Especial 2 de Nov.

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Nota: La siguiente historia es una adaptación de una leyenda de mi país y sucede a finales del siglo XIX. Espero les guste... como siempre este especial no afecta en nada a la historia principal. 

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El joven del día de los finados

Una mañana de octubre, por las calles empedradas caminaba el joven Bakugou Katsuki hacia la universidad. Eran pocos los jóvenes de la época que asistían a estudiar en la Escuela de Derecho; siendo él uno de ellos. 

La figura esbelta y fuerte se hacia resaltar sin esfuerzo por el pueblo, Bakugou era un joven proveniente de una familia acomodada, tenía un carácter detonante pero detrás de ello se ocultaba un joven agradable y atento. 

Un día mientras Katsuki se encaminaba hacia la universidad, decidió acortar camino al pasar por el Barrio de San Sebastián, cuando casi se topa con un hermoso joven de cabellera roja y blanca que entraba con prisa hacia el templo. Los ojos del joven llamaron la atención de Katsuki, no solo por su singular color gris y turquesa sino también por que se veían penetrantes y angustiados. Katsuki tuvo la intención de seguirlo sin embargo, la última campanada que llamaba a misa, le  recordó que llegaría tarde a clases. 

Desde aquel día Katsuki esperaba con ansias el toque a misa de las seis, para poder ver de nuevo al hermoso joven que lo había cautivado,  tal y como sucedió aquella vez, pudo ver de nuevo al joven bicolor, este lleva puesto un pulcro traje color negro y para fortuna del rubio cenizo, el heterocromático le dirigió la mirada con disimulo.

Los días pasaron y aunque Katsuki intento saber quien era, nadie del pueblo supo decirle, por lo que un día decidió llevar a sus amigos consigo para ver si alguno de ellos conocía al misterioso hombre, sin embargo, ese día el joven bicolor no llegó a misa. 

—Para mi que lo estás imaginando— soltó burlón Kaminari, mientras disimulaba su risa lo más que podía

—Sera mejor si dejas de pensar en ello— respondió esta vez Kirishima, al mismo tiempo que le daba una palmada en el hombro, a modo de confort.

—Si Bakugou, olvídalo y diviértete, habiendo tantos que ya te echaron el ojo. ¿Por qué perder el tiempo con alguien que ni conoces? — sugirió Sero despreocupado. 

Katsuki, realmente quería golpearlos, aunque quería más golpearse a sí mismo por haberlos traído. Suspiro con enfado, y abandonando la idea de volver a ver al joven ese día, se regreso con sus amigos de nueva cuenta.

...

Como Katsuki era amante del arte, esperaba con ansias la temporada de opera que daba comienzo en la semana de pascua.

La noche de la opera llegó, ya pasada la hora de las animas,  Katsuki se dirigió al teatro. Vestía un impecable traje de color azul marino y aunque odiaba usar corbata, la etiqueta era un requisito indispensable para entrar. Pago su boleto y tomó asiento en primera fila. 

Cuando la obra terminó, los aplausos no se hicieron esperar y por azares del destino Bakugou dirigió su vista hacia uno de los palcos.

Ahí, vio con sorpresa al mismo joven de San Sebastián, sus ojos tristes resaltaban entre el rojo carmín de las cortinas de terciopelo. 

Cuando el telón cayó y todos ovacionaron de pie, el joven bicolor se levantó, por lo que Katsuki se apresuro a seguirlo, corrió lo más que pudo pero cuando logro salir del teatro, vio con desespero como el joven subía a un carruaje alejándose tortuosamente de él, sin posibilidad de alcanzarlo Katsuki regresó a casa abatido. 

Estúpido Todoroki - TodoBakuTodoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora