La luz del portal cegó a Bruce por un par de segundos, sin importar eso hizo lo que su naturaleza consideró correcto, irse. Cualquier persona con el equipo necesario notaria el cambio en los materiales conductores de electricidad de los edificios al rededor, de hecho cualquiera notaria que algo extraño paso. El aumento de energía dejó frito cada aparato o electrodoméstico al menos 4 metros a su alrededor, el caballero de la noche supone que se debe al cambio abrupto en su invento y a la gran explosión en su lugar de origen.
—Debo cambiarme... esto no se verá correcto.— Murmuró Bruce adentrándose a un pequeño callejon donde sin ninguna vergüenza cambio su armadura por lo que utilizaba comúnmente en su vestimenta civil, una camisa de cuello de tortuga color negro, un pantalón de vestir caqui hecho a su medida y un par de zapatos bien lustrados. Con cuidado acomodo el cuello de su camisa asegurándose de que el moretón violeta causado por el estrangulamiento no se notase.
Al guardar su traje de vigilante decidió revisar si el celular que llevaba funcionaba, no fue sorpresa que lo único que fallaba era la recepción, después de todo los satélites a los que estaba vinculado no estaban al alcance. No le pareció grave, un par de arreglos lo solucionarían así que no vio la necesidad de comprar uno nuevo.
—Bien, por ahora no habrá mas Batman, no necesito llamar la atención, por ahora.— Bruce suspiro presionando sus manos contra su pecho, pensar en el pasado lo estaba poniendo nostálgico. Negó para si mismo tomando con firmeza las maletas en sus manos, no servía de nada sentirse miserable en un momento como este.
Camino por todo el lugar hasta llegar a un hotel lo suficientemente acogedor, al no poder seguir su estilo de vida anterior evito los lujos. Bruce opto por salir a conocer un poco el lugar y buscar algo que realmente necesitaba, una computadora.
Pudo describir el estado en el que se encontraba, New York. La misma gran ciudad que ha visitado incontables veces pero ahora le era desconocida, lo que más le llamó la atención fue una gran torre con una A en la parte más alta. Le recuerda un poco a su propio edificio en su ciudad natal y también un poco al gran diario donde una vez trabajaron Clark y Lois. Su mente dejó de divagar cuando una gran figura de color rojo metálico se distinguía en el cielo, se dirigía a la torre con una A en la punta.
—No es una sorpresa que exista ese tipo de tecnología, los meta podrían existir aquí...— Murmuró Bruce entrando a una I shop, con un pequeño vistazo pudo distinguir que laptop escogería así que la compro con dinero en efectivo, tenía suerte de traer consigo lo suficiente para comenzar a piratear su información y documentarse como un ciudadano estadounidense.
Su camino a casa fue tan tranquilo como su llegada, eso no evito ninguna paranoia. Su mente no podía estar en calma, sus pensamientos se dividían en dos: El gobierno de USA podria estar vigilando los rastros de actividad que dejo su medio de transporte o Superman podría estar en camino. Su primer castigo es no poder dormir, nunca abandonar el miedo a que Kal-El venga en su búsqueda. Se lo merece y lo sabe, acepta con gusto vivir con temor para pagar un poco por romper su promesa de proteger a todos y nunca matar. Nunca debió romper su código.
Antes de poder notarlo estaba en el centro de Times Square, la zona más concurrida en la que pudo poner pie. Con agilidad se abrió paso entre las personas pero algo llamó su atención, una cafetería que se veía muy elegante y costosa. En un pequeño cartel se encontraba un anuncio: "Se busca mesero".
Bruce acomodo la bolsa con su laptop nueva y se acercó decidiendo que sería un buen inicio el obtener un empleo, mientras más se acercaba leía cada requisito. ¿Estudios de nivel medio? bien, ¿Nociones básicas de cocina? excelente, ¿Buena apariencia? También, ¿Hombre de al menos 1,80 m? Lo tenía, pero era algo rebuscado... ¿Soltero? Prefirió ya no leer, sabía que buscaban un atractivo visual.
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Let me Go
Fanfiction"No lamento nada de lo que hice, Clark. Ahora déjame ir". Batman sabia que no tenia nada en lo que una vez fue su hogar, no después de traicionar a su propio equipo para evitar la desgracia de un mundo que aún no conocia a los amos de la justicia. N...