Un Traje A Medida

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El Grom estaba cada vez más cerca, a tan solo un par de días. 

Hunter seguía sin poder creer que Willow hubiera aceptado ir con él. Si, sabía que venían saliendo juntos desde hace un par de meses, pero a su pobre corazón aun le costaba creer lo afortunado que era.

Era una ocasión muy especial, era su primer Grom y además el primer evento de esa magnitud al que asistirian como pareja.

Quería que fuera realmente inolvidable para su novia.

No le gustaba presumir, pero había mejorado notablemente en sus habilidades de costura. Había pasado de parches a poder elaborar prendas enteras.

No quería simplemente rentar un traje para la ocasión, también rechazó la oferta de Darius de comprarle uno, ya se sentia demasiado en deuda con él.

Así que se dedicó a buscar la tela perfecta, teniendo en mente a Willow.

Sabía que se vería hermosa con lo que fuera y deseaba que llegara ya el día para poder contemplarla.

Aquel estampado de flores le había parecido adecuado. Pensar en Willow era pensar en flores, así que de alguna manera estaría combinando con ella. 

Puso manos a la obra, a pesar de la insistencia de Darius de comprarle un traje. Iba a hacer eso él mismo. 

Lo hizo y deshizo más veces de las que puede contar. Nunca estaba satisfecho con el resultado final. 

Fue hasta que lo analizó varias veces, hasta que revisó las costuras y no encontró imperfecciones qué supo que lo había terminado. 

Se levantó muy nervioso el día prometido. 

Nunca había sido alguien que pusiera demasiado atención a su aspecto, pero en esa ocasión trató de lucir lo mejor posible, incluso intentó peinar su cabello siempre rebelde. 

Se colocó el saco floreado, el cual le quedaba a la perfección, estaba orgulloso de haberlo hecho con sus propias manos.

Respiro hondo, tomando las flores que había conseguido para Willow y se encaminó a su hogar. 

No deberían de sudarle las manos de esa manera, pero estaba nervioso. 

Cuando Willow por fin abrió la puerta de su hogar, se quedó pasmado al contemplar su belleza. 

Aquel vestido verde le quedaba precioso, su cabello recién cortado más arriba de los hombros estaba coronado por una Diadema qué hacía juego con su vestido. 

Sin duda el verde era su color. 

—Te vez hermosa capitana — por fin Pronunció entregándole las flores. 

Willow le dedicó una sonrisa de mil soles, notando como su mirada vagaba por su saco. 

—Yo… Lo hice yo mismo, pensé que podría ir a juego contigo y las flores fueron la mejor opción, quizá debí preguntarte primero pero… 

—Me encanta —

La chica caminó hacia él, posando sus manos en la solapa de su saco, pasando sus dedos encima de él. 

—Es perfecto Hunter, como tu —

El cerebro del chico dejó de funcionar, le tomó unos segundos recordar donde estaba, su sonrojo extendiéndose hasta las orejas. 

—Me alegra que te guste. 

—¿Bromeas? Amo el estampado, cada vez eres mejor en esto. 

Dejó un breve beso en su mejilla, su sonrisa sin señales de abandonar su rostro pronto. 

La felicidad invadió. Le ofreció su brazo a la chica para que lo tomara. 

Todo su esfuerzo había rendido frutos, no importaba lo que dijeran los demás. 

Willow lo había amado y ese era su cometido. 

Huntlow Flufftober 2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora