José le dijo: - “El señor me pidió que me quedara aquí hasta que termine de comer” 

Selena apretó los labios y abrió la bolsa en la mesa. Al ver la marca en la bolsa, se sorprendió ligeramente, resultó ser de ese famoso restaurante. 

Aunque el frente del famoso restaurante no era grande, cada plato en su interior era exquisito y delicioso. Comer en ese famoso restaurante ya no era una cuestión de cuánto dinero tenías .

Hacía menos de media hora que se había separado de David y la comida de ese lugar ya había llegado a sus manos. 

Selena no pudo evitar sentir curiosidad por David. Con el rostro inexpresivo, abrió el paquete y se sorprendió al ver que incluso las cajas para llevar y los utensilios estaban hechos de madera especial reciclables. 

Estaba siendo realmente generoso 

No había necesidad de mencionar el sabor de los panqueques, pero Selena solo tomó un bocado antes de levantar la cabeza. 

Miró a José y se dio cuenta de que él la miraba fijamente. 

Selena dejó el tenedor.

José la miró con duda, y luego le dijo con franqueza.