ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ ɪɪ

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Como el día anterior tuvo que irse de la casa del peli rosa, ni siquiera pudo preparar la sopa que había prometido, ahora que entiende mejor como funciona la poción sabe que no tiene opción.

Caminaba por el bosque con una cacerola y una bolsa de viaje colgando de su brazo. Pensando en una excusa en caso de que Happy preguntara porque no le había dejado la sopa que prometió y porque regresaba para ver al peli rosa. 

Cuando llegó a la casa, ni siquiera tocó antes de entrar, no quiere irrumpir de esta manera pero está segura de que si toca, Natsu se negaría a abrirle. Se dirigió a la cocina dejando la cacerola en la estufa.

Tomó aire, armándose de valor antes de subir al segundo piso del lugar. Investigó cada una de las puertas: era un baño, un cuarto lleno de cosas tiradas y asume que el último debe de ser el cuarto del peli rosa.

Toco la puerta ligeramente, en este punto Natsu debió de darse cuenta de que está allí, ya fuese por su olor o el ruido, aun asi toco para no sorprenderlo.  

- Te dije que no vinieras.

Dijo una voz pesada detrás de la puerta. Juvia se sonrojo, por alguna razón la voz rasposa y pesada del chico sonaba atractiva, nunca se hubiese imaginado que Natsu podría hablar así.

Basta Juvia, no pienses esas cosas.

- J-Juvia lo sabe. Pero necesita hablar con Natsu-san.

- De verdad no me encuentro bien.

- Juvia lo sabe.- se recargo en la puerta.- Juvia leyó la etiqueta de la poción, lo que hace es aumentar las emociones y pasiones hacia la persona de quien la bebe, pero como la poción fue específicamente hecha para Juvia, entonces Natsu-san se siente, bueno, atraído hacia Juvia, solo ella puede ayudar.- tragó saliva.- Con su problema… Juvia lo pensó mucho, tal vez la poción le está afectando de esta manera porque Natsu-san es un Dragon Slayer, así que sus instintos actúan con la poción.

- ¿Sabes sobre eso?

- Si, Gajeel-kun le ha hablado sobre ello. La poción no debería de tener este efecto, en el peor de los casos solo debería de haber sentido una atracción hacia Juvia, como, solo encontrarla linda y eso, o verla como un posible interes romántico, pero la naturaleza de su magia hace que, bueno-

- ¿Tenga una maldita erección y apenas pueda evitar querer abrir esta puerta y-? Ay, mierda.

Juvia brincó al escuchar que el chico golpeaba su cabeza contra la puerta.

- Ya te dije que no es tu culpa. Pero de verdad tienes que irte.

La peli azul hizo un puchero. No se había armado de valor para que el chico la echara.

- ¿Happy-san está en casa?

- No. Le dije que lo que tengo es contagioso y que se quedara con Lucy esta semana. Erza, Gray y Lucy vinieron a visitarme, pero los termine echando, seria incomodo que me vieran así.

Natsu se rió divertido.

- Bueno, siempre podría burlarme de Gray por esto.

- ¡No haga eso Natsu-san! Juvia se sentiría muy avergonzada si Gray-sama se enterara.

- Como si a la princesa de hielo le importara.- murmuró molesto.- Lo siento, no quise sonar-

- No, está bien. Es solo la poción ¿No?

- Si. Supongo que lo es.

La chica tomó aire. Giró la manija de la puerta y la abrió.

De un segundo a otro, el peli rosa la tenía contra la pared. Sabe que la poción hace que la desee ¿Pero es necesario que haga eso cada vez?

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