Capitulo 20

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—Vamos despierta, Keicy despierta de una vez —escuchaba esa voz tan familiar a la distancia no sabía de quién era pero se escuchaba agitada y un poco nerviosa —¡vamos keicy despierta ya! —El sedante seguía en mi sistema sentía todo mi cuerpo pesado y entumecido —keicy abre los ojos de una vez —ya la voz no era lejana ahora estaba frente a mí.

Sentí como me tomaban por los brazos y por un leve segundo me tensé por el dolor pero enseguida mi cuerpo se volvió a relajar, un ligero toque en mi mejilla me hizo abrir los ojos o por lo menos hacer el intento.

Mis párpados pesaban y las imágenes eran borrosas frente a mí encontré una forma difusa que me miraba directo a los ojos, parpadeo varias veces y la figura comienza a ser más nítida, lo que veo me sorprende.

Una chica de estatura promedio con largo cabello negro, con unos ojos marrones y unas ligeras manchas de color marrón oscuro que cubren sus mejillas de un color moreno claro casi se le podía considerar blanca. Pero esto no podía ser posible, el sedante tenía que estar afectando mi cabeza porque la chica frente a mí con expresión preocupada era idéntica a mi.

—Keicy tenemos que irnos —Hasta su voz era igual a la mía —keicy se que no entiendes nada pero tenemos que salir de aquí —dijo ella para empezar a desatar mis pies y seguir  con mis manos.

Una vez desató todo mi cuerpo me agarró por la cintura pasando mi brazo izquierdo por sus hombros y comenzó a caminar, trate de avanzar, pero al tratar de dar un paso ella me sostenía con fuerza para que no cayera.

—¡vamos keicy! concéntrate te tienes que curar, tu puedes sacar eso de tu sistema —Ella tenía razón pero el verdadero problema era concentrarme, no podía mi cabeza estaba confundida —sólo te puedo guiar, pero tu te tienes que curar sola y tienes que hacerlo rápido —sólo pude mover la cabeza para asentir y así supiera que la había escuchado —recuerda la calma que te invade cuando estás con tus amigos esa paz que se expande por todo tu cuerpo, luego piensa en el proceso que necesita tu cuerpo para sanar, para eliminar todo de tu sistema. —Hice lo que me dijo y Estaba funcionando.

Pensaba en mis amigos y en esos momentos que habíamos pasado, recordaba la clases de biología donde hablaban de cómo el cuerpo elimina un sedante y con cada paso que dábamos me sentía mejor, me sentía yo misma otra vez, ya cuando íbamos por la mitad del cuarto ya podía caminar sola así que empezamos a correr hacia la puerta, la habitación era más grande de lo que pensaba.

—¿Quién eres? —pregunte sin poder contener más la duda.

—eso ya lo sabes, soy tu, pero la que habita en este mundo y se mantiene en tus aposentos en el palacio cuando estas despierta. Soy tu contraparte.

—Eso quiere decir ¿que tú despiertas cuando yo duermo y es tu cuerpo el que uso cuando estoy aquí? —vi como me sonreía y todavía no lograba aceptar que estaba viendo mi propio rostro.

—si, así es.

Llegamos a la puerta y la vi abrirla para mi, no tenia ningun tipo de seguro. El estaba tan seguro de que no iba a escapar.

—¿Pero ahorita estamos lado a lado?

—Porque no entraste por el método común, entraste como viajera con todo y tu cuerpo físico así que tenemos que cuidarte mucho —después de decir eso me agarró por la mano y empezamos a correr por un lago pasillos que a mitad del lado derecho se abría otro igual.

Después de que pasamos de largo por el pasillo sentí un calor muy pesado que me hizo detenerme de golpe

—¿qué pasa? Tenemos que irnos porque los planes que él tiene para ti no son buenos —la escuchaba pero no podía respirar y solo pensaba en lo que él me dijo antes de sedarme. —Tus seres queridos como tú los llamas dependen de ti, de como te comportes, de que tanto nos obedezcas y cumplas los que te pedimos, cuando despiertes esperamos que te comportes y podamos hablar de lo que viene.

EL MUNDO DE MIS SUEÑOS Donde viven las historias. Descúbrelo ahora