BE MY POLAROID -- SUNWOO THE BOYZ // yuyus_girl

05

Estuve en el baño llorando silenciosamente unos 20 minutos.

 Después de un rato, noté que nadie se había percatado de mi ausencia durante mucho tiempo, lo que me puso aún más triste.

Sí, parecía una niña pequeña caprichosa llorando por no conseguir lo que quiere, pero en ese momento era lo que menos me importaba.

Una simple frase había sido capaz de destruir un mundo lleno de fantasías amorosas, una sonrisa de oreja a oreja que se iluminaba cada vez que se veían, un camino de pétalos en un paraíso inimaginable que conducía hacia él...

Un mundo con él. 

Y así, decidí volver a la habitación. Me limpié las lagrimas que aún caían sobre mi rostro con la manga de mi jersey de lana. Me puse en pie  y me convencí de intentar superarlo, que aceptara la derrota, que Younghoon no era mi destino.

Salí de aquel cuarto de baño con la intención de olvidar todo lo que sentía por Younghoon, con la cabeza agachada intentaba aguantarme aquellas lágrimas que todavía insistían en salir.

Hasta que choqué con el pecho de alguien.

Levanté la cabeza y me encontré con los ojos de Sunwoo, llenos de preocupación y algo tristes.

-Uy, perdona Sun, ando un poco distraída-

-Sun, o Sunhee ¿Cómo quieres que te llame? Como tenemos el mismo apodo...-

-Como quieras, no es gran problema para mí.- Dije intentando forzar una sonrisa. Todavía estaba un poco triste.

- ¿Por qué has tardado tanto? Pensaba que te pasaba algo malo, y tuve que ir a buscarte.-

- ¿Los demás han preguntado por mí?-

- Solo yo, les dije que iba a ver cómo estabas.-

- Entonces ellos no se dieron cuenta de que estaba ausente...- Dije cada vez bajando más el tono de voz. Volví a agachar la cabeza.

Sunwoo puso dos dedos en mi barbilla y levantó mi cabeza.
No pude evitar mirarle directamente a los ojos, eran preciosos.

-Sunhee...¿Sabes que ellos te quieren mucho no? Ellos están ocupados haciendo sus gamberradas entre hermanos, es normal que te sientas un poco apartada. Pero aquí estoy yo ¿no?-

Me quedé unos segundos callada, no sabía qué decir. Estaba triste por mi amor imposible, pero la presencia de Sunwoo iba disminuyendo cada vez más mi tristeza.

-Ahora sí ¿Me vas a contar qué es lo que te pasaba y por qué has tardado tanto?-

-No me pasaba nada. Solo estaba hablando con mi madre por teléfono. Pero... Gracias por preocuparte.-

Le enseñé una sonrisa, está vez no fue forzada, a lo que él respondió con el mismo gesto.

-Venga, volvamos a la habitación con Yeri y Hoon.- Dijo todavía con una sonrisa en su rostro.

Puso su mano en mis espalda, y me condujo hasta la habitación de mi mejor amiga.

-¡¡Sun!! ¿Por qué has tardado tanto? Mi hermano no ha dejado de molestarme, y eso es porque tú no estabas aquí.-

-Ven Sunhee, siéntate aquí.- Me dijo Sunwoo,  ignorando el hecho de que mi amiga me estaba hablando.

Me senté en el suelo con Yeri y su hermano, y él se sentó al lado de mí.

Así, continuamos la fiesta de pijamas, jugando a verdad o reto y muchos más.