"Sunwoo...no vengas por favor...Sunwoo, dios santo... ellos te harán daño..." - Me repetía una y otra vez en mi cabeza.- "Debes evitarlos a toda costa... Puedo salir de aquí sin tu ayuda... Tu seguridad es más importante que todas las discusio-" -
- ¿Qué lloriqueas niña? ¿Acaso no dejé claro que tenías que mantener tu boca cerrada?- Me dijo agresivamente aquel hombre, mientras me agarraba de los pelos y me tiraba la cabeza hacia atrás.
No respondí, y tampoco dejé que me viera con una sola lágrima en la cara.
- Eres fuerte eh. A ver cuánto más aguantas.-
Moví la cabeza bruscamente para zafarme de su agarre, pero fue inútil.
Los minutos parecían horas. Tenía miedo, rabia, impotencia, asco y, obviamente, hambre. Cada vez esos sentimientos se hacían mayores y constantes.
Estaba empezando a agotarme. No me quedaba energía ninguna.
Me alegré un poco al ver la posibilidad de que Sunwoo no llegara, de que le hubiera pasado algo por el camino y no entrara por la puerta de este sótano.
Sí, no se puede ser más egoísta.
Al fin y al cabo, no quería que estos seres mugrientos lo tocaran, preferiría que me lo hicieran a mí.Pero, allí se presentó.
Joder.
Las dos grandes puertas del garaje se abrieron de un portazo, dejando ver a un Sunwoo empapado en sudor.
- ¡Sunhee! - Sunwoo fue corriendo en mi dirección, pero los fortachotes enseguida lo rodearon, impidiendo que se acercara a mí.
- ¿Dónde te crees que vas niñito?-
Le dijo uno de los hombres.- Dejadla en paz. No sois conscientes de la gravedad de la situación.-
Los tíos comenzaron a reírse desesperadamente, mientras Sunwoo me miraba con unos ojos que me llamaban a gritos. En ellos veía tristeza y compasión, así como ganas de ir hacia mí y abrazarme lo más fuerte que pudiera.
De repente, apareció aquel hombre, el líder del grupo.
- ¡Silencio!- Se acercó lentamente a Sunwoo con una sonrisa - Mirad a quién tenemos aquí...- Hizo una pausa para mirarlo de arriba a abajo.- Necesitarás algo de entrenamiento, estás debilucho muchacho.
- ¿Quién eres y por qué tienes a Sunhee? Suéltala. No ha hecho nada para merecerse esto.-
-¿Qué no ha hecho nada? Se merece esto y mucho más. La guarra esa me ha destrozado la vida, y por eso, pienso hacer lo mismo con ella.-
-¿Pero de qué estás hablando? ¡No te he hecho absolutamente nada!- Grité desesperadamente.
- Serás hija de puta. Yo mismo me encargaré de hacerte sufrir lo que nunca nadie ha sufrido, asquerosa.-
- Debe de haber una confusión. Ella no tiene nada que ver con vosotr- Dijo Sunwoo hasta que lo interrumpieron.
- ¡Cállate! Te he llamado para que te unas a nosotros, no para que la defiendas.-
- ¿Qué?-
-Ella debe pagar por todo lo que ha hecho. ¿Acaso no recuerdas todo lo que te hizo? Te estoy dando la oportunidad de que te vengues de ella, y que te unas a nosotros. ¿A qué es convincente?-
Sunwoo no daba crédito. Estaba alucinando, y yo también.
-Creo que te estás equivocando de persona. Ella no me ha hecho nada, y mucho menos a tí. ¡No te conocemos hijo de puta!- Respondió Sunwoo.
Al líder del grupo se le cambió la cara. Ahora perecía enfadado.
- Destrozadlo. A ver si aprendre la lección.-
- ¡No! ¡No lo toquéis!- Lloré descontroladamente al saber que podrían matarlo a palos.
Los guardias comenzaron a pegarle por todos lados con palos grandes de madera, mientras que Sunwoo no soltaba ni un grito.
Su cuerpo se debilitó, y ya en el suelo comenzó a escupir sangre por la boca.
No entendí por qué no se estaba defendiendo. Debía resistir.
-¡Sunwoo! ¡Haz algo! Debes estar a salvo, ¡te matarán!- Grité mientras lloraba cada vez más.
Por ello, recibí varias patadas del líder, pero eso no me calló.
- ¡Sunwoo! Dios santo. ¡Kim Sunwooooo! Resiste. ¡Déjenlo en paz! Él no hizo nada. Vengan a por mí.-
Vi como al líder del grupo se le descompuso la cara.
-¡Alto!- Gritó.
Los hombres dejaron de golpear a Sunwoo, lo que me relajó bastante.
-¿Cómo te llamás muchacho?-
-Sunwoo. Kim Sunwoo.- Respondí, ya que él no podía hablara de lo herido que estaba.
"Mierda" lo oí decir al hombre.
Él y su grupito se reunieron para hablar. Me di cuenta que pude romper las cadenas que rodeaban mis sangrientas manos. Debió ser por la fuerza inhumana que hice para intentar correr hacia Sunwoo.
Me levanté se un salto de la cama y fui como una bala hacia él.
Me senté de rodillas y puse su cuerpo sobre estas, mientras sujetaba su cabeza con mi antebrazo. Con la mano que me quedaba libre, acariciaba la suya.
-Dioa mío Sunwoo. No debiste hacer venido. Mira lo que te hicieron.- Dije susurrando con los ojos apunto de soltar mil lágrimas.
Él me miraba fijamente a los ojos, mientras me mostraba una pequeña sonrisa.
-¿Te hicieron algo?- logró decir.
- Estoy bien, no te preocupes. Debemos salir de aquí.-
El hombre con tatuajes y los demás de acercaron a nosotros. Traté de alejarme para que no tocaran más a Sunwoo, pero el grandullón habló primero.
- Nos hemos equivocado de persona. Estábamos buscando a una chica que se llama Sunhee y a su ex novio Mark. No os necesitamos.-
Me alegré muchísimo de que se dieran cuenta de que no éramos nosotros sus objetivos.
-¿Que hacemos ahora con vosotros? ¿Os matamos? ¿Os dejamos ir?-
- Deberían dejarnos marchar. No hemos hecho nada y no nos lo merecemos. Acaban de golpear y secuestrar a gente inocente. Les prometemos que no diremos nada a la policía ni a nadie.-
- ¿Cómo puedo confiar en tí niñata?-
-Solo deben. Les juro que no diré nada. Si lo hago, tienen todo el derecho de matarme - Respondí segura de mí misma.
En ese momento, lo único que quería era salir corriendo de allí.
-Fuera de aquí.- Dijo el hombre.- Recuerda tu deber. Cuidado con lo que haces y dices.-
Levanté a Sunwoo como pude y nos fuimos de allí de inmediato.
Fue la peor experiencia de mi vida.
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BE MY POLAROID -- SUNWOO THE BOYZ // yuyus_girl
Fanfiction✨¿Puedo sacar la Polaroid? Te ves preciosa. Que bonita se ve tu sonrisa en esta fotografía. Prométeme que te quedarás conmigo hasta el final, y yo prometeré hacer de ti la mujer más feliz del mundo.✨ ❤️🩹Una historia en la que dos desconocidos ter...