ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ xɪ

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La mujer los regañó terriblemente, además de restregarles en la cara que el chico aún no estaba bien de salud.

Juvia dejó que la mujer revisará a Natsu, al parecer no había empeorado, pero tampoco mejorado. Al final, al no poder hacer más por el chico, Juvia decidió llevárselo a casa, se encargaría de él allí ya que Porlyusica no podría hacer más.

Le costó bastante subirlo hasta su cuarto y acostarlo en su hamaca, él entraba y salía de la conciencia de manera intermitente. Eso le preocupa.

Al final llamó a Gajeel y Lucy para que la ayudarán, tenía que ir a Fairy Hills para hacer una nueva maleta si se iba a quedar con él hasta que despertara por completo. Ambos junto a Happy se quedaron con Natsu hasta su regreso.

- Juvia de verdad les agradece.- se inclinó agradeciendo.- Juvia promete solucionar esto.

- Más te vale mujer.- le dijo el Dragon Slayer de ojos rojos.- Y no haría mal darte un baño, apestas al Salamander.

Juvia se puso roja, no está segura si Lucy sabe a lo que se refiere, pero el simple hecho de que Gajeel lo sepa, es vergonzoso.

- Espero que las cosas salgan bien.- Lucy la tomó de las manos con una sonrisa.- En serio.

- Muchas gracias Lucy-san.

- ¿¡Ya estás listo, Happy!?- grito la rubia hacia el Exceed que bajaba del piso superior volando.

- ¡Aye!

Juvia casi muere de ternura al ver al gato bajando con una pequeña maleta de su tamaño, se ve tan adorable.

- ¡Cuídalo bien!- dijo Happy a la peli azul.- Es un idiota, pero de los buenos.

Juvia se rio.

- Claro.

- ¿Qué llevas allí?- preguntó Lucy señalando la pequeña maleta.

- ¡Pescado!

Lucy lo miró con disgusto.

- Solo no vayas a dejarlo en mi cama de nuevo.

- ¡Aye!

Con eso todos se despidieron de la maga de agua.

Cuando regresó de su lugar en Fairy Hills, le dijeron que Natsu se despertó preguntando por ella y que luego volvió a dormir, se nota que va a tardar en estar consciente.

Así que mientras, podría arreglar un poco el lugar.

Tomó los utensilios de limpieza del ropero que le mostró Natsu cuando se quedó con él y lo obligó a limpiar, ese lugar es el más sucio de toda la casa.

Empezó a trabajar, con su magia es más fácil lavar el suelo, entre otras cosas.

Cuando llegó al rincón de la casa donde Natsu guarda todos sus recuerdos, no estaba segura si limpiaba allí ¿Qué tal si tiraba algo que era un recuerdo por accidente? Decidió que dejaría esa área para que Natsu la limpiara. Después le haría la sugerencia de que pusiera repisas en ese lugar para que lo mantuviese ordenado.

Se tropezó con un cofre que estaba medio fuera de debajo de la mesa.

- ¡Au!- se frotó el rostro, se había caído totalmente de cara.- Juvia no vio esto. Debería arreglarlo.

Se dijo a sí misma tomando las cosas que salieron de la caja por el impacto.

- ¿Eh? ¿Esta no es…?

Sostiene una caracola azul brillante. 

- ¿No es la caracola que Natsu vio en el arrecife? 

Miró con atención las cosas que se habían salido de la caja. Logró reconocer un pequeño peluche de un chillón morado de la feria, una concha de la playa donde tuvieron su segunda batalla y…

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