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Sentí el cuerpo de Mu Qing tensarse y guardar silencio de inmediato al sentir mis lágrimas. Ni siquiera yo podía descifrar el motivo. Simplemente eran aquellas veces en las que sólo quieres llorar, mandar a la mierda todo y seguir llorando por horas hasta que sientas tu cuerpo débil y relajado.

- ¿Qué rayos pasa contigo, Feng Xin? Me traes con mentiras hasta aquí, me abrazas y luego lloras. ¿Acaso morirás y esta es una despedida? -

No tenía ganas de responderle, pero soy consciente de lo mucho que Mu Qing odia ser ignorado. Me animé a responderle para evitar que su enojo aumente.

- No es nada. No es nada. Sólo recordé algo - No pude encontrar una mentira más creíble. Aún me mantenía refugiado en el calor que emanaba Mu Qing y en lo suavidad que lo caracterizaba - ¿Puedes no moverte? Sólo unos minutos, por favor - Enrollé mis brazos alrededor de su cintura, formando un abrazo. Mu Qing obedeció luego de chasquear la lengua con indiferencia.

Apreté la camisa de Mu Qing entre mis dedos para desahogar un poco mis emociones que ahora estaban más revueltas que antes. Me generaban dolor de cabeza.

No recordaba si en algún momento de nuestra vida como mortal, pude haber experimentado este tipo de sentimientos por Mu Qing. Con la que en su momento fue la única persona que llegué a amar e incluso a casi tener un hijo, jamás me hizo sentir tan confundido sobre mis sentimientos por ella. Mu Qing revolvía cada parte de mí. Siempre habría un efecto negativo o positivo en mí por algo que él hiciera, pero no era consciente de lo que sus acciones causaban en mí. Me sentía demasiado confundido y no tenía ni la más remota idea de por dónde empezar a pensar. Lo único que tenía claro era que, la situación actual no me resultaba desagradable, de hecho, siendo todo lo contrario. Quería quedarme así por siempre, sólo dependiendo de Mu Qing y que él sólo piense y busque refugio en mí.

No sé qué pasó por la mente de Mu Qing, pero aceptó el abrazo e incluso intentó consolarme vagamente acariciando mi cabello. - No sé qué mierda te pasa, pero algo que sé, es que tú no lloras muy seguido. De hecho, creo que nunca te he visto llorar -

Pensé rápidamente en una posible mentira para aliviar la situación. No podría simplemente decirle el lío mental en el que mis propios sentimientos por él me condujeron. No quisiera que él se alejara más de mí a causa de estos tontos sentimientos.

Lo único que se me ocurrió decir fue algo un poco creíble. - Recordé a mis padres. Me entristece recordarlos y tener ese pensamiento constante de que jamás volverán. A veces sólo quisiera regresar a ese tiempo y apreciarlos como debían -

Aunque él no fuera consciente del secreto camuflado bajo mis palabras, me sentí avergonzado al tan sólo pensarlo. Pues lo que realmente había querido decir con esas palabras no era de lo mucho que extrañaba a mis padres, si no de lo mucho que extrañaba al Mu Qing de esa época y nuestra extraña relación de odio. Disfrutaba aquél entonces, en donde gozábamos de la tranquilidad y prosperidad del reinado de XianLe. También quería decir lo tanto que extrañaba nuestra amistad con el príncipe heredero y que si tuviera la oportunidad de volver al pasado, apreciaría aquellos recuerdos tal como se merecían.

Mu Qing se tragó el cuento sin pensarlo más. Sentí como inhaló y exhaló aire fuertemente, como si la situación lo frustrara o no sabía que decir. Después de un par de respiraciones más, habló en un tono más tranquilo del que suele usar muy seguido - Entiendo lo que quieres decir, pero aún tienes mucho tiempo para tratar de superarlo. No creas que sólo soy un engreído sin sentimientos. Yo también extraño a mi madre y a los niños, pero entendí que son parte de mi pasado y no puedo volver a tenerlos. Sólo me queda mirar el pasado y apreciarlo desde el presente. Deberías intentarlo y dejar de llorar por eso, debilucho -

Las últimas palabras "alentadoras" tam dignas de Mu Qing, hicieron que empezara a reírme. Me separé de él sólo para mirarlo a los ojos y devolverle el ataque. - ¿A quién llamas "debilucho" idiota? -

Y así empezamos a discutir, como siempre.

[...]

Después de una no tan larga discusión con Mu Qing en el salón, regresamos nuevamente en dónde había encontrado a Mu Qing, encontrándonos LAMENTABLEMENTE nuevamente con con Linghua, que aún esperaba sentada junto al árbol revisando su celular.

Cuando nos vio, bueno, qué digo "nos vio", sí literalmente sus ojos no se despegaron de Mu Qing y sólo se percató de mi existencia porque estornudé repentinamente. Ella sonrió al ver a Mu Qing, y no la juzgo, porque yo también reaccionaría igual si viera a Mu Qing luciendo increíblemente encantador bajo la luz natural del sol, con la ropa que parecía haber sido confeccionada únicamente para él y con ese cabello tan perfecto meciéndose ligeramente por su caminar silencioso. El maldito se veía perfecto y pulcro. Hasta yo me sonrojaría si no fuera porque estoy acostumbrado y familiarizado con este hombre.

(N/A: como dato curioso por si no lo sabían, los pasos de Mu Qing al caminar no se escuchan, hasta parece que el pendejito flota porque tampoco tiene mucho movimiento al caminar. Me di a entender? 😞)

Vi como Mu Qing le sonreía de vuelta, lo que inevitablemente me enfureció nuevamente. Tenía tantas ganas de darle un puñetazo y haber si por milagro la inteligencia regresaba a él y se daba cuenta de la tontería que cometió al enredarse sentimentalmente con la mortal común y corriente que tenía frente a él.

Desde que lo conozco, Mu Qing nunca mostró interés romántico en ninguna de las jóvenes encantadoras de el antiguo reino de XianLe, encontrando hasta el más mínimo error en ellas y descartandolas por completo. Pensé que sería así por toda su vida y que algo andaba mal con él, porque ninguna de las chicas que se le cruzaron eran estéticamente feas y no habían errores en sus comportamientos. Hasta ahora, que consiguió la más simple y fea de todas.

Aquellas chicas que fueron rechazadas cruelmente por Mu Qing, debían estar retorciéndose en sus tumbas.



























Yo ni tendría oportunidad con ese cabrón. Él tan papucho y yo tan culero. Pero así es la vida 😔🥀⛓️ (SE HACÍA EMO AISKAKDK)

si están leyendo esto de noche...

Descansen en paz 🕊️

El Renacimiento |Tian Guan Ci Fu|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora