{21}DIA 5

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Esa mañana no pude dormir...el dolor de la apuñalada que se impregno en mi cuerpo era insoportable obviamente, pero eso no podía importarme menos, me lo había buscado por jugar 2 contra 1, en realidad algo más me impedía conciliar mi descanso... tenía muchas cosas en mi mente... muchas dudas ignoradas y un gran arrepentimiento...

Sali de una gran puerta de corteza y camine como un descerebrado por la falsa guarida que habíamos creado... había, mesas, sillas y comida, casi como un restaurante al aire libre... incluso si todas las cosas eran recién hechas, la soledad impregnada en el escenario lo dejaba como un campamento abandonado no hace mucho, porque lo era.

Después de muchos años recorriendo ese bosque en misiones conocía a la perfección muchas cosas, donde se consigue comida, en qué lugar aparecen más monstruos que animales, lugares seguros y los lugares donde paso una masacre... en especial esos últimos nunca salían de mi cabeza.

Había pasado mucho tiempo y esa guarida era un desastre, lo único que hice fue remodelar todo y encargarme de unos cadáveres, fuera de eso era un buen lugar, tenia incluso una muralla hecha de troncos viejos pero confiables, pero más importante tenía una cueva.

Todo ese campamento estaba enfrente de una cueva, más bien los lugares de cocinar estaban fuera para no acabar con el aire porque en vez de tener casas o campamentos ese lugar era más parecido a una mina hecha un hogar, con muchas habitaciones en el interior...

Ese bosque tenía muchos sistemas subterráneos que dudo que un humano los descubra todos algún dia, así que eran muy comunes cuevas grandes y alargadas, perfectas para bases... como la base de los kobolds...

Desde ese lugar podía ver la madriguera de los doom al lado del rio, estábamos lejos de una zona segura pero si queríamos atraer rápidamente a los kobolds era obvio que no podía ser seguro, por eso use ese lugar... de su lado del rio, muy cerca de ellos...

Sin embargo no sentí la presencia de nadie en las cercanías, ni kobold, ni monstruo, parecía que era un lugar seguro aunque realmente no lo fuera.

El silencio antinatural era muy extraño en ese bosque... era una calma que sabia muy bien que esa misma noche no existiría, e incluso así seguí caminando lentamente por ese lugar.

Estaba en un estado despistado, estaba cansado aunque no quería dormir... agotado por alguna razón, con los ojos abiertos pero sin ver, respirando pero no viviendo.

Mi estado de trance fue largo... no recuerdo exactamente que me tenia tan aturdido pero cuando desperté fue por el grito moribundo de una bestia.

Recuperé la conciencia viendo como mi daga le quitaba la vida a una bestia inocente... más bien desperté completamente al ver que estaba rodeado de múltiples cadáveres... llevaba mucho tiempo matando, el suficiente para crear una pequeña montaña de cuerpos, animales, bestias y otras criaturas que no reconocía, todas estaban muertas cuando desperté.

"ahhhh... esto..." miré mis manos cansaras, no sentí terror al ver la sangre o la masacre, todo lo contrario solo estaba preocupado de ver si mis heridas se hubieran abierto... estaba siendo muy egoísta "ya puedes salir... podemos hablar"

"¿ya se te salió el diablo?" escuche la voz del gato en unos arbustos lejanos.

"si... ya me calmé" dije recostándome en el suelo, no sabía cuánto me había esforzado pero estaba exhausto incluso con mi resistencia inhumana.

"¿qué te sucede?, te volviste loco y... matabas sin razón" dijo el gato preocupado "tu no cazas así... tu eres más inteligente que yo"

Me quede callado por un momento, no sabia como explicarle un tema tan complejo a alguien tan pequeño y puro...

Mire enfrente mío, mi descontrol por casualidad nos había llevado a un pequeño risco, estábamos a una buena altura para ver gran parte del bosque y observar la salida del sol en su gran gloria ... esa vista me dio calma.

El exiliado del grupo !SE ARREPIENTE DE TODO¡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora