Narra Chase:
No había palabras existentes en el lenguaje para expresar lo tan feliz que estaba de ver a Scarlet. Siempre me considere alguien analítico a la vez que sentimental, un amalgama dual bastante estúpido y irónico para la figura que representaba un detective policial ante la sociedad.
Tuve muchas novias, es cierto...pero...ninguna me hizo sentir lo que sentía por Scarlet.
Desde mi adolescencia me acostumbre a que la única forma que las mujeres expresen amor por mi era mediante maltratos, ya sean fisicos o psicológicos. No era capaz de concebir que una mujer no me amara de otra manera, aún recuerdo como esas secuelas prevalecieron incluso después de mi adolescencia, cuando recién entraba a la universidad y conocí a mi última y tóxica novia hasta la fecha.
Romperme el móvil, golpearme hasta hacerme sangrar, llamarme patético o menospreciarme...era lo único que conocía como "amor". En aquel entonces pensaba que era lo normal, hasta que hubo un punto de inflexión en que simplemente...no pude más.
Supongo que fue un gran factor el haber pasado por tantas relaciones tóxicas, para que se diera el hecho de que quisiera desvincularme lo máximo posible del sentimiento del amor romántico por un largo tiempo, hasta que alguien llegó a mi vida, alguien llamada Scarlet.
Es cuanto menos irónico el como nuestra relación evoluciono: pasando de una utilización mutua a una catarsis de aprecio y cariño, para ser colmada con una mutación que derivó en amor romántico. Todo de ella me fascinaba: su singularidad, su historia, pero sobre todo lo pura y genuina que podía llegar a ser a la hora de expresarse, alguien protectora y dulce, con un lindo (y sexy) envoltorio gótico. Era tan hermosa, tan genuina, tan noble, no podía amarla más.
–Chase, en ningún momento pensé que fuiste desconsiderado conmigo.– su oración me había despertado del leve trance mental en el que me había perdido por unos instantes – más bien todo lo contrario, te preocupabas muchísimo por mi, siempre eras atento y cariñoso conmigo, incluso si no tenías que porque serlo, así que no te llames eso porfavor.
Yo, simplemente no dije nada: la mire fijamente a esos ojos, rubíes como la sangre, levante su mentón levemente con mis dedos, obligándola a mirarme a los ojos, para que seguido trazará levemente lo mi dedo pulgar sus labios, acabando el recorrido en su cicatriz en forma de X.
Podía notar como su aliento y nerviosismo estaban cada vez más presentes, poco a poco, sus mejillas se pigmentaban de un rojo escarlata, valga la redundancia.
Las palabras sobraron, solo éramos nosotros dos, con nuestros rostros acercándose, para encontrarse en un tímido, pero dulce beso. Sus labios eran hermosos, de un color cereza, acentuados con el relieve de su cicatriz, se me hacía muy agradable al tacto y me hacía desear explorar más de esos labios que había deseado por tanto tiempo. Nuestro beso resultó ser más largo de lo que pensamos al principio: ese beso era como una droga codiciada por ambos, un nirvana que ninguno de los dos estaba dispuesto a dejar escapar.
Podía notar a Scarlet nerviosa a comienzos de nuestro beso, del color al que hacía honor su nombre, con los ojos cerrados fuertemente (era tan adorable), para que, a medida que fluía mas nuestro beso, su cuerpo cedía ante la relajación y el gozo. Sinceramente, no lograba pensar con claridad, tanto ella como yo estábamos perdidos en aquella sensación tan mágica, no era mi primer beso ni mucho menos, pero...al besar a Scarlet por primera vez, y de forma un tanto irónica por su condición de parca, sentí algo que no había sentido antes con ninguna de mis anteriores parejas... calidez.
Era tan único, por mucho que hubiera evolucionado respecto al tema del amor...no dejaba de ser alguien sentimental, por mucho de lo que quisiera ocultar, pero en esos momentos, lo último que deseaba, era el reprimirme más respecto a mis sentimientos. Quería que Scarlet sintiera mi amor por ella, sin máscaras de falsa fortaleza, sin más ataduras, simplemente quería mostrarme expuesto ante ella, tanto como ella lo hacía siempre conmigo.
Un instante se volvió una eternidad, nuestra noción del tiempo fue alterada completamente desde que hicimos contacto con nuestros labios. Podía notar la inexperiencia de ella, yo era el que tenía las riendas en aquella ocasión, así que decidí ayudarla para que se sintiera más confiada: la guíe con gentileza, instándola a qué se dejar llevar por esa sensación placentera.
Ella agarro un poco mi mano, entrelazando sus temblorosos dedos con los míos, en una perfecta conexión táctil. Yo decidí aventurarme con cautela a posicionar mi mano en su cadera, tan curvilínea y sobresaliente, tenía miedo a incomodarla, pero por sus signos parecía todo lo contrario.
–¿Estas bien?¿Quieres seguir? – quería asegurarme de que ella estaba bien, que tenía su consentimiento y que no la incomodaba.
–E-Estoy p-perfecta Chase. – su voz era temblorosa, se notaba que fue toda una descarga de serotonina y nuevas sensaciones para ella, tanto que parece verse un poco superada.
–Eres muy adictiva, aunque noto algo extraño, ¿Acaso empezaste a fumar?
___________________________________________🥀FIN del cap🥀
Soy yo o se puso un poco caldeante el asunto? Si os gustó dadle amor y comentad, os leo.
Chaoooooo~💞💞💞💞💞
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❌Nuestro hermoso accidente ❌
General Fiction❌IMPORTANTE❌: (Estos eventos ocurren poco después del inicio de la 4 temporada) _________________________________ Desde que Chase se fue, Scarlet estaba desesperada por encontrarle, movió mar y tierra, hasta que finalmente, y en medio de casi una d...