𝑪𝒖𝒂𝒏𝒅𝒐 𝒏𝒐𝒔 𝒄𝒐𝒏𝒐𝒄𝒊𝒎𝒐𝒔 [𝑼.𝑹.𝑺.𝑺. 𝒙 🇵🇪]

Parte 10

—A-Ah.

—No has cambiado, precioso —dijo sujetando el mentón del europeo. Las mejillas de este se sonrojaron por lo seductor que era ese latino, ya hasta se estaba olvidando de toda la situación de su alrededor por esos atractivos músculos y ojos color dorado que cada segundo lo enloquecían.

UK puso su cara más asqueada y confundida por el comportamiento de su aliado, pero ahora ese no era el tema, sentía curiosidad por lo grande que era ahora URSS debía haber pasado algo muy importante en su nación para que creciera de esa manera, ni se había puesto así en su revolución.

—Honey, por favor.

—Por favor nada, he dicho que URSS se irá conmigo para tener una vida mejor —sentenció yendo por el eslavo, lo sujetó de su mano para sacarlo de ese lugar, URSS vio a USA con una mirada de victoria al ser agarrado por el latino que ahora se veía como un pequeño ratón.

—¿Quiere decir que me quieres contigo? —preguntó sonrojado con una sonrisa.

—¡Sí! Más que nada, eres como un hermano que quiero proteger y querer, no te quiero ver triste URSS...

—¿E-En serio? —rio nervioso por haber pensado otra cosa, además no era posible que Perú se sintiera atraído por él —creo que debería ir a acabar lo que tengo pendiente —dijo soltándose de su agarre.

—E-Espera.

—¿Sí? —preguntó emocionado al ver que el peruano lo quería detener.

—Tienes que cambiarte de ropa... tu pijama ya no te queda, se te ve to-todo.

—S-Sí... voy a cambiarme —habló desanimado.

Perú lo vio irse y cuando se aseguró que estaba solo soltó un suspiro aliviado —Que ho-hombre~ ¡¡AYY!! Es hermoso, pero NO, yo no puedo tener estos pensamientos arrechos por URSS, aunque se vea como un hombre grande y a-atractivo~ —las mejillas del peruano se sonrojaron muchísimo al morder su dedo, su corazón latía muy fuerte y sentía un bulto entre sus piernas, ya sabía que significaba y estaba avergonzado por eso.
—De-Debe ser porqué no he tenido sexo en años además URSS es un niño... es menor a mí.

...

Perú cocinaba tranquilo el almuerzo para todos, no quería hacer nada en especial aunque se hermano se había ofrecido a ayudarlo sabía que terminaría en un desastre, la rivalidad de ambos era la razón.
Cuando estaba tratando de alcanzar la sal del estante más alto una sombra pudo ver, un cuerpo alto y enorme estaba detrás suyo, su cara se volvió un tomate.

—Vi que necesitabas ayuda —dijo el soviético con una sonrisa amigable entregándole lo que necesitaba.

—Gra-Gracias —agradeció avergonzado.

—¿Pasa algo? —preguntó curioso.

—N-No jaja —Perú se volteó para no verlo, hizo como si estuviera buscando algo en la alacena para disimular sus nervios y URSS lo notó.

¿Le incómoda mi ropa? No creo, su hermano me la dio y dijo que me veía bien, pensé que él también me diría eso pero solo me evita.

—Perú ¿Ya no te agrado? —sus ojos empezaron a lagrimear justo cuando el peruano se había volteado por esa pregunta.

—¿Qué? ¡NO! ¡ME AGRADAS DEMASIADO! No pienses eso —dijo abrazándolo.

USA aplastó el ramo de flores que tenía en manos conteniendo sus ganas de darle una paliza a ese eslavo.
Justo cuando iba con la intensión de disculparse y arreglar las cosas con Perú se topaba con esa repulsiva escena.

—Montherfucker.

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