Capítulo 3

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Aquella noche finalmente Cyno salió a tomar unas copas, Tignari había preferido quedarse, estaba agotado y tampoco se sentía bien que el otro le estuviera pagando todo. Por allá la una de la madrugada, Tignari estaba tan tranquilo en el sofá cuando de pronto se abrió la puerta de golpe y entró Cyno con una mujer besándose salvajemente.

Tignari se quedó sin aire, no sabía si el otro se acordaba que él estaba allí. Y el apartamento no tenía mucha intimidad, pero tampoco quería ver como tenía sexo con una mujer. Así que lentamente se levantó para intentar escabullirse, pero la mujer lo cogió por el brazo.

- No me habías dicho que vivías con un chico tan guapo, creo que nunca me he acostado con un chico zorro.

Tignari se quedó mudo. Él, el chico más virgen del planeta estaba envuelto por dos personas borrachas sin sentido alguno.

- Y-yo... - pero antes que pudiera decir nada lo empujó contra Cyno que estaba medio sentado en la cama y cayó encima de él. Tignari se sonrojó mientras se intentaba levantar.

- Bésalo... - dijo la mujer sedienta de sexo. Cyno lo tomó por la barbilla para subirle la cara y lo empezó a besar metiéndole la lengua como si no hubiera un mañana.

- Ah Cyno... - Tignari no podía escapar, se sentía abrumado, pero también se sentía muy caliente y le gustaba besar a Cyno, sus labios eran adictivos. La mujer se puso a su lado y le iba tocando el pecho descubierto a Cyno. Cuando se quedaron sin aire la mujer le giró la cara a Cyno y se empezaron a besar salvajemente. Tignari intentó huir, pero Cyno lo agarró con fuerza y lo mantuvo encima su regazo.

- Cy-cyno yo... - pero antes de que pudiera decir nada Cyno le metió la mano dentro de su ropa interior y le empezó a meter los dedos por detrás.

Tignari hizo un gemido y se abrazó a Cyno avergonzado. De pronto la mujer rompió el beso con Cyno y se cayó en la cama dormida, iba tan borracha que no se aguantaba. Cyno que iba muy caliente se giró hacia Tignari y le apartó la cara de su hombro. Se lo quedó mirando y lo volvió a besar salvajemente mientras con la otra mano le iba metiendo los dedos. Tignari estaba tan excitado que estaba medio mareado. Cyno lo separó y lo quitó de encima suyo para estirarlo en la cama. Tignari lo miraba atemorizado.

- Cy-cyno... - Cyno se puso encima de él y le empezó a morder el cuello mientras le subía la camiseta. Tignari no entendía como había llegado a aquella situación.

Notó como Cyno le empezó a bajar los pantalones junto con la ropa interior.

- Ah... Es-Espera... - Cyno lo miró fijamente, su mirada estaba como perdida.

- ¿Espera que? No temas no te haré daño.

Tignari no dijo nada así que Cyno siguió con lo suyo. Se sentía muy vulnerable, Cyno ya le había quitado toda la ropa y estaba todo desnudo debajo de él. Estaba muy sonrojado. Vio como Cyno se quitaba sus pantalones y la ropa interior dejando ver su gran erección. Tignari lo deseaba más que nada en el mundo... Pero no estaba seguro que estuviera consciente y supiera lo que estaba haciendo.

- Cyno espera... Yo...

Pero Cyno no le hizo caso y puso su miembro a su entrada y empezó a empujar.

- Ahhhh Cyno - Tignari chillaba de dolor y placer al mismo tiempo. Empezaban a salir lágrimas de sus ojos, hasta que Cyno la entro toda y lo abrazo hacia él.

- Dime cuando puedo empezar a moverme... - dijo mientras le lamia las lágrimas.

Tignari lo abrazó más e hizo un gemido.

- Ya puedes - dijo tímidamente con un hilo de voz, así que sin perder tiempo Cyno empezó a embestirlo con fuerza. Le cogió las dos manos con una mano y las subió por encima de su cabeza.

El Apartamento - CynonariDonde viven las historias. Descúbrelo ahora