Un cambio de historia

Capítulo 30

Hola, ¿cómo están? Espero de maravilla, mucho éxito en sus trabajos, escuela, proyectos,  saben que ustedes pueden. 

Agradezco su infinita paciencia, muchas gracias por esperar la actualización de esta historia como de la otra, agradezco también por llevárselo a sus favoritos, votar, comentar, hasta seguirme, muchas gracias.

Sin más que decir, disfruten la lectura.

Disculpen las faltas de ortografía sin querer se me van. 

Advertencia durante la lectura. 

Capítulo 30

Shen Yuan intenta controlar los latidos alocados de su corazón, cuando sus labios son atacados con una facilidad innegable por parte de sus pequeños, oh en una sola palabra de sus parejas.

Ya no es posible controlar a esos mocosos calientes con simples besos en los labios, ignoraba cómo se habían transformado en besos intensos y llenos de lujuria.

Su cuerpo siente cómo se quema, mientras sus manos han ido a parar a la pared donde se encuentra inmovilizado, la queja se atora en su garganta siempre que sus pequeños aparecen para devorar sus labios.

Más de un mes, en donde ellos han aprovechado del permiso entregado en bandeja de plata, dejándose llevar por el sentimiento que le quema en el pecho, más que una llama que lo consume, es algo más intenso, oh algo que no puede comprender del todo, se deja llevar por momentos intentando comprenderse del todo, pero sin hacerlo, negándose a amar más de lo permitido casi al borde de su cordura.

Los primeros días fueron besos sutiles como aleteos de mariposa, no comprende cómo cambiaron tanto al grado de casi devorarlo, intenta mantenerse con los pies en la tierra, empuja a uno y luego al otro, cuando sabe que quieren tocar más de lo permitido.

Quiere notar el arrepentimiento en ambos rostros, lo que recibe es esa sonrisa coqueta en uno y en el otro la arrogancia por lograr lo que se proponen.

Castigarlos es lo que se le ha venido a la mente, pero existe ese algo que evita que lo haga, tal vez las miradas de perrito apaleado causando que se tense en su sitio o puede ser que el mismo disfrute de esas acciones de ambos.

Sea lo que sea, sus labios siguen siendo atacados cada vez que ellos lo piden, dejándose llevar.

Se ha dado cuenta de que otra cosa que hace cuando ellos lo besan, es seguir esos labios cuando se alejan de los suyos, dejando de lado solo un beso para convertirse en más de dos, busca contacto más calidez, más de ellos, existe ese algo que le aterra y esto es una anestesia para sí mismo.

En esta ocasión Bingge es quien se encuentra sujetando sus manos mientras siente como esos labios lo devoran, ha intentado apartarlo hasta que una pierna va a parar en su entrepierna y presiona un poco sus partes.

—ahh Bingge no— gime en la boca ajena intentando detener al mocoso caliente, intenta empujar para girar el rostro.

— acaso no escucharás a tu maestro— regaña Shen Yuan, mientras esos labios han ido a parar a su mentón y cuello.

La sonrisa arrogante que sale de los labios de Bingge, sabe lo que intenta hacer su Shizun, esta vez no.

— lo que yo veo es a mi pareja, no a mí shizun— susurra en la oreja para besar el lóbulo, empujando un poco más su pierna sintiéndose satisfecho al saber que empieza a despertar cierta anatomía.

Las mejillas arreboladas, sus manos siendo sujetadas, una jodida pierna estimulando su cuerpo, empezado a gemir, mocoso caliente, donde aprendió todo eso, sabe que en el otro mundo toqueteo sin llegar esto.