CONSUMIDO #Yoonseok

6.

Hoseok

Abro los ojos. El despertador de la mesita de noche dice que son las 9 a.m. Bostezo, froto el sueño de mis ojos y miro de nuevo.

9 a.m.

¡Carajo!

Me siento de golpe en la cama y la sábana se cae exponiéndome al aire fresco. Quito los audífonos que siguen reproduciendo una canción que no logro ubicar por el sueño. Me muevo fuera de la cama tan rápido que juro que mis pies no tocan el suelo. Jackson va a matarme. Desnudo, mientras me pongo mis calzoncillos, ubico mi celular en la cama y reviso mis mensajes. Hay un montón de Jin, un montón de Jimin y un millón y uno de Jackson. Esto es malo. Rápidamente le marco.

- Buenos días, Wang Psicología, soy Jackson.

Retuerzo mis dedos sobre mi cabello para ordenarlo.

- Jackson, hola.

- ¿Hoseok?

- Si, me quedé dormido, lo siento mucho. - vocifero mientras me pongo el pantalón de mezclilla.

- Te di dos días Hoseok. Tenías dos días para despejar la cabeza y volver al trabajo. No pienso...

- Me encontré con Jin anoche y él se metió en mi cabeza - interrumpo. No es del todo una mentira. Sí me encontré con Jin, pero el que se metió en mi cabeza fue Min Yoongi.

- ¿Ustedes dos no habían terminado?

- Por supuesto que sí...

Jackson exhala al teléfono y espero su respuesta mientras me pongo la camisa blanca de manga larga junto a unos accesorios.

- ¿Puedes llegar en treinta minutos?

- Estaré ahí en quince.

Termino de arreglarme y lanzo en mi bolso del gimnasio ropa de ejercicio para ir por la tarde al gimnasio. Con suerte, Yoongi irá en la mañana y no lo veré más tarde.

Huyo de la casa y me zambullo en mi coche. Estoy con tanta prisa que ni siquiera pongo mi cinturón de seguridad y cuando llego al trabajo después de diez minutos mis mejillas están enrojecidas por estacionar más lejos y correr hasta la entrada.

- Hoseok, lo hiciste. -Jackson me sonríe cuando paso por la puerta principal. Se levanta de la recepción y se acomoda su traje azul marino -. ¿Puedo hablar contigo en mi oficina en un momento?

Mierda... tal vez está vez si me despedirá. Lo sigo a su despacho y cierra la puerta detrás de mi, haciendo un gesto para que me siente en el sillón frente a su escritorio. Me siento y me remuevo incómodo con ganas de defenderme y hablar pero decido callar. Se sienta en el borde de la mesa frente a mí. Está tan cerca que casi nuestras rodillas se rozan.

- Relájate, no te voy a despedir. -Casi me hundo de alivio-. Quería saber cómo lo estás haciendo...

- Estoy bien, Jackson. No necesito una terapia gratuita, no te preocupes - contesto sonriente.

- Define qué es "bien" para ti.

- No lo sé... Bien. Feliz. libre.

Cruza los brazos y asiente lentamente.

- ¿Lo suficientemente bien como para ir a cenar conmigo?

Mi sonrisa se desvanece y casi quiero toser del impacto.

- Jackson... ya hemos hablado de esto.

- Lo sé, pero antes tenías un novio.

- Sólo rompí con él hace dos días. -Señalo evitando mencionar algo de Yoongi y su presencia-. Además sigo siendo tu empleado.