Descubriendo maravillas del universo

Una escapada a las estrellas

La bocina sonó fuerte desde el exterior, era la señal de que su mejor amigo ya habia llegado por él. Rápidamente Jisung tomó sus cosas: una mochila y un bolsito térmico, el cual habia llenado con bebidas calientes y comida. Salió de casa sin hacer mucho ruido, no quería despertar a nadie, aunque no era secreto que salía, aún así no quería llamar la atención.

Una sonrisa divertida se plantó en su rostro cuando vio a Felix al volante de una furgoneta hippie color verde pastel. El rubio llevaba el pelo recogido en una media coleta, una camiseta blanca con una chaqueta deportiva, y en sus labios sobresalia el palillo de una piruleta que estaba comiendo, a Jisung le pareció que estaba fingiendo que este era un cigarrillo, lo confirmó cuando al acercarse este lo miró socarrón quitandose el "cigarrillo" de la boca con dos de sus dedos y le sonrió de costado. Bajó la ventanilla del lado del copiloto.

- ¿Te llevo, lindura? - El castaño soltó una risita que hizo a sus ojos medialunas. Las bromas de su mejor amigo no dejarian nunca de divertirle, además, el rubio tenia esa facilidad por hacer reir a cualquiera en su entorno y contagiar su felicidad. Tenia un aura que hacía a cualquiera sentirse cómodo.

- ¡Claro! .. cuando no traigas una furgoneta y en su lugar un deportivo. - atacó Jisung conteniendo la risa. Era muy poco común ver una de esas en Corea, estaba viejita aunque muy bien cuidada pero a veces le traia problemas al rubio.

Felix nunca podría deshacerse de ella, porque como él decía, convina con su espíritu. Era su adoración. Por eso ante el comentario de Jisung jadeó ofendido.

- ¡Oye! Si quieres puedes ir caminando, allá te espero. - Espetó Felix con una sonrisa de autosuficiencia, poniendo primera. Avanzó un metro cuando el ruido de algo estampandose contra la puerta del copiloto lo hizo frenar de golpe y soltar un grito. Jisung se habia pegado a la puerta, tomando el marco de la ventanilla abierta, El rubio hizo una mueca cuando vio la cara de su mejor amigo descomponerse exageradamente, amenazando con hacer berrinche. - Dios, ten piedad de mi. ¡No pongas esa cara y ya entra!

El castaño felizmente entró, acomodandose en el asiento. Dejó el bolso detras en lo que Felix aceleraba tomando el camino directo para salir de la ciudad, abrazó su mochila sobre sus piernas.

Felix le lanzó una mirada rápida, tuvo curiosidad - ¿La trajiste?. - La respuesta de este fue abrir la mochila para sacar un bolsito mas pequeño, cuadrado y negro, el cual abrió para dejar ver una cámara profesional con un lente mas grande que la misma cámara. El rubio rió - Hyunjin va a matarte.

- Nah, no puede vivir sin mi - despreocupado le restó mayor importancia, lo que hizo a su mejor amigo sonreir un poco, su mirada se volvió oscura en lo que se imaginaba cosas. Hyunjin no era de las pesonas fácil de molestar, pero tenía cierta peculiaridad cuando se trataba de cobrarse cosas. Jisung captó de inmediato lo que pasaba, a veces el rubio podia ser muy mal pensado. El castaño carraspeó antes de darle un golpe en el brazo a Felix. - No se va a enterar, además, siempre la cuido bien.

- Un día no te vas a salvar, y por favor quiero estar ahí cuando eso suceda. - Jisung le hizo un puchero de reproche mientras volvía a guardar la cámara. Él tenia la leve sospecha de que su novio sabía muy bien que solía robar su cámara cuando salía con Felix, el mayor no era tonto. Pero hasta el momento este no daba indicios de que lo supiera, considerando que esa cámara era su objeto más preciado.

El viaje era relativamente corto, por lo que fue tranquilo, música de fondo y charlas ocacionales.

Una más de sus frecuentes "escapadas". A Felix le gustaba mucho viajar, no importaba si era un recorrido corto o uno que llevara días, no importaba si era un lugar poco concurrido o si era un lugar famoso, no importaba si era de gran interes turístico, no importaba si simplemente habia encontrado un lugar escondido que a nadie le parecía interesante. El chico siempre encontraba lo maravilloso en cada simple viaje, en cada lugar, en cada naturaleza, en cada carretera. Amaba los pequeños detalles, las cosas simples, los secretos escondidos en cada lugar que visitaban.