La misión más difícil de mi vida

misión XIV

5 de septiembre, eso marcaba el calendario, hace ya 6 días qué Kyle volvió de su misión en México, hoy le tocaba una con su padre, hace años que no tenían una misión juntos.

Kyle estaba en su habitación arreglándose para irse, de la nada empezó a escuchar gritos, se sobresaltó ya que no era normal escuchar discusión entre sus padres, termino de arreglarse y salió a ver que sucedía

-NO PUEDES IR...ENTIENDE...POR FAVOR...

-Bria, todo estará bien, te lo prometo, en serio.

-PERO ES CHARLES... ¡¿NO RECUERDAS LO QUE PASO LA ULTIMA VEZ...?!

-Lo sé, pero debemos detenerlo, no justifico lo que le hizo a Kyle, pero prometo que todo estará bien.

- ¿Charles...?

Ambos adultos dejaron de discutir y vieron a su hijo, Brianda se tapó la boca.

- ¿Vamos a enfrentarlo? - dijo con los ojos abiertos como plato, se veía un enojo incontrolable y apretó sus puños con fuerza.

-Kyle, em, pues, así parece- dijo nervioso.

- ¿Olvidaste lo que me hizo? ¡¿OLVIDASTE LO QUE TE HIZO A TI?!

-Hijo, yo también estoy enojado, pero es nuestra oportunidad para acabar con él.

-Papá...no quiero perderte a ti también, sabes cómo es.

-Lo sé...fue mi amigo de la infancia, lastimosamente lo conozco, pero es nuestra oportunidad.

-Papá-dijo firme y molesto- tengo un mal presentimiento.

-Hijo, todo estará bien.

-Max.

-Tranquila- dijo mientras volteaba a verla

Ambos chicos se fueron mientras Bria los veía irse, el ambiente estaba tenso, era entendible.

-Haru.

El adolescente miró a su padre sin decir ni una sola palabra, el mayor miró a su hijo y lo atrajo a él para abrazarlo.

-Sé que lo que pasó hace 6 años es horrible, pero, mira el lado positivo, puedes detenerlo.

-Lo que quiero es matarlo, pa', me quitó a Samara e hizo que Tomás me odiara, ¡¿QUÉ MÁS QUIERES?!

-Kyle- se arrodilló frente a él para verlo a los ojos- vamos, arrestémoslo y todo acabará para ti, tu tormento emocional acabará. - El adolescente lo miró con lágrimas en los ojos, se mordió el labio y apretó sus puños con rabia.

Ambos fueron a su misión, llegaron a una casa antigua pero muy elegante, según datos que les envió la agencia, ahí vivía Charles, Kyle esperaba la orden de su padre, al entrar una bala los recibió, se tiraron al piso para protegerse, alzaron la mirada y ahí estaba.

-No esperaba visitas tan temprano, lamento este desastre- se detuvo a ver quienes habían entrado a su casa- ¡Pero si son los Harbord!, Hola, pequeño Kyle, hace 6 años que no te veía ¿cómo está Samara? Oh, es verdad, lo siento, está muerta- dijo mientras dibujaba una sonrisa en su rostro, el joven mencionado abrió los ojos apretó sus puños.

Se levantó con trabajo ya que su padre lo retenía, agarró su pistola y empezó a dispararle, Charles las esquivo todas.

-NO VUELVAS A MENCIONAR SU NOMBRE.

-Vi que te gusta una chica nueva, Jane si mal no recuerdo, ¿qué pasaría si le aplicamos la misma que a Samara?

-Maldito...-dijo mientras agarraba con fuerza la pistola.

-Haru- dijo su padre tratando de calmarlo.

-Hazle caso a tu papi, niño.

-Charles, entrégate, no quiero lastimar a mi amigo de la infancia- dijo mientras se levantaba y ponía a su hijo detrás de él para protegerlo.

-Vamos Maxi, ser malo es tan divertido y no creas que no me he olvidado de lo que me hiciste.

- ¿De lo que te hice? - se mostró confundido- yo traté de ayudarte, incluso te perdoné por lo que tú me hiciste.

-yo no te hice nada, fuiste tú, Max, recuerda que te dije que haría tu vida imposible- diciendo esto le apunto con su arma.

Kyle tenía miedo, agarro la mano de su padre y trató de salir corriendo por puro impulso, pero las puertas no abrían.

-estuve esperando este momento por 17 años.

-CHARLY- volteo Max para ver al hombre que amenazaba con matarlos.

-ugh, ese estúpido nombre de "Charly", Maxwell, deja de decirme así-apuntó su arma a la cabeza del adulto peli negro.

Kyle en un impulso empezó a correr con su padre para poder ponerlo a salvo, corrieron por la casa mientras Charles los perseguía, Max le disparaba mientras Kyle trataba de abrir una ventana pero al parecer activo un mecanismo que hizo que un montón de agujas se le clavaran en la mano, el adolescente gritó del dolor alarmando a su padre, lo agarro de la cadera para llevárselo, cuando el adolescente saco su mano de las agujas su padre se lo llevo corriendo, lanzo una bomba de humo para perder de vista a su enemigo, funcionó.

Cuando Charles logró dispersar el humo ya no los pudo ver, chasqueo la lengua fastidiado.

-carajo... ¿ahora donde pudieron meterse? - pensó un momento y sonrió para después comenzar a caminar tranquilo.

Ambos hombres llegaron a un cuarto, Kyle empezaba a sentirse mal, Max intento calmar a su hijo, pero este tenía fiebre.

-Kyle está infectado de hepatitis C, tengo los medicamentos necesarios para curarlo, Maxwell, sal, curare a tu hijo- dijo fuera del cuarto.

-papá...

-todo estará bien Kyle, lo prometo.

-no...papá...es una trampa.

-te quiero Kyle-diciendo esto le dio un beso en la frente, lo miró y pudo observar que tenía lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos- hey, no llores, todo estará bien.

Kyle abrió los ojos, recordó lo que le había dicho...:

-hey, no llores, todo estará bien.

-NO...PARA-dijo como podía, la fiebre lo estaba matando.

Max salió del cuarto dejando a su hijo dentro, miro a su examigo y se puso serio.

-dámelo, ya- ordenó.

Dejo el medicamento en el suelo y lo rodo hasta los pies de Max, el adulto agarró el medicamento y dio la vuelta, al abrir la puerta miró a su hijo.

-Kyle, to-fue interrumpido por un balazo en la cabeza, el cuerpo inerte de Max cayó frente a su hijo, el frasco de medicamento se abrió.

Kyle miraba el cuerpo de su padre, su boca temblaba, cubrió su boca y dio un grito desgarrador.

-PAPÁ, NO...PAPÁ...-gritaba con dolor.

-ups, perdón- dijo entre risas y se fue tranquilo.

Kyle activo un botón de emergencia en su reloj de muñeca, se acercó como pudo hacia su padre y recargo su cabeza en sus piernas.

-papá...no...papá...-decía entre llanto y con la garganta tapada- h-hey...vamos...despierta...va...mos...-agacho la cabeza y sus lágrimas caían sobre las mejillas de su padre- ya...ya no me vuelvo a quejar de tus abrazos fastidiosos...pero...por favor...no me dejes...papá...- cayó al suelo inconsciente.