CAPÍTULO 2

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Aquel día había terminado en un verdadero caos, caos que TaeHyung no había provocado pero del cual si había salido afectado, pues sin razón alguna la furia de JungKook había sido dirigida hacía él como si éste no hubiera sido una víctima más de tremenda noticia.

Cuando JungKook había logrado calmarse, ambas familias habían aclarado la situación del ¿que?, los había llevado a tomar dicha decisión aún sin consultarles nada y bueno, eran buenas y fuertes razones pero al menos debían haberles preguntado su opinión.

Según los mayores, sus conglomerados se encontraban bajo amenaza ante la nueva ley impuesta por el gobierno, una que afectaría de forma fuerte a pequeñas pero principalmente a grandes empresas como las suyas y que quizás las llevaría a grandes devaluaciones en sus acciones, cosa que amenazaba en gran medida sus patrimonios. Los informes decían que nada bueno venía hacía ellos con dicha ley y debido a ello, la acción precipitada de casarlos había sido tomada pues según los cálculos, la unión de ambas empresas reduciría el impacto de la ley pues al unir dichos conglomerados, éstos serían tomados como uno solo y el efecto sería menos pesado. Como tal ninguna de las familias tenía certeza de si su estrategia funcionaría como esperaban, sin embargo no planeaban esperar a la implementacion de dicha ley para averiguarlo.

Si bien, TaeHyung había quedado sorpendido y confundido, la reacción de JungKook había sido la más difícil de tratar, el jóven estaba en gran negación y alegaba cada segundo que antes de tomar decisiones sobre sus vidas, al menos debían consultarles y tenía razón pues los mayores se la habían dado, pero también ellos tenían sus razones, razones que JungKook no quería ver pesé a lo obvias que eran.

Aquel día había terminado realmente desastroso al igual que el siguiente, y el siguiente, y el siguiente, y el que le seguía, así fue al menos una semana hasta que la nueva reunión había llevado a ambos jóvenes a aceptar, sobre todo a JungKook quien se vio tentado ante la propuesta de ambas familias.

- Pueden seguir sus vidas fuera de las cámaras, pero frente a ellas y frente a algunas personas deberan actuar como matrimonio, no necesitan serlo realmente.
- Osea que no debo besar al enano, ni vivir ni dormi con él - señaló JungKook con claro fastidió hacía el pobre doncel que se cohibia ante el desprecio en el tono de su voz.
- Mmm, no le llames así y sí, solo de vez en cuando deberán tener "citas" y aparentar, pero no es necesario las muestras de afecto y menos que fuera de cámaras vivan y duerman juntos, será cada quien por su lado, ¿ok?

Y aquello llevó a que el idiota Jeon JungKook aceptará, todo siendo por el bien de su familia.
Y Tae, bueno, Tae tenía mucho que perder pero no le dejaban opción, aunque que más daba, ya estaba acostumbrado a sentir amor por una persona que no le correspondía y que encima de todo parecía odiarlo. Nada podía empeorar, era por el bien de su familia después de todo...

Era así como meses después un anillo de compromiso había sido colocado en su deso anular, aquel show que dieron en un salón con algunos invitados le había dado ilusiones a un pobre castañito de piel canela, ilusiones que se vieron rotas al ver al chico que le gustaba, huir con su castañita de piel palida y ojos claros, huir entre besos, motes cariñosos y miradas traviesas.
Si, esa era su realidad, aquella chica era el verdadero ser especial para JungKook, la única que recibiría besos, caricias, sentimientos pero sobre todo el corazón de Jeon.

Pero nada podía empeorar...

Entonces llegó el día de la boda, el salón estaba lleno de invitados y algunos periodistas, TaeHyung se sentía ansioso, debía recordarse cada 5 segundos que todo era falso aunque las cosas le dieran paso a su ilusionado corazón. El lugar y aspecto eran perfectos, casi justo como un día soñó que sería el lugar de su boda. Los invitados eran más de los que un día imaginó, al menos estaban sus personas más cercanas y especiales, ahí estaba YoonGi y aunque NamJoon no estuvo, el regalo de bodas era suficiente. Mientras tanto, el novio, Dios, el novio era justo a quien un día soñó, solo que esté no reflejaba amor o apreció por él, se supone que aún no comenzaba la ceremonia pero él ya había visto a JungKook y quedo boquiabierto, se veía igual a un príncipe de cuentos, era perfecto, aunque no para él.

Antes de iniciar la ceremonia, TaeHyung se miró miles de veces frente al espejo, tratando de encontrar un imperfecto en si, pero todo lo era, eso pensaba.
Casi al salir, YoonGi se adentro en su habitación y le miró embelesado, como le gustaría mirarse atraves de los ojos de su amigo.

- Dios, te ves bellísimo, darling si me dieras una oportunidad yo te haría feliz - Tae sonrió ante las palabras de su amigo.
- Vamos Min, no exageres, me veo tan simple, me veo patético, en serio a veces creó que él tiene razón, soy pequeño, delgado, aburrido y sin gracias - bufó haciéndo a YoonGi fruncir el ceño.
- Ey, no - YoonGi se colocó de pie y se sentó a un lado de Tae para tomarlo de los hombros y hacerlo mirarlo. - No digas eso, hay todo tipo de personas en el mundo y tu encajas perfectamente con el gusto de alguien, solo debés ser paciente y esperar a que esa persona aparezca, no debés sentirte patético por tu apariencia, no hay nada que debas envidiar, eres perfecto, éste eres tu y todas esas descripciones que has son solo la distorsión de tu mentecita, no eres nada de eso, tienes de todo lo que te hace especial y diferente, te saca de la caja de la gente común y eso es maravilloso, porque no necesitas ser igual que los demás para ser genial, necesitas ser tu mismo para poder brillar por encima de todos, ¿me entiendes? Así que no vuelvas a decir que aquel imbécil tiene razón. Quierase corazón, tienes tanto que amar de ti - finalizó notando al fin el brillo sobre los ojitos de su mejor amigo quien no tardó en abrazarlo con fuerza y tallar su rostro sobre su pecho.
- ¿Porqué eres tan lindo conmigo? - pregunto con un nudo en la garganta. - No sabés cuanto me gustaría verme con los ojos con los que tu me ves.
- Bueno, te debo ayudar para que logres hacerlo - sonrió apretando más a su amigo.
- Bueno ya, Min, me quedo sin aire - dijo divertido pidiendo respirar. Min era pequeño pero de algún modo tenía mucha fuerza.

Segundos después de aquel emotivo momento, la puerta fue tocada y la voz de su madre avisándole que debería salir ya, se dejó oír. Entonces aspiró con fuerza y mirándose una última vez en el espejo, salió.

La realidad era que TaeHyung enserio parecía un ángel, algo no humano, algo lejano de este planeta pues la apariencia que tenía en ese justo momento era y parecía tan efímera y delicada, YoonGi no mentía, se veía precioso con aquel traje blanco entallado a medida, dicho traje se ajustaba a él como una segunda piel que marcaba su bien definida forma curvilínea; caderas anchas, cintura estrecha, grandes y voluptuosos glúteos que harían desfallecer a cualquiera, cualquiera menos al que quería.

Cuando bajo las escaleras hacía la entrada del gran salón, las pocas personas que transitaban, habían detenido su paso para admirar al ángel que bajaba con delicadeza; aquel maquillaje le daba el aspecto inocente y risueño.

Entonces la música comenzó a sonar y con un último mensaje de ánimo, las puertas se abrieron y el público calló ante la llegada del novio, el más bello que habían visto.

TaeHyung elevó el rostro y cruzó miradas con aquel chico que por segundos se mostró embelesado y sorprendido por la aparición de aquel ángel, pero todo volvió a la normalidad una vez pasada la sorpresa.

Y cuando estuvo frente al altar y JungKook parecío mirar en él al ser más especial del universo, se odio por querer que todo fuera real y que tras de él, JungKook no estuviera viendo a la chica a la cual realmente quería decirle todas aquellas palabras que eran parte del juramento.

Entonces la parte del besó fue la peor, JungKook jamás lo besó pesé a tener que hacerlo para las cámaras que estaban ahí, el "beso" fue dado en su mejilla, y Tae nunca supo como aquello pareció uno real para todos, incluso para él.
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2023/11/Sep.

Estamos a pocas horitas de celebrar el cumpleaños de nuestro Líder RM y Diso, no puedo creer que ya son 29 añotes, el tiempo pasa rápido, los comence a stanear cuando Nam tenía 20 añitos. No puedo, neta no puedo. Vayan a hacer stream de los trabajos de él, es de los que menos apoyo recibe. Denle amor que no sabemos cuanto más estarán con ARMY. VALOREMOSLOS.

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