♡: CAPÍTULO VIII - CHEEKS

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El tiempo suele pasar muy rápido y en tan solo un parpadear no te das cuenta de cómo las agujas del reloj pasaron tan rápido, y lo que tú sientes como ayer en realidad son algunos meses desde entonces.

Eso había sucedido. Jeongin podía asegurar que a tan solo unos días el primer encuentro con Hyunjin había sucedido, pero la verdad era que ya llevaban más de cinco meses y medio conociéndose. Más de 22 semanas maravillosas sabiendo de la existencia de ese caliente y hermoso alfa, y algún tiempo desde que ambos empezaron a verse con más frecuencia, sin la necesidad de un incendio de por medio.

Luego de compartir sus números de teléfono, finalmente, Hyunjin le pidió que en cada ocasión en la que se sintiese mal o tan solo deseara hablar un rato, podía llamarlo y él vendría a su rescate.

De vez en cuando visitaba a su pelinegro favorito en la estación de bomberos, a la misma hora y con un nuevo postre en cada encuentro. El alfa siempre bromeaba con que a ese paso el bonito castaño lo pondría gordito con tantos deliciosos dulces, pero no se negaba ni una sola vez a que el precioso omega lo alimentara. Ese banco en el parque se convirtió en un fiel participante de sus charlas y un espectador de todas esas miradas y coqueteos discretos que ellos compartían. A veces al menor se le escapaba uno que otro piropo malo que parecía sacado de internet, pero siendo sinceros a Hyunjin le parecían muy adorables y cada una de esas veces respondía con una pequeña risa y le recordaba lo hermoso que era.

Jeongin le había tomado el gustillo a asistir a ese gran edificio, incluso había conocido a ese beta de la otra vez. Kai era un chico muy gracioso y extrovertido, y aunque la mayoría del tiempo le hacía señas raras al azabache cuando estaba con él, señas que no comprendía, era muy divertido hablar con él.

Otro que actuaba un poco raro era Changbin, pues siempre que platicaban del gran avance que estaba teniendo con el alfa una sonrisa traviesa asomaba por sus labios. Cuando preguntaba por qué era, tan solo respondía con un "No es nada"

Ay, que extraña la juventud de hoy en día.

Pero Jeongin no tenía tiempo para ponerse a analizar las conductas y el pensamiento de los adolescentes actuales, no cuando tenía un bombonazo como Hwang hablando con él a diario y llamándolo por apodos tan bonitos que lo hacían sentir como en un sueño.

Varias noches cenaron juntos en el departamento de alguno de los dos. Luego de un arduo día de trabajo y una jornada de estudios cansada, se ponían de acuerdo y allí se encontraban, acurrucándose en el sofá mientras veían películas y comían de la deliciosa comida preparada por el alfa o, cuando la pereza les ganaba, un sabroso servicio rápido de algún restaurante sugerido por esa aplicación en el teléfono del omega. Aunque, en secreto, Jeongin prefería que Hyunjin fuese quien cocinara, pues eso significaba que podía ser su bonito asistente (como alguna vez lo llamó el ajeno), y observar sus brazos marcarse mientras cortaba algunas verduras o encantarse con la imagen que le daba este cada vez que se ponía esa bandana en el cabello para que no le molestara demasiado.

Jeongin juraba que si le llegaban a cortar un solo mechón a Hyunjin él lloraría, porque que hermoso se veía con esos rizos oscuros.

Incluso una que otra ocasión se habían quedado dormidos juntos en el sillón, por lo que al final terminaban quedándose en casa del otro hasta el día siguiente. Cuando esto sucedía, por supuesto Hyunjin se mostraba como todo un caballero y se le ofrecía a dormir en el sofá, para que el castañito tuviese la comodidad de una cama. A esto Jeongin negaba rotundamente, y luego de un rato discutiendo sobre ello, llegaban al acuerdo en que dormirían juntos, pero con una almohada en la mitad.

Ciertamente el mayor no quería que el contrario pensara que deseaba aprovecharse de él, y el menor sentía demasiada vergüenza de estar acostado en el mismo lugar que el alfa que le gustaba, pudiendo sentir más cercano su encantador aroma. Sin embargo, las dos últimas veces, despertaron un poco más juntos de lo normal, y sus manos entrelazadas de forma bonita.

Fireman ❁ HyuninDonde viven las historias. Descúbrelo ahora