Capítulo 3: Tercera Nota.

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Se estaba saliendo de control.

El siempre correcto, serio, y puntual Xiao había dejado lista la tercera nota el día anterior, la había pensado casi toda la tarde, se había matado buscando las palabras correctas; para al final dejarla olvidada sobre el escritor de su habitación.

El nunca olvidaba las cosas, pero desde que empezó a escribir las notas, su vida se estaba desordenando completamente (para Xiao, llegar tarde un día y olvidársele una nota era un caos).

Ya se encontraba en la universidad. Podía dejar pasar el día y entregar la nota mañana, pero no, él quería entregarle una nota cada día sin falta.

Caminaba junto a sus amigos por los pasillos del lugar. Todos centrados en una amena conversación, excepto por él, pues aún seguía pensando en qué podía hacer. A su lado estaba su mejor amiga: Hu Tao, una joven de piel tan blanca como una porcelana, con un abundante cabello de color castaño recogido en dos coletas altas bastante largas, ojos de un particular rojo combinado con un amarillo claro y vestia un enorme suéter de algodón rojo, quien se encontraba atragantada comiendo una manzana. Xiao, sin darse cuenta, se le quedó viendo por un largo momento.

– ¿Qué me ves? Que yo ya tengo pareja eh – comentó Hu Tao, pero fue ignorada por el de ojos ámbar, a quien una nueva idea le apareció en su mente.

– ¿tienes más manzanas? –


~~~


En otro lado de esa misma universidad. Venti se encontraba en clase junto a Aether, este último estaba distraído hablando con su pareja por el celular. Ellos dos son los más aplicados de su grupo de amigos, pero esa clase en particular los aburría un poco. Mientras su amigo trataba de disimular las sonrisas que le producía su pareja, el de trenzas pensaba en quien podría ser la persona de las notas.

No había recibido una ese día, pero tampoco esperaba que le enviaran una nota a diario. Por más que trataba de pensar en alguien en concreto, no tenía muchas pistas de quien podría ser. Pues las notas no decían mucho en realidad, y las personas que hasta ahora le habían entregado los regalos se reusaban a decir algo.

De pronto, fue interrumpido de sus pensamientos cuando el profesor de la clase hizo que todos los alumnos se levantaran de sus asientos y se acercaran a una esquina del salón. Venti lo pensó por un momento; él, junto a su amigo, se encontraban sentados al lado de una ventana abierta que daba a uno de los pasillos abiertos de la universidad. Pero sin más opciones que obedecer, se dirigieron a dicho lugar.

Se trataba de una muestra y una breve explicación de algunos instrumentos utilizados en la antigüedad; genial, era algo que se podría haber explicado desde la comodidad de sus asientos y no con toda la clase arrinconada en un mismo lugar, pensó Venti.

Con una cara de disgusto, ambos volvieron a sus lugares. Pero la sorpresa invadió a los dos jóvenes al ver el asiento del pelinegro. Justo encima de la mesa, había una pequeña bolsa junto a una nota. Rápidamente ambos muchachos vieron a través de la venta, pero solo lograron vislumbran una cabellera purpura perdiéndose en los pasillos.

– bueno Ven, parece que tu enamorado a aparecido de nuevo – comentó el rubio.

El de trenzas no respondió. Solo se acercó a su lugar y tomó la bolsa, en ella había una manzana.

– uhh pero parece que tu enamorado es algún tipo de Stalker, ¿Cómo sabe que te gustan las manzanas? – preguntaba nuevamente el rubio al notar el contenido de la bolsa.

– parece que nos conocemos, o al menos eso dice la nota –

– ¡Genial! Tienes una nueva pista, ahora solo debes recordar a quienes les contaste que te gusta esa fruta – Aether tenía razón, según la nota, él y su enamorado/a ya se conocen, pero ¿de quién se trataba?

Por más que se esfuerce en pensar, el de ojos turquesa no podía recordar a quienes le había comentado que le gusta específicamente las manzanas, pues es un dato un poco irrelevante cuando se está conociendo con una persona, según él. Pero al parecer, la persona de las notas no había pasado por alto ese detalle.

Si tan solo lograra recordar en qué momento de su vida había salido el tema de las frutas en alguna conversación y con quién, sería mucho más fácil hacerse una idea de su enamorado/a secreto.

Pues aquella nota, que reposaba en sus manos, era una pista bastante significativa.

"Recuerdo que un día me comentaste que te encantan las manzanas Espero que disfrutes de esta. guapo <3" 

Anónimos || xiaovenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora