Los murmullos llenaban aquella Sala, su cabeza daba vueltas y juraba que podía escuchar su propio corazón latir desmesurado, sus manos temblaban sin control alguno y sentía que sus piernas en cualquier momento dejarían de funcionar; su miraba solo podía estar en un solo punto, aquellos ojos azules que hacía tan sólo un par de meses le habían cautivado, aquel hombre que le había jurado amor eterno, aquel al que le había entregado su corazón estaba de rodillas rodeado de caballeros en Guardia apuntando directamente a su cuello esperando cualquier movimiento brusco, más sin embargo aquella mirada que alguna vez había sido penetrante ahora sólo estaba cargada de miedo.
¿miedo a su muerte? Quizá pero en sus adentros, Sebastián anhelaba que fuera miedo a perderlo.
-¿Cuál es su secreto, Alteza?-
Resonó la pregunta del sirviente en el gran salón de mármol, seguido de un grito proveniente del hombre que alguna vez había sido su amante.
-¡Sebastián! Te juro que puedo explicarlo, por favor, escúchame aunque sea una última vez.. -
Lange desesperado por que el príncipe se interpusiera exclamó, una patada azotó contra sus costillas ahogando su voz.
-Silencio, ¿quien te crees para llamar de esa forma a su Alteza?-
Uno de los guardias exclamó con desdén.
El joven heredero solo pudo ocultar su rostro tras el hombro de su padre el cual miraba con odio puro al hombre de rodillas y apariencia decadente; había dañado lo que más amaba en este mundo cosa que no iba a dejar pasar con facilidad.
El rey bajó la mirada hacia su único heredero en espera de al menos escuchar un murmullo, pero Sebastian ni siquiera levantó la cabeza antes de irse de aquel lugar sin explicación; estaba abrumado y sabía que si se mantenía por un segundo más en esa gran habitación la poca estabilidad que intentaba mantener ante el consejo se terminaria rompiendo aquella muralla que cubría sus emociones que tanto le había costado construir a lo largo de su vida.
ESTÁS LEYENDO
Bugambilias
FanfictionGuapo Duo La bugambilia, la planta de las llamas gemelas, también está asociada con el amor verdadero.