Simon estaba observando el teatro, hasta que de repente escucha cómo algo se cerró, girando su mirada hacia la derecha, viendo cómo una jaula había aparecido en la zona donde estaban las gradas del público.
Al mismo tiempo que mira hacia el frente, viendo cómo unas marionetas estaban cayendo del techo del escenario, las cuales cuando tocan el suelo, se lanzan donde estaba el Belmont rápidamente.
Pero Simon esquiva el ataque antes de que la misma le impacte, procediendo luego a tomar su látigo para moverlo donde estaban sus enemigos partiéndose en pedazos.
Hasta que de repente, sube su mirada viendo en una trampilla cómo estaba corriendo rápidamente una sombra encima de la misma confundiéndolo.
Hasta que detrás de él, aparece una marioneta con un cuchillo a punto de apuñalarlo, hasta que el fantasma azul cubre su cuerpo, deteniendo con una mano el ataque de la marioneta.
Simon le da un golpe con una de sus manos por detrás rompiéndo su cabeza.
Escuchando luego un sonido, provocando que gire su cabeza en aquel momento a la derecha, observando cómo la jaula se había abierto y cómo estaba una figura en el lugar.
Hasta que la misma sale corriendo rápidamente.
Simon: ¡Espera! -Dijo, pero ya era tarde. La figura se había ido a una rápida velocidad, pero sólo notó la presencia de dos fantasmas de diferentes colores acompañándolo.
Pero giró su mirada a la izquierda, observando cómo se encontraba la criatura fantasmal, mientras que Simon señalaba la zona donde la figura se fue.
-¿Quién me ha ayudado a escapar? -La criatura no hace ningún movimiento por las palabras de Simon. -¿Lo conoces? -La criatura no dice nada, provocando que Simon diga enojado viendo que no tenía respuestas? -¡Mierda! ¡Ya estoy harto de tu silencio! -Él se mueve donde estaba la criatura y dice acercando una de sus manos donde se encontraba Murasame. -¡Muéstramelo! -Él se quita con su otra mano donde estaba el espejo colgando y dice mostrándole a la criatura. -¡Aquí! ¡Ahora! -La criatura no hace ningún movimiento mientras que sigue observando a Simon quien dice con fastidio por la situación. -¡Criatura estúpida! -Dijo apunto de lanzar al suelo el espejo, hasta que de repente su brazo es detenido por el de la criatura, dejándolo sorprendido
Pero la criatura solo niega con la cabeza, en señal de que no se atreva a hacerlo. Simon sólo da un suspiro y aleja su mano de Murasame intentando calmarse.
-Está bien, está bien. Dime al menos dónde debo ir ahora. -La criatura sólo desaparece en aquel momento, hasta que de repente una gran luz estaba detrás de Simon, quien gira su cabeza hacia esa ubicación.
Viendo la salida del teatro por la zona de las gradas moviéndose a esa dirección.
Varios minutos después...
Se podía ver cómo en uno de los muchos pasillos de la zona del teatro se encontraban muchas marionetas partidas en pedazos, mientras que más adelante, Simon estaba golpeando con su látigo más marionetas que lo atacaban.
Hasta que Simon da una fuerte patada a una marioneta de un tamaño similar a un humano, provocando que salga volando hacia una puerta, la cual por el impacto se termina rompiendo y cae al suelo al otro lado.
Simon la remata al pisar la cabeza de la misma en aquel momento, viendo cómo estaba en una zona elegante del castillo. Hasta que de repente, del techo aparecen unos Licántropos que rugen donde estaba el enemigo de su señor.
Quien rápidamente saca la espada de su abuela, procediendo a correr donde estaban sus enemigos quienes también estaban haciendo lo mismo.
Hasta que se escucharon sonidos de carne siendo cortada por metal, revelándose luego cómo las cabezas de los Licántropos caen al suelo cortadas, mientras que Simon sólo limpia su espada de la sangre de sus enemigos con una sacudida.
Continuando luego su camino hacia delante, observando todo el lugar, pensando en cómo el castillo del rey de las criaturas de la noche pueda parecer algo tan bien conservado logrado por los humanos.
Hasta que nota cómo estaba la criatura volando, señalando una zona por donde tenía que subir, procediendo Simon a correr hacia ese lugar.
Dando un salto encima de un pedazo de monumento de piedra derrumbado, procediendo a lanzar su látigo hacia una esquina, quedando el mismo clavado alrededor de una mesa en el segundo piso.
Empezando a subir la pared hacia la ubicación donde estaba su látigo poco a poco, y cuando llega al final sólo procede a hacer que su arma suelte la zona donde impactó, dejando la mesa rota en aquel instante.
Pero el solo mira al frente, viendo una ubicación donde estaba iluminando la luz de la luna, caminando Simon hacia esa ubicación poco a poco hasta llegar a la misma.
Observando cómo estaba la cruz de combate que alguna vez le perteneció a su padre en una mesa. Pero cuando se acerca de a poco, la luz de la luna ilumina al lado suyo una de sus manos de repente...
Las armaduras que alguna vez les pertenecieron a Gabriel y a Trevor, hace ya muchas décadas atrás.
Pero Simon sólo estaba observando en sus manos el arma de su padre, teniendo muchos recuerdos sobre él antes de que muriera a manos de Drácula.
Pero de repente, nota cómo el arma ya no estaba en sus manos, escuchando luego una risa girando su mirada hacia atrás.
Viendo una criatura que estaba volando, un Nigromante, quien dice en aquel momento.
Nigromante: Mi amo Zobek desea esta arma. -Simon sólo estaba viendo a la criatura. -¡Tu padre no era digno de llevarla! -Simon sólo pone una mirada enojado viendo cómo esa criatura tenía en sus sucias manos la cruz de combate de su padre. -¡Y tú tampoco! -Dijo lanzando una luz rápidamente, causando que Trevor saliera volando rápidamente atravesando el cristal y cayendo a la zona del patio.
Y cuando Simon impacta en el suelo, sólo se queja un poco del dolor del impacto hasta que se para de repente.
Observando a su nuevo enemigo que estaba al frente de él, usando un bastón con forma de luna apuntando donde estaba Simon, quien sólo saca su látigo preparado para su batalla.
ESTÁS LEYENDO
Castlevania Ga Kill Tierra 17. (Terminada.)
FanfictionMuchos afirman que vivir para siempre es algo genial. Pero cuando has vivido siglos enteros sin la posibilidad de morir, y sabiendo todo lo que tuvo que ocurrir para obtener esa maldición, es lo contrario. Es sabido que el destino se deleita con el...