La Hija Oculta [Sasuke Uchiha / Kiba Inuzuka X OC] (Naruto)

004. El Protector

Kakashi se encontraba con Hana supervisando la operación de ojo de Yuki, mientras que Akamaru estaba afuera del quirófano esperando a la perrita. Kiba estaba sentado en un banquito cuidando de Mahara, que se encontraba reposando en su cama. Su respiración había vuelto a la normalidad y su rostro se mostraba menos tenso. De un momento a otro, ella empezó a contraer el rostro queriendo despertar, abrió los ojos y se sento de golpe en la cama y gritó:

—¡¿Dónde está, Yuki?!—. Pregunto Mahara histérica. Kiba trató de calmarla para que no saltara de la cama.

—Está siendo operada de su ojo, Mahara—. Le dijo serio. Mahara lo miro a los ojos. Kiba podía leer la preocupación en sus ojos.
—Estará bien—. Aseguró Kiba mientras le acariciaba la espalda. Mahara se relajo y abrazo a Kiba en busca de consuelo.

Ella empezó a llorar diciendose que era una mala dueña y amiga por hacerle algo así a Yuki. Kiba no comprendía a qué se refería exactamente, además estaba en shock por que ella lo estuviera abrazando. Kiba titubeo para rodear su cintura con sus brazos, pero lo hizo. Su cuerpo era cálido y su tacto era muy suave. Su olor era parecido al de las margaritas y el romero. Las puntas de su cabello alcanzaban a cosquillear sus dedos.

—¿Qué sucedió?—. Le preguntó el chico a Mahara en una voz calmada.

—No lo sé, solo sé que Yuki me salvó de Sasuke y su jutsu...—.

—¡¿Sasuke te hizo esto?!—. Interrumpió preguntando mientras se levantaba de su asiento enfurecido.
—¡Cuando lo atacaste fue un malentendido! ¡¿Por que tiene que ser un completo idiota?!—.

—Es mi culpa...—. Susurro Mahara.
—Es mi culpa que Yuki esté así—. Volvió a susurrar Mahara mientras observaba su regazo y sentía como las lágrimas estaban a punto de rodar por sus mejillas.
—No debí involucrarla en una pelea en donde iba a salir perdiendo. La verdad, no se ni siquiera se como no estoy lastimada—. Afirmó Mahara mientras se tocaba el rostro. Kiba comprendía ese sentimiento, lo había vivido cuando Naruto había hecho que se confundiera e hiciera que golpeara a Akamaru en los exámenes Chunin. Nunca se había sentido tan miserable y culpable en su vida.

—Kakashi me dijo que hiciste un jutsu de viento—. Dijo Kiba mientras se volvía a sentar en el banquito para cambiar el tema de conversación. Mahara negó con la cabeza con una mirada de confusión en su rostro.

—No se hacer jutsus de sustitución, ¿como voy a poder hacer un jutsu de viento?—. Se preguntó Mahara.

—Además, me desmayé cuando pensé que Sasuke me quemaría el rostro—. Confesó la peliblanca.

—Eso es raro—. Dijo Kiba.
—Pero aún así, voy a matar a Sasuke por lo que les hizo—. Declaró Kiba mientras sacaba sus garras. Mahara le sonrío ante lo preocupado que estaba su amigo.

—Eres muy lindo, pero Sasuke ya hirió a Yuki, no quiero que te hieran a ti y a Akamaru también—. Dijo Mahara mientras se acomodaba el cabello sobre su hombro.

—Estaré bien, ¡soy muy fuerte!—. Exclamó Kiba pavoneándose. Mahara se rió.

—Estoy segura de eso—.

Yuki ya había sido operada de su ojo. Lamentablemente, Hana no pudo salvar su ojo pero ya había detenido el sangrado y evitar que la ceguera de su ojo derecho se expandiera al izquierdo. Kakashi le consiguió un parche como el de Kuromaru, el compañero de Tsume Inuzuka. Akamaru se encontraba acostado a su lado.

—Necesita descansar, no se preocupen si duerme por el resto del día—. Le dijo Hana a Kakashi mientras lavaba sus instrumentos quirúrgicos.

—Muchas gracias, Hana—. Le dijo Kakashi mientras le daba un billete. Hana se lo rechazó amablemente.