Estúpido Todoroki - TodoBakuTodo

Capitulo diez

Una noche de insomnio

Había sido un día de mierda, y el resultado de eso se había convertido en una noche de insomnio.

No poder dormir era algo a lo que no estaba acostumbrado, pero últimamente solía ocurrirme con mayor frecuencia.

Esta noche, mi falta de sueño se debía a un incidente en los entrenamientos. No porque estos fueran exigentes, sino más bien yo los había vuelto así.

Y es que desde hace una semana había encontrado un espacio alejado de los dormitorios que me permitía entrenar sin que Aizawa o los robots de vigilancia lo notaran.

Eso hizo que mi rutina se convirtiera en esto:

Me levantaba a las dos de la madrugada para poder entrenar en aquel lugar y volvía antes de que todos los extras se despertaran (6:30 am), luego iba a clases, donde de nuevo volvía a entrenar, después regresaba a los dormitorios y realizaba las tareas o proyectos que nos hubieran dejado, para posteriormente esperar la hora de la cena, comer, hacer un poco de estiramiento en mi habitación y finalmente dormirme a las 8.

Cosa que no paso hoy, pues termine sobre exigiéndome más de lo debido, ya que ayer sentí que durante los entrenamientos de la clase, estos no habían sido lo bastante buenos como para llenar mis expectativas. Por lo que esta madrugada, un intento por aumentar la potencia explosiva de mi quirk terminó en una lesión de mi hombro y brazo. En ese momento solo había sentido un ligero tirón, por lo que no le tome demasiada importancia y tampoco creí que fuera necesario avisarle a alguien.

Un estúpido error, ya que durante el entrenamiento de la clase del mediodía, el malestar había incrementado tortuosamente.

Apenas y podía levantar mi brazo, por suerte nadie pareció notarlo. En resumen, ahora me encontraba en mi habitación con un dolor tan insoportable, que causaba mi falta de sueño.

"Toc, Toc"

El toque de la puerta fue bajo, pero irritante.

"Toc, Toc"

Cerré los ojos. Solo lo ignoraré.

"Toc, Toc"

¿¡A quién carajos se le ocurre venir a buscarme a las putas 10 de la noche!?

Me quedé en silencio, esperando que no volvieran a tocar, sin embargo...

"TOC, TOC"

"TOC, TOC"

"TOC, TOC"

¡Ahg!

Me levanté de la cama aun con el dolor punzante de mi brazo y sin siquiera encender la luz, me dirigí a abrir la puerta.

"Te juro pelos de mierda que te voy a-" me detuve en cuánto noté que no se trataba de Kirishima, sino de ti.

Tu mirada inquisitiva inevitablemente chocó con la mía haciéndome callar, aunque eso no evitó que yo también te escaneara rápidamente.

Llevabas puesta una pijama, la cual consistía en una playera manga larga gris y un pantalón de cintura elástica del mismo color, además de ello traías contigo una caja roja: era un botiquín portátil.

"Con permiso" dijiste de forma tranquila, para luego abrirte paso al interior de mi cuarto.

"¡Oi!" atine a decir para luego cerrar la puerta detrás de nosotros.

"Siéntate" ordenaste firme, mientras señalabas mi cama. Tu repentina intromisión y excesiva confianza me desubicaron por un segundo, iba a gritarte, pero en ese momento tu presencia era algo que no me molestaba.